En esta historia es contada por Jimin quien lleva toda su vida en una habitación rodeado solo de su madre y el médico que viene siempre a cuidar de el.
Jungkook llega para darle vida a lo que parece ser todos los días igual, dando un giro de 360° lo...
Tenía que tomar el control de la situación o terminaría volviendome loco, ¿Es acaso posible que Hoseok me llame como lo hacía Jungkook?, algo aquí no termina de encajar.
Tomé una ducha y mientras lo hacía vino un pensamiento que sonaba muy mal pero era la única forma que tenía para saber de que se trataba todo esto, debía revisar el teléfono de Hoseok, pero ¿Cómo voy a lograr algo como eso?, lo recree en mi mente pero no tenia la más mínima idea de como ejecutar un plan como ese. Salí de tomar mi baño, mientras me cambio empiezo a sentir mi cuerpo pesado, tenía mareo, mucho sueño, por lo que me senté en el sillón y ahí quedé dormido, sin ningún tipo de explicación más que la nueva medicación estaba dando los resultados que Hoseok requería para poder mantenerme controlado.
— Jimi... Oh! Se demoró pero ya cayó.
Justo ahí aprovechó que yo estaba en mi cama y tomó una fotografía guardandola en una carpeta en su teléfono que llamó "Jiminshi" junto un corazón.
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Jungkook por su parte, no hacía más que pensar, se asomaba a su ventana sin que yo pudiera verle, diciéndose a sí mismo ¿Cómo es que puedo ser tan cobarde?, así que justo ahí reaccionó, decidió llamarme, pero yo estaba en el sueño más profundo que pudiera imaginar.
Quién si contestó fué Hoseok...
— Hola ¿Que quieres?
— ¿Que haces como el teléfono de Jimin?
— Nada que a ti pudiera importarte.
— Como digas... ¿Cómo sigue Jimin? ¿Está bien?
— Eres un descarado, ya cállate y no llames más.
— Oye, oye, oye... Hoseok colgó.
No es tonto, una vez colgó esa llamada con Jungkook se aseguró de bloquearlo e hizo esto con cada número desconocido que intentara contactarme, también configuró el teléfono para que solo tuviese tono de llamada cuando se tratara de él o de mamá.
Pero Jungkook sabía que algo raro estaba pasando, ya no se trataba solo de mi enfermedad, iba más allá, por lo que decide que iría a casa para poder verme, empezó a planear como entrar, ya que eran pocas las opciones.
Por esta razón decide escribirle de inmediato a su mejor amigo Mingyu, este había sido una de las personas que Jungkook jamás alejó de él, estudiaron juntos, crecieron y en muchas oportunidades le había salvado la vida, está sin duda no sería la excepción.
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Así empezaría la misión más difícil, intentar entrar sin importar el peligro que esto representaba no solo para él sino también para Jimin, pero ya era hora de descubrir que era lo que realmente estaba pasando.
