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Alguna vez sentimos miedo por muchas cosas, una pesadilla, un accidente o incluso una tragedia pero a veces tratamos de ser fuertes para los demás y es justo lo que pasaba Yoriichi, sentía que no era suficiente para proteger a las personas de los demonios, según su destino es aniquilar a ese hombre que ha causado muchas desgracias pero y si el destino quiere algo diferente para el, está vez estaban dentro de un barrio en las inmediaciones de Tokyo con Sumiyoshi vagando en aquel barrio que sus linterna iluminaban todo ese lugar de color rojo así el joven carbonero o mejor dicho boticario ya sabía que era esos lugares y solamente se sentía incómodo con la presencia de algunas mujeres que fácilmente muchos podrían confundirlas con Makios o Geishas pero ellas eran damas de la noche en burdeles de cada casa que había en ese barrio así el mismo sentía la presencia de demonios pero mediocres asi que serían fáciles de detectar, la misión era eliminar esos demonios así que en una calle levemente oscura empezaron a platicar el plan así Sumiyoshi le dijo al samurai que podría ir a trabajar en alguna casa para poder investigar, fue un no como respuesta de Yoriichi porque el mismo sabia que cosas malas podría pasar el joven demonio asi que por primera vez lo callo diciendo que todavía no acababa el plan que tenía en mente asi el samurai se quedó callado escuchando bien el plan, al término de la plática tuvo que aceptar ya que era una estrategia bien elaborada y discreta asi aceptando pesadamente el plan de Sumiyoshi así el demonio cambio su cuerpo y estatura para entrar con la imagen de la mujer japonesa, salió del callejón asi caminaba tranquilamente hasta que la dueña de una casa la alcanzo así le dió el empleo solo por ser "bonita" así empezaría el plan de Sumiyoshi y Yoriichi para terminar con esos demonios, las mujeres arreglaron un poco a Sumiyoshi asi se dieron cuenta de tremenda belleza que era así la empezaron a instruir en el arte de las damas de la noche así haciéndose pasar por Sumi para no levantar sospechas, Yoriichi vigilaba desde un árbol así observaba a toda la gente que visitaba ese barrio por las damas así supo que Sumiyoshi estaba en constante peligro que trataría estar lo más cerca posible de el.

En las mañanas era puro entrenamiento para Sumiyoshi, querían que el fuera una Oirán de su casa así que era algo muy intensivo eso, al caer la noche Yoriichi se alistó para ir como cliente a la casa donde estaba Sumiyoshi así todas las mujeres lo estaban acosando desde que entró así la señora pidió disculpas así entre todas querían estar con el pero a lo lejos vio a su compañero de mujer así dijo que quería aquella señorita, la señora le dijo que era nueva y no tenía mucha experiencia así el dijo que no pasaba nada ya que solo quería pasar un rato así les dieron a ambos una habitación para ellos solos, al estar solos el demonio le dió un poco de información acerca de desapariciones de mujeres en el barrio y eso le preocupa un poco a Yoriichi, estuvieron platicando hasta que alguien se acercaba así que tenian que pensar rápido y entre la desesperación Yoriichi pidió perdón así se quedaron callados mirándose mutuamente, una señorita tocó dos veces para pedir permiso de entrar así antes de que Yoriichi dijera algo, Sumiyoshi se sentó en su regazo para que fingieran que estaban dándose cariños así el samurai le dió permiso a la joven que entrará...

- Perdón por interrumpir pero la señora le manda esto a la señorita Sumi este obsequio- dice dándole una caja

- ¿De quién es?- dice Sumiyoshi mirando la caja

- Es de un samurai que estaba afuera, quedó encantado por su belleza así que le manda un obsequio, permiso y nuevamente perdón por interrumpir - Dice saliendo de la habitación

Suspira pesadamente Sumi pues sabia que esto era el movimiento de los obsequios cuando un hombre le interesa una mujer del barrio rojo pero Yoriichi no decía lo mismo ya que tenía el aura muy pesada así haciendo que el demonio estuviera alerta pues no había presenciado este aura por mucho tiempo así haciendo que se pregunté porque estaba molesto, a Yoriichi le ardia la sangre del coraje y ni siquiera notaba que estaba celoso de que otro samurai le había dado un obsequio a su demonio, 4 meses casi 5 meses caminando juntos sin separarse que pronto se iba a desvoronar en un abrir y cerrar de ojos por un espadachín que puso la mirada en Sumiyoshi así que no iba a permitir que lo tocará o tan siquiera lo mirará porque no quería perderlo, el joven solo estaba estático por el aura del samurai asi que solo se puso rojo y dedujo que se había puesto celoso por el regalo así que solo sonríe levemente porque probablemente quería ser solo para Yoriichi y no le molestaba la idea al contrario quería estar con el hasta los últimos días de vida del samurai, al salir de la habitación dejando acomodado todo, el demonio se despidió de el así llendo a su otra habitación que el de ojos rojos aprovecho para hablar con la dueña de que le daría dinero suficiente para que solo "Sumi" este disponible para el, la señora no renegó nada al contrario iba a dar la orden de que siempre la tengan hermosa para el, durante el día estaba desesperado por encontrar un buen obsequio muy aceptable así que buscaba por toda la ciudad hasta que encontró un regalo muy bonito, aceptable y duradero, sumi estaba en su habitación a oscuras porque no querían que se dañará más su piel tan perfecta que tenía asi escribía un diario por si el moría debía darle eso a Yoriichi por cualquier cosa que le llegara a pasar así miraba como anochecía así las niñas entraron a vestirla para ese encuentro de nuevo con Yoriichi, estaba listo para otra vez verlo así saliendo la llevaron rápidamente a las otras habitaciones así el otro hombre estaba esperándola y le dió un obsequio así Sumi le rechazo el regalo así el samurai se puso de rodillas para que lo aceptará y en ese momento llegó el samurai de los aretes de hanafuda así el aura estaba presente de nuevo haciendo que el otro se retirará de su vista así las mujeres lo elogiaban por ese carácter tan serio y misterioso que Sumiyoshi estaba agradecido de que haya llegado en el momento exacto y dicho eso ambos entraron otra vez a la habitación asi le dijo que había sentido a varios enemigos en este burdel así dejando de eso aún lado le entrego una caja así el demonio la acepta y la mira...

-¿Que es Yoriichi-san?- dice Sumiyoshi

-Es solo un regalo... ábrelo - Le dijo un poco serio

- Está bien- la abre y se abren sus ojos para después verlo - ¿Me compraste ropa nueva...y una flor de cristal?- dice sacando todo

- Así es... necesitas prendas nuevas para la primavera...y la flor me recordó mucho a ti por tu cabello burdeo- Dice pero internamente estaba muerto de nervios

El emocionado que pidió permiso para cambiarse así después de un rato salió con una yukata decente de colores rojos con negro algo similar a la ropa del samurai así le dijo que le gustaba demasiado, Yoriichi estaba muy feliz de eso así que Sumiyoshi se acercó al hombre de artes para darle las gracias así lo abrazo con cuidado y el otro correspondió quedándose en silencio, fue uno de tantos recuerdos que tenia el demonio de ahora 438 años, estaba leyendo su diario de hace mucho tiempo así miraba a la luna con mucha nostalgia sabiendo que una vez amo al samurai que lo hizo feliz y le dió todo ese amor que necesitaba y claramente aún seguía usando esa ropa que le regaló así suspiraba como un chico enamorado de su primer amor que fue interrumpido por las voces de la casa así bajo para poder hacer su trabajo de médico general pero dejando el libro abierto que lo que decia al último de aquella página era "te amo mucho, Yoriichi-san", corria la Era Taisho, ya todo era más moderno para el demonio de cabellos burdeos así el pudo estudiar como médico general y tras graduarse en 1900 empezó a trabajar así mucha gente le tenía mucho cariño porque era un joven muy amable y entregado a su trabajo que sin saber era un demonio que los atendía y salía por las noches a visitar enfermos para comprar sangre en cantidad pequeñas para Tamayo ya que el comía animales vivos o tomaba sangre de animales ya semi muertos, veía mucha gente morir, nacer e incluso ver las generaciones que el conoció ya sea la generación de los padre ahora veia a los tataranietos y así seguía conociendo gente nueva, Tamayo estaba más cómoda con la presencia de Sumiyoshi como compañero del área médica y precisamente hoy recibió a un hombre recién convertido en demonio así aquel lugar de Azakusa fue interrumpido por ese alboroto que lo llevaron al sótano asi el joven demonio fue arriba a atender a la señorita que estaba herida por su pareja y le puso unos puntos para evitar que se abriera la herida así la joven le agradeció y claro que le tuvieron que explicar la situación un poco tranquila y le prometieron que iban a hacer lo posible por volverlo hacer un humano de nuevo asi la señorita le puso toda la fé a ellos tres, Yushiro-san le explicó que conocieron a un cazador de aretes hanafuda asi Sumiyoshi se quedó congelado, no podía crecer lo que habia escuchando así le pidió de favor que lo buscará y lo trajera, quería ir el mismo pero tenia que ayudar a Tamayo a controlar al demonio asi que mando a yushiro y el con gusto aceptó asi se retiró para buscar al cazador, sumi se sentía tan feliz, triste y una mezcla de emociones en ese momento que Tamayo al subir lo miro y supo lo que pasaba...

-Asi que ya te enteraste...¿Verdad Sumiyoshi?- dijo la demonio

-Si Tama...si es así...las cosas van a empezar a cambiar- dijo el mostrando su cara y sus ojos llenos de determinación

Así ella supo a qué se refería Sumiyoshi que igual puso una mirada de determinación, ambos estaban esperando años y siglos para ese momento que había llegado el momento de hacer su plan, un plan que probablemente sea muy diferente a de todos los cazadores porque ambos compartían un mismo objetivo...destruir a Kibutsuji Muzan.
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Dos soledades - YoriiSumi Donde viven las historias. Descúbrelo ahora