Capitulo 38

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La noche había pasado con rapidez para Sanemi quien se la paso leyendo el libro de aquella historia que le dió la chica, Kiyo. Le pareció demasiado interesante así que la curiosidad le ganó y se la paso pasando hoja por hoja y leyendo. Por lo que describía la historia, se trataba de un demonio despiadado y cruel que se enamoró de un ángel bondadoso y corazón puro; ambos se conocieron debido al que el demonio iba a asesinar a un hombre que se habia lastimado tratando de llevar comida a su hogar pero el ángel aparecio y lo salvo diciéndole algo que el demonio jamás olvidará.

«Por más crueles que sean las personas ellos también merecen la felicidad y paz, un demonio como tú también la puede obtener si eso es lo que quieres»

Desde ese entonces, el demonio no dejo de pensar en las palabras de aquel ángel. De vez en cuando, ambos se veían en la tierra y aunque al principio el ángel lo evitaba poco a poco se iba enamorando del demonio que ya lo estaba y se ganaba el corazón de ese ser amable. Se hicieron pareja pero sabían que si sus clanes se enteraban podrían empezar una guerra o peor, asesinarlos y lo último que querían eran ser separados. Ambos vivían su amor a escondidas de los demás, se visitaban con frecuencia en la tierra donde ambos se compartían su cariño mutuo. Un día mientras paseaban por un bosque fueron descubiertos por una ángel que había sido enviada a buscar a su compañero y mejor amigo, ella sabía de las consecuencias que podria tener esa relacion así que les prometió a ambos apoyarlos durante toda su vida y asi fue hasta que un dia otro angel que ya sospechaba del comportamiento de sus compañeros, decidió seguirlo paa descubrir a donde iba y al saberlo lo acuso con todos en el cielo.

Todos los angeles guardianes los capturaron a ambos incluyendo al demonio y se reunieron con el reino del infierno para decidir que hacer con la pareja. Estaban tratando de tomar una decisión y al final decidieron sacrificarlos pero alguien intervino, aquella ángel que les hizo la promesa los defendió para que no los decapitaran o al menos eso trato de hacer pero lo único que consiguió fue que la desterraran del cielo cortándole sus alas pero aún así no se rindió. Por todos sus esfuerzos y ver el amor que se tenían ese demonio y el ángel ambos clanes llegaron a una decisión pero no cambiaría del todo la primera. Maldicieron a la pareja durante el resto de su eternidad.

“Estarán destinados a estar juntos durante cada vida pero con una condición y al final morirá... Hasta que su fin llegue.”

Así los decapitaron a ambos pero cumpliendo la voluntad de ambos. El primero en ser decapitado fue el angelito y fue cargado por el demonio con sus brazos sobre su regazo mientras veía como el que fue el amor de su vida se desangraba con lágrimas en sus ojos pero antes de que muriera le dijo unas últimas palabras con sus pocas fuerzas.

«Shiro... Quiero que me prometas que estaremos juntos durante nuestras próximas vidas...» Esa frase sorprendió a Sanemi porque ya la habia escuchado antes junto con ese nombre y siguio leyendo «...A pesar de nuestra maldicion»

«Te lo prometo...»

El pequeño y bello angel murió con una sonrisa en los brazos de su pareja mientras que el demonio aún lloraba aferrándose a su cuerpo y antes de que lo mataran a él también susurro unas últimas palabras.

«Tambien te prometo que te cuidare en cada una de esas vidas...»

Así fue como el demonio susurro sus últimas palabras y lo apuñalaron y la pareja murió unida representando el resto de su eternidad juntos acompañados con la maldición. Al igual que ellos, la ángel a la que habían expulsado del cielo fue maldecida.

“Estaras destinada a vivir en la tierra por la eternidad y toda persona a la que llegues a amar morira hasta que la maldición de los traidores se rompa podrás descansar en paz...”

Los tres fueron condenados a un ciclo eterno pero había cierta pizca de esperanza para ellos solo que sería difícil romper la maldición.

Los dos amantes reencarnaban, se volvian a enamorar y obtenían algo que perdían al nacer pero al recuperarlo, todo lo bueno se esfumaba. Esa era su única condición. Siempre era lo mismo entre ellos en cada una de sus vidas. Reencarnación. Amor. Maldición. Pero a pesar de todo eso había alguien que siempre trataba de ayudarlos para que fueran felices solo que sus reencarnaciones no la recordaban.

Esa historia conmovió a Sanemi, de verdad le había gustado pero se dió cuenta que no tenía un final fijo, es decir, que no estaba completa como si no la hubieran continuado así que eso lo decepcionó un poco y para distraerse decidió ir a entrenar con su katana pensando en algún final para la bella historia. Horas después del amanecer mientras entrenaba vió a su cuervo kasugai dirigirse hacia él así que supuso que le encomendaría una misión pero la noticia que le dió lo devastó.

En todas nuestras vidas siempre te ♡𝘼𝙢𝙖𝙧𝙚♡ || Sanegiyuu || Temporada 1 Donde viven las historias. Descúbrelo ahora