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Yoongi literalmente ya había perdido la cuenta de la cantidad de veces en la vida que había escuchado que las relaciones a distancia estás destinadas a fallar, que inevitablemente una persona termina por traicionar la confianza de la otra y que al final alguien siempre termina con el corazón roto, jamás se imaginó que sería él y que la persona que rompería su corazón sería Hoseok.

Estaba solo en casa, su madre estaba trabajando y su teléfono no dejaba de sonar, no había dejado de hacerlo desde que la obra de teatro llegó a su fin y él vio con sus propios ojos cómo Hoseok era besado por otro chico, por el chico de las fotos que parecía ser mil veces mejor para Hoseok que él; Yoongi no lo conocía, pero tenía la ventaja más grande sobre él: él si estaba cerca de Hoseok.

Estaba molesto y herido, pero al mismo tiempo sentía que no podía culparlo, que al final del día él había sido quien había descuidado su relación por sus planes (qué ironía) y que era cuestión de tiempo para que Hoseok se hartara de ser ignorado. Taehyung estaba ahí en el momento correcto, estaba mucho más cerca de lo que Yoongi nunca había estado y de alguna manera eso tenía más sentido y más valor que el tiempo que llevaban compartiendo juntos. Ese tiempo era lo más preciado del mundo para Yoongi, aunque sólo fuera por fotos, videos, cartas y llamadas telefónicas.

A pesar de lo decepcionado que se sentía, Yoongi sólo podía seguir llorando mientras imaginaba cómo hubiera sido la primera vez que se vieran, el primer beso que se dieran y la primera vez que hicieran el amor. Una vez que Yoongi tuviera la oportunidad de tenerlo entre sus brazos, se hubiera asegurado de guardar en su mente cada segundo junto a él, cada sonrisa, cada mirada y cada palabra. Justo ahora se sentía tonto porque lo que más quería era tomar el teléfono y escuchar su voz. Evidentemente todo terminaba aquí, pero Yoongi quería escucharlo por última vez antes de romper todo contacto, estaba seguro de que él no sería capaz de perdonar una cosa como esta sin importar lo mucho que amara a Hoseok.

No fue necesario ver la pantalla, Yoongi sólo sostuvo el teléfono contra su oreja y disimuló todo rastro de llanto. — ¡Yoongi! Dios, por fin contestas —Hoseok sonaba completamente fuera de sí y sin aliento, realmente desesperado—. Llevo horas llamando, Yoongi, necesitaba explicarte lo que probablemente viste, yo...-

—Lo vi, Hoseok, y nada de lo que digas puede cambiar algo porque lo vi con mis propios ojos, no me lo dijo alguien o es producto de mi imaginación —Yoongi se limpió las lágrimas con el dorso de la mano y adoptó una posición más firme en su cama.

—Sí, sí, lo sé... Sé que todo se ve terriblemente mal, pero te juro que no es lo que...-

— ¿No es lo que parece? Mierda, Hoseok, ¿cómo se supone que debería interpretarlo si lo que yo vi fue un jodido beso? ¡¿Cómo diablos no va a ser lo que parece?! —inquirió, alzando la voz.

—Sí, hyung, fue un beso, pero fue él quien me besó —admitió el chico—. Se me confesó antes de la obra y al terminar sólo me besó.

— ¿Acaso crees que soy un idiota? —Preguntó Yoongi, el llanto estaba fluyendo de nuevo y él en serio lo odiaba—. Estaré muy enamorado de ti y todo lo que quieras, Hoseok, pero no trates de verme la cara de idiota porque no lo soy.

— ¡No estoy tratando de hacer nada! —gritó—. Hasta parece que estás hablando con un desconocido, ¡tú me conoces! ¡Sabes que yo no haría algo así!

— ¡Pero lo hiciste! —Exclamó Yoongi—. Lo hiciste y me mentiste cuando te pregunté sobre él, yo también creí que te conocía.

Hoseok se quedó en un profundo silencio, Yoongi sólo siguió sollozando tímidamente, sólo duró unos segundos, pero se sintieron como horas. —Yo... —comenzó Hoseok—. No pienso pedir perdón por algo que no hice o tratar de convencer a una persona que simplemente no confía en mí después de todo lo que hemos pasado. Te quiero, Yoongi, y por eso mismo confié en ti cuando me pediste que lo hiciera...

>>Pero creí que tú ibas a hacer lo mismo.

Se necesitan dos (YoonSeok)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora