Capitulo 8

310 36 0
                                    


El campamento bullía de actividad mientras todos se preparaban para partir hacia el CDC. La decisión no había sido unánime; Shane había argumentado fervientemente a favor de otra ubicación, pero la mordedura de Jimmy había inclinado la balanza. La esperanza de una cura, por tenue que fuera, era demasiado valiosa para ignorarla.

Nate observó el ajetreo con una mezcla de preocupación y determinación. Sus ojos se posaron en la RV de Dale, ya abarrotada de gente y suministros. Sabía que necesitaban encontrar otra opción para su familia. Fue entonces cuando vio a Steven cargando cajas en su camioneta pickup.

Con paso decidido, Nate se acercó a él. Steven, al verlo venir, dejó la caja que sostenía y se limpió las manos en los pantalones.

—Hey, Nate —saludó Steven, una sonrisa cálida iluminando su rostro cansado—. ¿Cómo va todo?

Nate asintió en reconocimiento. —Steven. Las cosas están... en movimiento. —Hizo una pausa, considerando cuidadosamente sus siguientes palabras—. Escucha, me preguntaba si tal vez tuvieras espacio en tu camioneta. La RV está llena y, bueno, necesitamos un lugar para Sabrina, Luke y yo.

Los ojos de Steven se iluminaron visiblemente ante la petición. —¿Espacio? Claro que tengo espacio. De hecho, iba a viajar solo. Sería un placer llevarlos.

Nate sintió una oleada de alivio. —Te lo agradezco, Steven. Realmente nos estás salvando.

—No hay nada que agradecer —respondió Steven, su mano rozando ligeramente el brazo de Nate—. Somos un grupo, ¿no? Tenemos que cuidarnos unos a otros.

Nate asintió, consciente del toque pero eligiendo no comentar al respecto. —Cierto. Bueno, iré a informar a Sabrina y Luke. Volveremos pronto con nuestras cosas.

—Los estaré esperando —dijo Steven, su mirada siguiendo a Nate mientras se alejaba.

Nate se dirigió rápidamente hacia la tienda que compartía con Sabrina y Luke. Al entrar, los encontró terminando de empacar sus escasas pertenencias.

—Hey —dijo, atrayendo su atención—. Tengo noticias. Nos iremos con Steven en su camioneta. Dale no tenía espacio en la RV.

Sabrina alzó una ceja, una sonrisa juguetona bailando en sus labios. —¿Steven, eh? El chico que no puede quitarte los ojos de encima. Interesante elección de transporte, Nate.

Nate suspiró, manteniendo su compostura. —Sabrina, por favor. Es solo un viaje y Steven es... amable.

—Oh, estoy segura de que es muy amable —respondió Sabrina, su tono cargado de insinuación.

Luke, que había estado escuchando la conversación, intervino con curiosidad. —¿El señor Steven es especial para ti, papá?

Nate se arrodilló frente a Luke, su voz suave pero firme. —Steven es un amigo, Luke. Un amigo que nos está ayudando en un momento difícil. Es importante ser agradecidos con quienes nos tienden una mano, ¿recuerdas?

Luke asintió solemnemente. —Sí, papá. Lo recuerdo.

Nate sonrió suavemente, revolviendo el cabello de Luke. —Buen chico. Ahora, ¿tienes todo empacado?

Luke asintió con entusiasmo. —Sí, papá. Incluso guardé mi cuchillo donde me enseñaste, bien escondido pero fácil de alcanzar.

—Excelente trabajo, campeón —dijo Nate, el orgullo evidente en su voz.

Sabrina observó el intercambio, una mezcla de amor y preocupación en sus ojos. —Nunca pensé que estaría orgullosa de ver a mi hijo de diez años empacar un arma —murmuró, más para sí misma que para los demás.

Latidos Del Apocalipsis (Rick Grimes x Male)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora