Así iniciaba este viaje, no quise perderme ni un segundo de absolutamente nada, mientras estábamos ahí, tan cerca de las nubes, no podía parar de tomar fotografías, era asombroso, al ver lo colores, mis ojos se llenaron de lágrimas de felicidad, no podía creer lo perfecto que era sentirse así de vivo, nunca me había sentido tan agradecido.— ¡Es hermoso! ¿No?
— De las cosas más hermosas que he visto.
Después de ocho horas y media, llegamos a nuestro destino.
— ¡Jiminshi, despierta hemos llegado!
Abrí cuidadosamente mis ojos, podía sentir como todos se preparaban para el aterrizaje y como nos daban la bienvenida.
— ¡Aloha! Estimados pasajeros bienvenidos a Honolulu, fué un buen viaje y esperamos que puedan disfrutar de su estadía, recuerden que Hawaiian Airlines les desea lo mejor.
Nos levantamos de nuestros asientos, sacamos nuestro equipaje de mano mientras nos direccionan a la salida del avión.
Todavía no podía creerlo era todo un sueño.
— ¡Al fin! Ya estamos aquí Jiminshi, bienvenido a ser feliz.
— Oye... De verdad gracias todavía no puedo procesar todo esto.
— No ocupes tu mente, quiero que te olvides de todo lo malo ¿Vale?
— Está bien.
Recogimos nuestras maletas y un auto nos esperaba a las afueras del aeropuerto para llevarnos a nuestro hotel.
— Te encantará nuestro hotel, lo reservé pensando en tí.
— ¿¡Enserio!? Me voy a terminar enamorando de ti Jungkook.
— ¿Apenas? Yo estoy perdidamente enamorado de ti Jiminshi, así que ya no le lograrás irte de mí.
— Lo digo bromeando tontito, aquí quien no te soltará nunca seré yo.
En medio de tanto amor no nos habíamos dado cuenta de que habíamos llegado.
— Perdón interrumpo, pero ya estamos en la entrada del hotel señor Park, señor Jeon.
— Vaya disculpa, ¡muchas gracias!
— ¡Disfrútenlo!
Nos bajamos del auto, rápidamente nos ayudaron con nuestro equipaje, en recepción con la tarjeta de ingreso y una vez llegamos a nuestra habitación era una fantasía, podía ver el mar, sí, justo en frente de mí.
— ¿Que te parece?
— No sé que decir, esto es sorprendente jamás había visto algo tan perfecto.
— Será nuestro lugar durante esta semana, seremos tú y yo aquí, sin preocupaciones, sin nadie que pueda arruinar nada.
Jungkook me decía esto mientras me miraba fijamente a los ojos, solté todo y nos besamos, podíamos sentir nuestros latidos rápidos, respiración agitada, por un momento paramos y preguntó:
— ¿Estás seguro de esto?
— ¡Sí!
Acarició lentamente mi rostro, sus manos eran como suaves pinceladas, me besaba lentamente, la frente, mejillas, la punta de la nariz, hasta llegar de nuevo a la comisura de mi boca.
Era mi primera vez, me sentía un poco nervioso, ansioso y tímido.
— Confía en mi Jiminshi...
Fué así como inició una ronda de besos, esos que te dejan sin aliento, excitantes, lentos, cada vez más profundos.
Poco a poco fui entrando en calor, lentamente él lamía mi cuello, hicimos pequeñas pausas para contemplarnos, Jungkook quitó mi camisa, comenzando a dejar pequeños chupones en cada parte de mí, así fué como perdí el temor, le quité prenda por prenda, dejándolo completamente desnudo, pude notar como ambos ya estábamos erectos.
Así que bajé hasta su entrepierna tomando con mi mano su polla haciendo suaves masajes mientras podía ver el deseo en los ojos de Jungkook, me arrodillé dando una pequeña lamida a su líquido preseminal.
Justo ahí Jungkook tomó el control, puso saliva en su mano derecha para masturbarme, podía sentir los corrientazos recorriendo mi cuerpo entero, era como si supiera que esto me volvía loco, bajó hasta mi polla, para luego con fuerza atragantarse con ella.
— ¡Ah Dios Jeon! ¡Sigue por favor!
— ¿Te gusta?
— ¡Me vuelves loco!
Me dió la vuelta, me lanzó contra la cama, asegurándose de que quedara completamente expuesto, empezó a rozar con su polla embadurnada de saliva la entrada con suavidad, preparándome para lo que seguía.
— Dolerá solo un poco, pero no te haré daño ¿Ok?
— ¡Ok!
Con extremado cuidado fué metiendola, ambos soltamos pequeños jadeos llenos de placer, de a poco la zona fue tomando la forma deseada para que pudiera entrar completamente en mí.
— ¡Ahhh!
— ¿Duele mucho? ¿Paro?
— ¡No lo hagas, continúa por favor!
Con un poco más de firmeza Jungkook logró entrar, podía escuchar sus gemidos cerca de mis odios, cada vez más fuerte, yo estaba en un éxtasis que se sentía como jamás imaginé, mi polla se ponía más dura con cada movimiento.
El sudor empezó a correr por mi espalda, pero ninguno de los dos quería parar, era la combinación perfecta, Jungkook en ese momento se dió la vuelta quedando acostado de frente dándome la oportunidad de cabalgar encima de su enorme polla, así que agarré con mi mano líquido preseminal, le unté y lo ayudé a introducirla en mí.
Me apoye de sus enormes pectorales, haciendo movimientos circulares con su polla dentro de mí.
— ¡F*CK PARK JIMIN, ME VOY A CORRER!
Ambas pollas bombeando sangre como si se fuesen a explotar, nos comíamos la boca, podía sentir como palpitaba su dentro de mí, nos correríamos al tiempo, agitados, gimiendo fuerte, culminamos, su líquido entró hasta lo más profundo de mí, el mío quedó en sus abdominales y pecho.
Con cautela sacó su polla y caímos rendidos, me tomó en sus brazos.
— Eso fué increíble Park Jimin.
— Eres increíble Jeon Jungkook.
Un besito en la frente y fuimos a tomar una ducha, ya que entre tanto fogueo perdimos la hora de la cena en el hotel, así que pediríamos servido a la habitación, ya que esta fué una gran primera noche...
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𝑹𝒆𝒅𝒂𝒎𝒂𝒏𝒄𝒚• (𝑲𝒐𝒐𝒌𝒎𝒊𝒏)
FanfictionEn esta historia es contada por Jimin quien lleva toda su vida en una habitación rodeado solo de su madre y el médico que viene siempre a cuidar de el. Jungkook llega para darle vida a lo que parece ser todos los días igual, dando un giro de 360° lo...