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Teddy mira maravillado los juguetes.

-¿Cuál elegiste, cariño?- pregunta Sirius acariciando su cabeza.

-No sé, hay muchos.

-Sí... pero debe haber uno favorito, ¿no?- pregunta Remus.

-¿Estuviste llorando, mami?- pregunta distraído, aunque notó que Remus lloró. Su cerebro no procesa sobrenombres de manera lógica cuando está distraído.

-Es que me duele un poco la cabeza.

-Oh- es todo lo que responde.

-Toma los que más te gusten, anda- apoya Sirius, Teddy estira sus brazos pidiendo que papá lo cargue, Sirius no se opondrá.

Ambos toman un par de juguetes y los dejan sobre los brazos de Lupin.

-¿No creen que es demasiado?- interroga divertido el menor de la pareja Black.

Teddy y Sirius voltean a verlo, ambos con la misma expresión.

-Quizá... Solo uno más- concluye Sirius.

-Espera pa, no vamos a comprar todo eso- señala Teddy- pensaba elegir uno de esos.

-Tienes pocos juguetes y tu no los legiste, compraremos todo.

Teddy abre la boca sorprendido, mientras ladea la cabeza.

-Eso sería mucho más de lo que podría pensar en tener.

-Bueno, piensa en grande porque tienes grandes padres- sonrie Sirius besando su frente.

Remus sonrie divertido, junto a sus chicos. Sirius compra un par de juegos de mesa en el camino.

-Gracias a Dios que traje un carrito- señala el carrito de super donde se ponen las cosas- ¿jenga para qué?

-Oh, jugábamos al jenga con James cuando nos cansábamos de los ensayos de la banda.

-¿Tuviste una banda?- pregunta Teddy impresionado- espera, ¿qué es una banda?

-Un grupo de personas que se reúnen a hacer música.

-Oh- responde y luego se baja a mirar los disfraces.

-Recuerda que tenemos que comprar ropa todavía- habla Remus mirando a su esposo- no explotes la tarjeta.

Sirius eleva una ceja.

-¿Sabes cuánto tenemos en el banco, cariño?

-No pretendo colgarme de tu dinero, así que ni idea.

-Mi tarjeta estaría "explotada" luego de cuatro casas, tres yates enormes, una docena de autos e innumerables viajes y ni siquiera, porque tengo fortuna acumulada por saber administrarla, tengo lo de las inversiones, acciones, tengo lo de la herencia de mi tío, tengo mi salario de la empresa y cuando mis padres mueran tendré otra herencia. El dinero se mueve, un par de sucios juguetes para nuestro hijo no me tocará el bolsillo, Black- habla serio, atrayendo a su esposo con una mano en la cintura, firme, sexi y serio.

Remus traga duro, su corazón se acelera ante el tacto y podría derretirse ante el "Black" refiriéndose a él: a Remus Black.

Adoptado//WolfstarDonde viven las historias. Descúbrelo ahora