Cinco años después...
- ah, ah, amor.- gritaba del dolor.- Me duele mucho, creo que están por salir en cualquier momento.
- Vamos, rápido, al hospital.- me agarró de los brazos y me ayudó a pararme.
Embarazada primeriza. Quien lo diria, no? A mis 26 años y a punto de dar a luz a gemelos, si a gemelos. Una parejita. Nos matamos dos años tratando de buscar un bebé, y nunca lo conseguía, me estaba dando por vencida cuando de la nada un día no me bajo la regla, y pensamos que era uno de esos atrasos normales que les pasa a las mujeres, pero no, a los dias me empecé a sentir mareada y con náuseas. Creíamos que estaba enferma, pero recuerdo perfectamente lo que nos dijo el médico:
- No señorita.- se reía.- Usted no está enferma, está embarazada.
Nuestras caras de entusiasmo ni se las cuento. Casi pegue un grito cuando dijo eso. Nos pusimos súper felices con esa noticia y al tiempo nos dijeron que no era uno, que eran dos, una parejita. Debo confesar que tenía miedo, mucho miedo, y aún lo tengo. No estaba preparada para ser madre de uno, porque tenía miedo y con esa noticia me puse más nerviosa. Recuerdo la cara de felicidad de Marta, Elizabeth y mis amigos cuando les conté la noticia en una reunión familiar. La cara de Liv fue la mejor, se emocionó tanto que no solo lloraba como los demás, sino que se lanzo a mi y empezó a hablarle a la panza.
- Yo seré su tía favorita, oyeron?- recuerdo que decía.
- Yo también lo seré.- chillaba Alicia.- Seremos las mejores tias del mundo.
- Yo voy a ser el tío que los consiente.- decía Antonio.
Fue un día maravilloso. Y ahora aquí estábamos, un 22 de junio, rumbo al hospital privado al que íbamos siempre. Adán manejaba lo más rápido que podía y ni hablar de la velocidad con la que salió corriendo del auto cuando llegamos al hospital. Corrió a pedir una silla de ruedas y ayuda para que me trasladarán. Me llevaron hasta el piso de parto, y nos dieron una habitación para que pudieran prepararme. Adán dejo los bolos de los bebés en la mesa que había, mientras las enfermas me ayudaban a poner la bata azul esa que les ponen a los internados. Me ayudaron a acostarme en la camilla y me estubieron controlando
- En tres horas podrá ingresar a sala de parto.- comentó una enfermera.- La vendremos a buscar.- asentimos.- Mientras tanto, aguante las contracciones, le vendrán más fuertes cada ves.
Se fueron y nos dejaron solos en la habitación.
***
Estamos en la sala de partos del hospital, rodeados de monitores y equipos médicos. Esta acostada en la cama, con una bata de hospital y un monitor fetal en mi abdomen. Adán esta a mi lado, sosteniendo mi mano y mirándome con preocupación y amor.
-¿Cómo te sientes, mi amor?- me pregunto, acariciando mi mano.
Me miras con una mezcla de dolor y determinación.
- Estoy lista para esto.- te dije respirando profundamente.- Quiero ver a nuestros bebes.
La enfermera entra en la habitación, sonriendo.
- Todo está listo.- dice.- El doctor va a venir en cualquier momento para empezar el parto.
Te apreté la mano, y me miraste con todo tu amor y apoyo.
- Estoy aquí contigo, siempre.- me dijiste.- Vamos a hacer esto juntos.
Adán:
La enfermera nos informa que el doctor va a realizar una revisión para evaluar el progreso del parto. Chiara se preparó para la revisión, y la te ayude a ajustar la bata de hospital y a encontrar una posición cómoda.
El doctor entra en la habitación, sonriendo amablemente.
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Entrelazados Por El Destino ( COMPLETO )
RomansaUn choque, dos vidas completamente distintas y un trato. Así comienza está historia. Chiara es una chica con problemas financieros, y Adán es un chico de una familia con muchísimo dinero. Esa tarde, cuando chocan por accidente, sus vidas cambiarán...