ᴀғᴛᴇʀ sᴄʜᴏᴏʟ

#12

Sunoo despertó a medianoche cuando sintió a Ni-ki roncar en su oído.

Sinceramente él no recordaba que se hubieran dormido abrazados, pues según sunoo, había un peluche de por medio.

Aunque estar durmiendo con ni-ki abrazado a el no era mala idea.

Se sentó y apoyo el su espalda en el respaldo de la cama, rascando su cabeza para luego tomar su teléfono y ver que ya eran las cuatro de la mañana.

Sintió incomodidad en su pecho, pues el era muy Caprichoso en respecto a dormir en pijama, y justo esa noche estaba durmiendo con el Uniforme de la escuela así que luego de pensarlo un poco decidió levantarse.

Pero apenas y se movió para salir de su cama, Ni-ki lo volvió a agarrar de la cintura y lo trajo de vuelta al lado de él, solo que ahora estaban cara a cara

—¿Que paso? ¿Que hora es?— preguntó medio dormido el menor, sacando su mano de la cintura de sunoo para rascarse los ojos.

—Alguien tiene el sueño liviano, no?— Respondió riéndose —Es tarde, voy a ponerme el pijama, tu sigue durmiendo.

Ni-ki bufó, pues odiaba despertarse por la noche, así que cuando sintió que sunoo se levantó, rápidamente se puso en su lugar en la cama, y se tapó con las mantas hasta la cabeza para evitar que la luz le molestara, pues sunoo acababa de prenderla.

El menor se asustó cuando derrepente sunoo le sacó la manta de la cabeza y le extendió un pijama.

—Pensé que también querrías cambiarte, no?

Ni-ki, aún con los ojos entrecerrados, tomo las prendas y con mucha dificultad, y se levantó finalmente.

—¿son a juego?— preguntó mirando detenidamente el pijama.

—No sé, Jungwon me los regalo supuestamente para compartir, pero nunca se puso el suyo. Y además los compró como cinco talles más grandes— dijo sunoo

Ni-ki solo se río, y com toda la pereza del mundo, se dirigió al Baño para cambiarse, por que aunque no lo admitiera, se moría por sacarse el tan incómodo Uniforme que llevaba puesto hace horas.

Prendió la luz y cerró la puerta luego de entrar, mirando detenidamente las cosas que habían en el baño de sunoo.
Vio algunos perfumes, y en una estanteria, observó que habían variados productos para el cuidado de la piel.

Así que asimiló eso con la suave piel de la cara que tenía sunoo, y que él había logrado acariciar algunas veces.

Siguió pensando en eso, hasta que en su mente se topo con cierto recuerdo, el cuál era cuando se habían besado en la biblioteca unas horas antes.

Sin poder evitarlo, comenzó a recordar cada detalle de ese momento.

Y sin darse cuenta, sus mejillas habían empezado a tomar color.

☆

Sunoo terminó de cambiarse rápidamente.

Se miro al espejo un buen rato, hace mucho que no usaba ese pijama en especial, y comenzó a ver detalles que antes no había visto detenidamente,
como por ejemplo dos estrellas juntas y una sin completar en la espalda, tres corazones en la parte del cuello y más cosas.

Se río levemente, antes de sentir como la puerta del baño se abría, saliendo Ni-ki de la misma con su uniforme en las manos.

Sunoo lo miró por el reflejo del espejo, pero desvío la mirada cuando vio como dejaba las ropas en una silla.

El mayor tomó un Peine y lo paso por su cabello, desenredando un pequeño nudo que se había formado en el mismo.