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Un profundo suspiro salió de la boca de (M/n) justo después de que terminó de verter la masa del pastel en la bandeja de metal, nunca había horneado nada antes, pero su amante de las mascotas lo estaba ayudando. Puso la bandeja dentro del horno y lo cerró.
Sus ojos (e/c) miraron a Muchiro, su novio mitad zorro, mitad humano. El hombre de cabello negro con las puntas verdes menta estaba mezclando crema batida y chocolate derretido, totalmente concentrado en lo que estaba haciendo. Sus manos colocaron la crema dentro del refrigerador y sacó el chocolate derretido del microondas.
Había algo en su expresión seria que hacía que (M/n) se sintiera... cachondo.
Y entonces decidió jugar un poco con el macho híbrido.
Sus brazos lo envolvieron lentamente desde atrás, colocando su barbilla sobre el hombro del más pequeño. Muchiro no reconoció su presencia, agarró las frutas que había sacado previamente para cortarlas. Quería comerlas cubiertas de chocolate después.
(M/n) notó que Muchiro no le estaba prestando atención, por lo que movió su rostro hasta que sus labios se colocaron en la nuca, moviendo su cabello a un lado y cubriéndolo de besos húmedos a lo largo de su piel.