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10 de junio del 2024

Daniel's POV

Me desperté temprano al día siguiente, con una sensación de esperanza renovada. La noche anterior había sido un buen paso para sanar las grietas entre Sara y yo, y ahora quería hacer algo especial para mostrarle cuánto significaba para mí.

Después de preparar un desayuno sencillo, me dirigí a la habitación donde Sara aún dormía. Me aseguré de que todo estuviera listo antes de despertarla. Había pensado en un regalo que reflejara mis sentimientos y el esfuerzo que estaba dispuesto a poner en nuestra relación.

En la cocina, había colocado el regalo cuidadosamente envuelto en una caja de color azul claro, junto con una nota que había escrito con mucho cuidado. La caja contenía un pequeño colgante en forma de corazón con una inscripción que decía "Nuestro amor es eterno". La idea era que el colgante sirviera como un recordatorio tangible de lo que significaba para mí.

Sara se despertó con el aroma del café y los croissants recién horneados. La encontré en la cocina, estirándose y preparándose para comenzar el día. Cuando la vi, no pude evitar sonreír.

—Buenos días —dije con una sonrisa—. Tengo algo para ti.

Sara miró curiosa mientras me acercaba con la caja en la mano. La colocó sobre la mesa y le hice una seña para que la abriera.

—¿Qué es esto? —preguntó, con una mezcla de sorpresa y emoción.

—Ábrelo y verás —le respondí.

Sara comenzó a quitar el envoltorio con cuidado, y sus ojos se iluminaron al descubrir la caja y su contenido. Tomó el colgante entre sus manos, admirando el diseño.

—Es precioso —dijo, su voz llena de emoción—. ¿Qué significa?

—Es un símbolo de lo que siento por ti —le expliqué—. Quiero que lleves esto contigo y te recuerde cuánto te amo y cuánto estoy dispuesto a hacer por nosotros.

Sara sonrió con lágrimas en los ojos. —No puedo creer lo atento que eres. Esto es increíble, Daniel. Gracias.

Me acerqué y le di un suave beso en la frente. —Lo haces todo mucho más fácil y significativo para mí. Quiero que sepas que estoy aquí para ti, y que estoy comprometido con nosotros, sin importar lo que venga.

Sara se acercó y me abrazó, y pude sentir cómo nuestra conexión se fortalecía aún más con este gesto.

—Te amo, Daniel —dijo en un susurro, mientras se separaba para mirar el colgante que había colocado alrededor de su cuello.

—Yo también te amo, Sara —respondí, sintiendo una profunda satisfacción al ver su alegría.

Pasamos el resto de la mañana juntos, disfrutando del desayuno y conversando sobre nuestros planes para el día. Aunque sabíamos que había desafíos por delante, estábamos dispuestos a enfrentarlos juntos, con el firme propósito de construir una relación aún más sólida.

Sara's POV

Después de recibir el hermoso colgante de Daniel, me sentí abrumada por una mezcla de emociones. Su regalo era más que un simple objeto; era un símbolo de su compromiso y el amor profundo que sentía por mí. No pude evitar sonreír al ver el colgante en el espejo, la inscripción "Nuestro amor es eterno" resonaba profundamente en mi corazón.

—Es tan hermoso, Daniel. No sé qué decir —le dije, con lágrimas de felicidad en los ojos.

—No tienes que decir nada —respondió él, tomando mi mano—. Solo quiero que sepas cuánto significas para mí y lo importante que eres en mi vida.

Me acerqué y lo abracé, dejando que la calidez de su cuerpo me envolviera. Sabía que habíamos tenido nuestras diferencias, pero también sabía que el amor que compartíamos era genuino y fuerte.

—Gracias, de verdad. Esto significa mucho para mí —susurré contra su pecho.

—Me alegra que te guste. —Daniel me miró con una sonrisa—. Ahora, ¿qué te parece si pasamos el día juntos y hacemos algo divertido?

—Me encantaría —respondí, sintiendo que todo parecía estar en su lugar nuevamente.

Daniel's POV

Decidimos pasar el día juntos, haciendo algo que ambos disfrutáramos. Después de desayunar, propuse una salida al parque que Sara había mencionado antes. Quería asegurarme de que pasáramos tiempo de calidad juntos, alejados de las tensiones y preocupaciones que habíamos enfrentado.

En el parque, caminamos por los senderos y disfrutamos del aire fresco. La conversación fluía de manera natural, y me di cuenta de cuánto había echado de menos esos momentos sencillos pero significativos con Sara.

—Sabes, me encanta cómo todo parece más sencillo cuando estamos juntos —le dije mientras nos sentábamos en un banco, observando a las familias y a otros visitantes del parque.

—Sí, es verdad. A veces, los problemas parecen más pequeños cuando estamos en lugares como este —respondió ella, mirando el paisaje con una sonrisa.

Nos reímos y charlamos sobre todo, desde recuerdos compartidos hasta nuestros sueños para el futuro. Era evidente que ambos estábamos disfrutando de la compañía del otro y de la tranquilidad del entorno.

Sara's POV

La tarde pasó rápidamente, y mientras regresábamos a casa, me sentía rejuvenecida y en paz. El regalo de Daniel y nuestra conversación en el parque me hicieron sentir que estábamos en la misma sintonía nuevamente.

—Daniel, quiero agradecerte por todo —le dije mientras estábamos en el coche—. Por el colgante, por el tiempo que pasamos juntos, y por ser tan comprensivo.

—No tienes que agradecerme. Solo quiero que sepas que estoy aquí para ti y que quiero construir un futuro juntos. —Su mirada era sincera y llena de cariño.

Cuando llegamos a casa, decidimos preparar una cena juntos. Cocinamos en la cocina, riendo y disfrutando de cada momento. Era evidente que ambos estábamos comprometidos a trabajar en nuestra relación y a hacer que funcionara.

Mientras servíamos la cena, me detuve un momento para observar a Daniel. A pesar de las dificultades, estábamos construyendo algo hermoso y duradero. Sabía que, aunque había desafíos por delante, nuestra relación estaba en el camino correcto.

Daniel's POV

La noche avanzó sin contratiempos, y mientras nos sentábamos a la mesa para disfrutar de la cena que habíamos cocinado juntos, me sentí agradecido por lo que teníamos.

—Sara, quiero brindarte un brindis —dije, levantando mi copa—. Por nosotros y por todo lo que estamos construyendo juntos.

—Por nosotros —respondió ella, levantando su copa también.

Chocamos nuestras copas y nos miramos con una sonrisa. En ese momento, sentí que todo estaba en su lugar. Aunque aún había cosas que resolver, estábamos dispuestos a enfrentarlas juntos, con amor y determinación.

La noche terminó con una sensación de tranquilidad y esperanza. Mientras nos despedíamos y nos dirigíamos a nuestras habitaciones, supe que nuestro camino no sería siempre fácil, pero también supe que juntos, podríamos superar cualquier obstáculo.

El regalo de Daniel y nuestra reconexión me hicieron sentir que estábamos listos para lo que viniera, y que nuestro amor era lo suficientemente fuerte como para enfrentar cualquier desafío.

You are my only victory -Yo soy plex Donde viven las historias. Descúbrelo ahora