El idiota regresa

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Al llegar a mi apartamento, me encontré con una sorpresa desagradable: Marc estaba esperándome en la puerta. Mi corazón se aceleró, y traté de mantener la compostura.
"¿Qué estás haciendo aquí?" le pregunté, tratando de no alzar la voz.
"Necesito hablar contigo, Sophie," dijo, su voz desesperada. "Por favor, dame una oportunidad."
"No es el momento," respondí, sintiendo la frustración crecer. "Te dije que he seguido adelante con mi vida. No puedes aparecer de la nada y esperar que todo esté bien."
"Lo sé, pero necesito explicarte," insistió. "¿Podemos ir a algún lugar y hablar?"
Suspiré, sabiendo que la confrontación era inevitable. "Está bien, pero será rápido," dije, abriendo la puerta de mi apartamento y dejando que entrara.

Nos sentamos en la sala, y Marc comenzó a hablar sobre lo mucho que lamentaba lo que había hecho y cómo había cambiado. Escuché pacientemente, pero mi mente estaba en otra parte, pensando en Daniel y lo que esto podría significar para nuestra relación.
"Marc, aprecio que te disculpes, pero no puedo volver atrás," dije finalmente. "He encontrado a alguien que me hace feliz, y no quiero arruinar eso."
"¿Alguien más?" repitió Marc, con un tono de tristeza en su voz. "¿Es en serio?"
"Sí, es en serio," respondí firmemente. "Te deseo lo mejor, pero tienes que dejarme ir."
Marc se quedó en silencio por un momento, y luego asintió con la cabeza. "Está bien, Sophie. Si eso es lo que quieres, lo respetaré. Solo quería que supieras lo que siento."
"Lo sé, y lo agradezco," dije, sintiendo una mezcla de alivio y tristeza. "Ahora, por favor, déjame seguir adelante con mi vida."
Marc se levantó y se dirigió hacia la puerta. "Adiós, Sophie. Espero que encuentres la felicidad que mereces," dijo antes de salir del apartamento.

Cerré la puerta y me apoyé contra ella, sintiendo el peso de la confrontación. Sabía que había hecho lo correcto, pero la sombra de la situación aún colgaba sobre mí. Decidí enviar un mensaje a Daniel para ver si podía verlo mañana, necesitaba hablar con él sobre lo que había sucedido.
"Daniel, ¿estás libre mañana? Necesito hablar contigo sobre algo importante," escribí, esperando su respuesta.
Poco después, mi teléfono vibró con su respuesta. "Claro, Sophie. ¿Te parece bien si nos encontramos en mi apartamento?"
"Perfecto, nos vemos mañana," respondí, sintiendo una mezcla de nerviosismo y alivio.

Esa noche, me acosté con la esperanza de que Daniel entendería y apoyaría mi decisión. Sabía que nuestra relación era fuerte, pero este era un nuevo desafío que debíamos enfrentar juntos.
Al día siguiente, me desperté temprano, incapaz de quitarme de la cabeza el encuentro con Marc. Traté de distraerme con el trabajo, revisando y editando algunas fotos, pero mi mente seguía volviendo a la conversación que debía tener con Daniel.
Finalmente, llegó la hora de encontrarnos, así que me preparé y salí hacia su apartamento. Durante el trayecto, traté de ensayar lo que iba a decirle, pero mis pensamientos estaban desordenados. Cuando

llegué, Daniel me recibió con una sonrisa cálida, lo que me tranquilizó un poco.
"Hola, Sophie," dijo, dándome un abrazo. "Pasa, por favor."
Entré y nos sentamos en el sofá. Daniel parecía notar mi nerviosismo y tomó mis manos entre las suyas.
"¿Qué es lo que querías hablar conmigo?" preguntó suavemente.
Respiré hondo, buscando las palabras correctas. "Daniel, anoche, cuando regresé a mi apartamento, me encontré con Marc mi ex . Estaba esperándome para hablar."
La expresión de Daniel cambió ligeramente, mostrando una mezcla de sorpresa y preocupación. "¿Qué quería?"
"Quería disculparse y explicarse," respondí. "Dijo que lamenta todo lo que hizo y que ha cambiado. Quiere que volvamos, pero le dije que no. Le dije que estoy feliz contigo y que no quiero arruinar lo que tenemos."

Daniel asintió, escuchando atentamente. "¿Y cómo te sientes al respecto?"
"Honestamente, me siento aliviada por haber sido clara con él," dije, apretando sus manos. "Pero también estoy preocupada de que esto pueda afectarnos a nosotros. No quiero que pienses que aún siento algo por él."
Daniel me miró a los ojos, su expresión llena de comprensión. "Sophie, confío en ti. Sé que dejaste el pasado atrás y que estás comprometida con nuestra relación. Todos tenemos historias y exes que aparecen en momentos inoportunos. Lo importante es cómo enfrentamos esas situaciones juntos."
Me sentí abrumada por la comprensión y el apoyo de Daniel. "Gracias, Daniel. Eso significa mucho para mí. Solo quería ser honesta contigo y asegurarme de que estemos en la misma página."

"Siempre, Sophie," dijo, acercándose para besarme suavemente. "Vamos a superar esto juntos."
Nos quedamos abrazados por un momento, dejando que el silencio hablara por nosotros. La tranquilidad de saber que podíamos enfrentar cualquier desafío juntos me llenó de una nueva confianza.
"Creo que lo más importante es ser completamente honestos el uno con el otro," dije, mirando a Daniel a los ojos. "No más secretos, no más dudas."
"Estoy de acuerdo," respondió él, apretando mi mano. "A partir de ahora, nos enfrentaremos a todo como un equipo."

Nos quedamos abrazados por un momento, dejando que el silencio hablara por nosotros. La tranquilidad de saber que podíamos enfrentar cualquier desafío juntos me llenó de una nueva confianza. La sensación de seguridad y amor que Daniel me proporcionaba era indescriptible.

Más Allá Del amor Donde viven las historias. Descúbrelo ahora