Se negó a creerlo al principio, pero una vez observó con cuidado las dudas se desvanecieron y pudo ver con claridad, como sí le hubiesen quitado una venda de los ojos. Fue vergonzoso fingir que no sabía la verdad una vez la descubrió, su mente se nublaba de furia cada que miraba la cara de Aemond, deseaba arrancarle el otro ojo y comérselo para darle fuerzas a su bebé pero debía controlarse. El bebé era la única razón por la cual no lanzaba a su tío por una ventana... o quizás por su orgullo; que se había visto herido tras el engaño de su esposo y la mucama.
Ahora era más que obvio, cada palabra, incluso cada mirada del alfa ya no podían mentirle y la sonrisa de la mujer ya no le parecía reconfortante, ahora parecía que se burlaba de Lucerys y su inexperiencia con los alfas. No podía culpar a nadie más que a él, era joven y estúpido, demasiado inocente al pensar que su esposo no era como "esos otros esposos"; pero lo era y ahora su corazón y cerebro sufría las consecuencias. Joffrey le advirtió, Rhaena se lo dijo en la cara, pero el mismo Aemond fue el único que se lo mostró.
El bebé de Alys era de Aemond, no había duda. Esos dos se habían burlado de él...¿Por cuánto tiempo? El embarazo de Alys era más avanzado que el de él y por la forma en que lo trató el día de su boda, supuso que fue desde antes. Giró los ojos pensando en ello, la forma en la que actuaban, la forma tan... patética que tenía Alys de burlarse, ahora lo notaba en su voz, cuando insistía en bañarlo en canela, Aemond ya no le pertenecía a ella, así que solo podía alejarlo de él como podía.
Aemond le parecía aun más patético a comparación de la mujer, después de pasar la noche con ella, el rubio actuaba culpable, tal vez de manera inconsciente, pero siempre terminaba con excusas que Luke ni siquiera pedía. Que estaba con su madre, con su hermana, con la guardia en Dragonpit...pero el omega sabía dónde estaba y ya no podía evitar rechazar su toqué cuando el alfa lo insinuaba, poniendo de excusa el sentirse con nauseas; el efecto era como una bola de nieve, entre más lo rechazaba Lucerys, el alfa más acudía a la mujer.
Estaba seguro de que su tío no se percato de la conciencia de Luke sobre la situación, quizá porque realmente no le importaba Luke. Ahora podía ver como lo único que disfrutaba Aemond de él, era la satisfacción y el placer que le causaba saber que era suficiente para merecer a un príncipe Targaryen, que Luke era "lo que Aemond se merecía". Alys ya lo había dicho muchas veces antes, pero solo ahora tomaba conciencia de aquellas palabras: Él solo era un premio para Aemond.
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Como nacen los Dragones (LUCEMOND/OMEGAVERSE)
FanficEn su camino al altar Lucerys había pensado en todas las posibles muertes que Aemond le daría en la noche de bodas. Todos esos años había tratado de tranquilizarse, su madre también lo había intentado, pero todo se reducía al miedo que ahora sentía...