CAP 4: Encajar.

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Estando en mi tiempo libre me empeze a pasear por la Academia, me perdí y entre a un sótano. Oh mi pésima suerte, ¿Por qué el?, Cinco estaba quitando el polvo de algunos estantes que había ahí, volteo al escuchar el rechinido de la puerta y soltó su trapo.

– ¿Qué vienes a hacer aquí, bruja maldita?, ¿Quieres causarme más problemas?. – Dijo mientras me miraba de arriba a abajo. Fruncí en cejo, ¿Por qué es tan grosero?.

– Me perdí. Además, el castigo te lo provocaste tu solo siendo grosero conmigo, niño idiota. Que bueno que te pusieron a limpiar esté lugar, por maleducado – Me defendí, cosa que no había echo hace mucho tiempo por cobarde. El se enojo y se acercó a mí amenazante, aparte la mirada porque la verdad no me importaba lo que dijera y había una araña en la pared, enorme para mí.

Yo le tenía un miedo terrible a las arañas desde que un grupo de niños del orfanato me encerró y metió arañas pequeñas y grandes para mí poca suerte ninguna venenosa, me dejaron ahí por horas mientras las arañas se me subían y lloraba para que me escuchara mi madre, cuando aún estaba con vida...afortunadamente me saco de ahí y me consolo en brazos, dejándome dormir con ella a escondidas.

Mi cuerpo inconscientemente al tener a Cinco cerca de mi lo agarre del brazo y balbucee señalando a la araña mientras me escondía detrás de él.

– Una..un..un..¡una araña! – Dije temblorosa, el se movió para quitarme de encima y volteo hacia la araña, me miro y rodeo los ojos, para voltear hacia la dirección de dónde estaba la araña.

– Que dramática, solo es una araña. – Dijo aunque se notó un poco nervioso, agarró una hoja de papel de libretas viejas que estaban ahí y un vaso de plástico que estaba tirado en el piso, acercándose a la araña mientras yo me quedaba pegada a la pared con miedo. Trago saliva y la capturo, como malicia me enseñó la araña antes de salir del sótano y echarla lejos en el parque de afuera.

Claramente no me iba a quedar allí y abrí la puerta para salir afuera, me quedé viendo como la araña se iba, tragando saliva. El se fue después de ver cómo la araña se iba y me volteo a ver.

– Bruja cobarde. – Me murmuró antes de entrar de nuevo al sótano a seguir limpiando, me le quede viendo agudizando la mirada con odio. ¡Que molesto es!, pero bueno...saco la araña, se lo agradezco en parte..

Me quedé paseando y me regresé a el salón principal, esa chica..¿Vanya?, tocando el violín, me le quede viendo por lo hermoso que tocaba, hasta que ella volteo y me noto dejando de tocar con nerviosismo.

– ¿Desde cuándo...desdé cuando estás ahí? – Dijo con nerviosismo mientras ocultaba el violín detrás de ella. Me extrañe porque tocaba hermosísimo, pero hablé con amabilidad.

– Apenas, estaba admirando lo hermoso que tocabas. Tocas muy lindo, Vanya. – Dije con amabilidad mientras me acercaba de a poco, note una sonrisa escondida en el rostro de ella.

– ¿Tú crees?..– Cuestionó mientras sonreía y me miraba con entusiasmo dejando el violín en el sillón. Asentí con la cabeza y me senté al lado de ella con una sonrisa amable.

– Sí, tocas muy lindo, ¡ya quisiera yo tocar así!, eres muy talentosa, Vanya. – Hablé con intención de llevarme bien con ella diciendo verdades. Note que ella estaba feliz por eso y conversamos durante mucho tiempo, algo que nunca había echo con otras personas excepto con...mí madre.

No medi el tiempo, pero una campana sonó y Vanya volteo hacia el sonido, incluso más rápido que yo.

– Vamos, ya es hora de comer. – Dijo tomándome de la mano, sentí una sensación nueva, una sensación de felicidad por tener una hermana con la que me llevo bien. Caminamos juntas al comedor y los demás ya estaban ahí.

– Evelyn, por aquí. Este será tú lugar asignado. – Dijo Grace mientras me alejaba de Vanya, hacia mi lugar no tan lejos...pero frente a Cinco.

– Que mala suerte. – Le escuché decir mientras rodeaba los ojos. – Mamá, ¿Porqué frente a mí?, ¿No puede estar en otro lugar? – Se quejo mientras miraba a Grace.

– No Cinco, este lugar lo asignó tu padre y aquí se sentará. Se amable con ella, cariño ¿Sí? – Hablo Grace con tono bondadoso. Sí estuviéramos en el orfanato una buena bofetada haría que guardara silencio, pero meh.

Me sente cuando todos lo hicieron, cuando llegó Reginald nos sirvieron la comida. Una pasta blanca que se veía exquisita, me le quede viendo y sonreí, agarre el cubierto que habían agarrado todos pues quería encajar y comí feliz. Cuando terminamos, nos retiraron el plato y nos pidieron retirarnos a nuestras habitaciones a recoger nuestros libros de estudio, para estudiar 20 minutos como había mencionado Reginald.

Subí a mi habitación junto a todos, atrás de todos..Vanya no subió ya que decidió practicar el Violín.

Subí y me quedé viendo los libros, agarre uno que decía Matemáticas, pésima idea porque las Matemáticas no se me daban tanto...

Baje y los demás estaban ahí con sus libros, alzaron la mirada cuando me senté haciendo un poco de ruido, me senté incómoda y abrí el libro.

Había ejercicios de sumas, restas, multiplicaciones y divisiones. ¿Porque no agarre español?, me quedé leyendo y llegaron los ejercicios que tenía que realizar, alce la mirada como si las respuestas estuvieran en el aire y cruce mirada con Cinco, quién me estaba viendo...

𝓗𝓲𝓵𝓸 𝓻𝓸𝓳𝓸Donde viven las historias. Descúbrelo ahora