-No te voy a dejar....Deku....nadie me va a separar de ti-.
-No quiero irme......cuida a la niña si.....es como mi hija-.
El amor es algo que llega sin aviso, es una sensación bonita que no querrás perder.
Katsuki es un alfa con una cachorra, nadie...
Ya era tarde, por lo que se encontraba en su recamara, su madre ya dormía y el seguía con la mirada perdida, Todoroki lo odoaria por lo atrevido que había sido al llevar a Mahoro al trabajo, aún así se sentía contento, su pequeña ya estaba dormida, solo por las feromonas de Izuku.
Las feromonas de la madre o un Omega eran más rápidas que canciones de cuna o a brazos. Su mente rondaba en las últimas palabras del peliverde.
Gracias por traerla, me gustaría que más seguido viniera así me acostumbro a tenerla conmigo.
Su madre se lo había dicho ya muchas veces, que ese Omega no lo quería para amigo, no, lo quería para comer en su mesa y dormir en su cama. Aún así, aunque lo llamarán tonto, le tenía algo de respeto a la madre de Mahoro, aunque está la allá olvidado.
Miro a su hija tan tranquila abrazando otra mascada de Izuku.
-Ojala todo fuera muy fácil, necesitás una madre y el... Bueno desde que llegué quiere ser la tuya, ¿Si lo querras?, o lo vas a odiar cuando estés más grande-. Susurro mirando a su pequeña.
Ya estaba cansado de todo eso, mañana si llegaría a tiempo a su trabajo, no iría Mahoro por lo que no abría escudo.
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-Nos vemos mañana Mina, cuídate-. Despidió a su chófer. Estaba al frente de su casa, con paso lento caminó. Al parecer estaba su padre, la casa era iluminada por las luces.
Entro y su nariz percibio el rico aroma de la mantequilla. La curiosidad le ganó y se acercó a la cocina, estaba su padre con un mandil azul.
-Pasa Izuku, veo que te fue bien por la cara que traes-. Le hablo su padre mirándolo. -Hize panqueques, siéntate-.
El peliverde se sentó, durante semanas tal vez ya no se había sentado en ese comedor. Al frente su padre puso dos panqueques adornados con chocolate derretido y trozos de fresa. A simple vista se veía apetitoso. Al lado del plato coloco un café con una deliciosa espuma, simplemente delicioso, fue su primer pensamiento del peliverde, más algo si sabía, su padre quería algo que solo el podía hacer.
-Come hijo, se van a enfriar y ya no saben tan bien-. Dijo su padre. Izuku tardo en decidir si en verdad los iba a comer. Solo suspiro, tal vez solo era una acción de amabilidad entre familia. Probó el primer bocado y wow, tenía que reconocer que su padre lo único que sabía hacer en la cosina, lo preparaba de maravilla.
Se comió el primer panqueque, solo así su padre hablo.
-Hijo, ayer me llamo Todoroki y me dijo lo mismo de todos los días-. Se sentó quedando enfrente del Omega. -¿En verdad te hizo tanto daño?-.
Izuku dejo de comer, fue muy tonto al intentar disfrazar algo tan lindo en una posibilidad de redención.
-Por un momento crei que en verdad te interesaba nuestra relación de padree hijo, pero veo que no, estas mas concentrado en que va a decir la gente de lo que le pase a tu empresa, se me fue el apetito, buenas noches-. Se levantó del comedor, Hisashi tomo su cabeza, ese niño lo estaba volviendo loco.
