Capítulo 6

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En Infratierra, él Rey Dragón invita al consejo blanco a su reino para que se familarizaran con el consejo negro. Consejo del Rey Ragos.

-Es increíble el estilo de este palacio. -Lord Stanley alaga

-Es totalmente diferente al del palacio blanco. -Lord Mano, Gavin Storm, camina tocando las estatuas de oro

Ragos rodea los ojos estando delante de todos, guiándolos a las afueras del palacio.

-Me gustaría que usted fuera nombrado el Rey de Marmoreal. Después de todo, la princesa White lo único que ha hecho es danzar junto al pueblo.

-No debería hablar así de White en mi presencia. Sigue siendo miembro de la realeza y una persona especial para mí, en cierta forma.

-Lamento si lo ofendí, magestad.

-Rey Ragos, el consejo negro está listo. -un hombre mayor y elegante se presenta en su camino

-Faris Marlowe, ellos son los hombres del consejo blanco. -Ragos insita a que los hombres se saluden entre sí

-¿Los mismos que traicionaron a quién les dió trabajo? -dijo con voz impostada, sin vacunaciones ni miedo

-Así mismo, Faris. Pero no vinimos aquí por eso.

Faris capta la orden, lleva a los hombres hasta el centro de una Cresta de dragones. Mientras que el consejo negro, el cuál se integra de cinco hombres y una mujer, miran desde las alturas.

-Para celebrar mi nuevo puesto como el regente de Marmoreal. Decidí darles una sorpresa especial. -Ragos, después de dar su discurso, dirige sus pasos a la Cresta de dragones. En el están todo tipo de dragones, pequeños, grandes, recién nacidos, aún encubados, verdes, rojos, etc

Pero en también está Xyndyn. Su dragona de color fuego, escamas filosas y ojos rosados. Una dragona de batalla.

-Comeras un gran banquete, Xyndyn.

El rey Ragos, montado en su dragona, una figura de poder y majestuosidad indiscutible. Su armadura reluce bajo el sol, reflejando destellos dorados y plateados, mientras la dragona, de escamas rojas y ojos rosados, despliega sus enormes alas con una fuerza abrumadora. A su paso, el suelo tiembla y el viento arrastra cenizas y polvo, dejando claro el dominio que ejerce sobre su entorno.

Desde lo alto de Cresta de Dragones, Ragos observa su reino con una mirada firme y determinada, consciente de la impresión que causa. Su dragona emite un rugido ensordecedor, que resuena como un trueno por los valles y montañas, sembrando tanto respeto como temor en el corazón de quienes lo escuchan.

Los hombres blancos tiemblan al ver la criatura que yace adelante de ellos.

-¿Por qué decidieron remover a White? -es lo primero que Ragos dice

-Su gobierno estaba siendo debilitado por sus aires de bondad y generosidad. Se dedicaba más a ser aceptada por el pueblo que por ver por la seguridad del Reino. El claro ejemplo es cuando fue al Reino de Corazones sin ninguna protección. -Lord Gavin Storm habla por el resto

-Fue un movimiento estúpido de su parte. Pero valiente, si lo vemos de otra manera. Veo un hueco en su argumento, Lord Gavin Storm. La seguridad del Reino Blanco se encarga el jefe en guardia, quién tiene el deber de proteger el bosque. La princesa White es apenas una persona que está entrenado a la adultez, no debieron presionarla demasiado sí la terminarían despreciando.

-No la despreciamos -dice con una risa nerviosa. -, sólo que su mandato es torpe e ingueno.

-Digame algo: ¿El pueblo tiene hambre? -Ragos hace una pregunta que confunde a Gavin Storm

Descendientes 5: Retorno de una ReinaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora