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Era demasiado irresponsable si se ponía a pensar que no sabía a ciencia cierta la hora que era, pero una vez que comenzó no se pudo detener. Hoseok había fantaseado un millón de veces con un momento como este, pero nada de lo que su mente fabricó en el pasado se acercaba ni siquiera un poco a cómo se sentía en la vida real, su imaginación se había quedado corta, ya que besar a Yoongi era algo fuera de este mundo, imposible de describir.

Yoongi estaba cumpliendo su palabra, lo estaba besando de forma profunda y pasional, se había saltado todo el juego previo y de alguna manera se las habían arreglado para cerrar la puerta, subir hasta la habitación y terminar en la cama sin despegarse por mucho tiempo. Hoseok no era capaz de imaginar cómo le haría para dejar ir a Yoongi ahora que sabía cómo se sentía abrazarlo y besarlo, no quería abandonar este sentimiento jamás.

Hoseok no supo qué se había aferrado con fuerza a la tela de su camiseta, justo sobre los hombros, hasta que Yoongi empezó a apartarlo suavemente. Dios... Si no estuviera tan excitado y lleno de adrenalina Hoseok probablemente se habría escondido debajo de sus sábanas por la vergüenza al darse cuenta de que había prácticamente perseguido los labios de Yoongi cuando se empezó a separar. — ¿Qué pasa? —preguntó Hoseok con la respiración agitada.

A Yoongi le costó un esfuerzo sobrehumano separarse de Hoseok, pero las palabras de su madre sobre ser responsable y respetuoso no lo dejaban en paz, tampoco la idea de que los padres de Hoseok pudieran aparecer en cualquier momento porque no sabía detenido a preguntar por ellos. Estaban besándose sin descanso y ambos sabían que todo indicaba que pensaban llegar a algo más, pero ¿qué tan lejos podría Yoongi permitirse? ¿Sería lo correcto o lo mejor sería ser paciente?

Pero... ¿Qué tal si pasaba mucho tiempo para que pudieran volverse a ver y tener una oportunidad de estar a solas?

—Seokkie, yo... —Yoongi se aclaró la garganta y tomó una de las manos de Hoseok para besarla delicadamente—. Realmente no sé... Qué es lo que quieres que hagamos esta noche. No quiero que te sientas comprometido a algo, ¿de acuerdo? No vine aquí para esto y yo...-

Hoseok puso uno de sus finos dedos sobre los labios de su novio para hacer que guardara silencio. —Creo... Que sé exactamente lo que quiero hacer esta noche, Yoongi hyung, sólo espero que tú también lo quieras —Hoseok sonrió levemente mientras sus adorables mejillas esponjosas se llenaban de color rojo. Hoseok sabía que podía ser un poco precipitado, pero quería esto más que nada en el mundo, quería tener a Yoongi cerca de todas las formas posibles—. Sólo que... Tendrás que decirme qué debo hacer, ¿de acuerdo? Sabes que yo nunca he hecho esto con nadie y no quiero decepcionarte o...-

Antes de que Hoseok pudiera terminar de hablar, Yoongi lo atrajo hacia él rápidamente y lo abrazó con fuerza. —No digas eso nunca más, ¿quieres? Es perfecto por el simple hecho de que se trata de ti, no necesito nada más. Tú eres todo lo que quiero.

—Hyung... No tienes idea de cómo te amo —respondió el chico—. Sólo... Ve muy despacio conmigo, ¿está bien? Quiero hacerlo, pero estoy un poco nervioso y sabes lo mucho que me asusta el dolor.

—Por supuesto que iré despacio —Yoongi tomó a Hoseok por las mejillas y las estrujó un poco, haciéndolo reír, después llenó de besos toda su cara—. ¿Cómo no voy a ir despacio y ser cuidadoso si se trata de mi bebé?

Hoseok no pudo resistir los ojos de Yoongi justo sobre los suyos mientras pronunciaba esas palabras, y se cubrió el rostro con ambas manos mientras dejaba salir un pequeño grito. — ¡Hyung! —gritó emocionado—. Dilo otra vez, dilo mil veces.

Yoongi dejó salir una pequeña risa y apartó las manos de Hoseok de su rostro para besarlo otra vez. —Déjame verte, quiero ver los ojos de mi bebé —Yoongi dejó un beso en la punta de su nariz—. Voy a dedicarme a hacerte sentir bien porque eso es lo que eres, eres mi bebé y te mereces lo mejor del mundo. Gracias por confiar en mí de esta manera, Hoseok, te amo muchísimo.

Se necesitan dos (YoonSeok)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora