💕 Capítulo 8:La visita de Gonzalo 💕

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La noche es fría y la mayoría de los trianeros ya están en su casa .
Gonzalo estaciona su coche frente al  corral donde viven sus nuevas conocidas.
No suele ir en busca de las mujeres que conoce en las solitarias noches en que sale a recorrer bares para tomar unas copas y olvidar las penas;pero la sensación de bienestar que le quedó después de haber hablado con ellas lo motivó a buscarlas.
Unos pocos pasos lo llevan hasta la puerta y ahí se detiene,no sabe si llamar o no.
En el interior del edificio se escucha música y gente que habla en voz muy alta, pero le es difícil distinguir entre todas ellas,las que pertenecen a las cigarreras.
Levanta su mano cerrada en un puño para golpear la puerta y luego la baja, mira el piso , niega  con un movimiento de cabeza y se lleva las manos a la cintura.
Está indeciso, no sabe como pueden reaccionar ellas, no quiere quedar como un desubicado,pero tampoco quiere quedarse con las ganas de verlas.
Abencio está llegando al edificio y desde la esquina ve a Gonzalo parado frente a la puerta sin saber que hacer.
-¿Buscas a alguien ,hombre?
-Buenas noches quiero ver a Rufina y sus dos amigas,me dijeron que viven aquí.
-Así es hombre. ¿Usted trabaja en la fábrica?
-¿En la fábrica? No .¿Por qué lo pregunta?
-¿Y de dónde las conoce?
-Del bar El Gitano.
Abencio lo mira fijo a los ojos y asiente con la cabeza.
-Venga conmigo.
-¿No será muy tarde? No quiero molestar. Puedo regresar mañana.
-No hombre a esta hora están despiertas.
Todavía no hemos cenado, mire vengo del bar que está a tres cuadras,fui a comprar unos vinos que nos estaban faltando.
-Escuchan buena música.
-Todas las noches son así,nos juntamos para comer en el patio, somos como una gran familia que compartimos todo.
¿Usted tiene familia?
-Sí, pero vivo solo.
-¿No tiene esposa e hijos,entonces?
-No .
-A eso me refería.
Abencio introduce la llave ,da unas vueltas, y la llave se traba , insiste pero no hay caso.
-Me parece que vamos a tener que llamar, esta llave ya está muy vieja,voy a tener que hacer otra.
-Déjeme probar.
Vaya , está complicado,puede ser la cerradura también, habrá que ponerle un poco de aceite.
-Está tan vieja como todo en este edificio.
-¿Cómo todo?
Esas cigarreras no están tan viejas.
-Me refería al edificio,don.
-Listo, valió la pena el esfuerzo.
Pase usted primero, después de todo vive aquí.
-Paca aquí está el vino, compré el mejor que encontré,y no he venido solo ,¿ dónde está Rufina y compañía?
Este hombre quiere verlas.
-Esas tres siempre andan juntas, están en la cocina calentando la comida que nos trajo Begoña, enseguida están acá.
Deja el vino en la mesa y ayúdame con el resto.
Disculpe don, ¿le molesta la música?¿Quiere qué la baje?
-No doña,por mí no se moleste ,me gusta todo este clima festivo,alegre ,es justamente lo que un alma en pena como yo necesita.
-Pero ,¿por qué dice eso hombre?¿Anda de malas?
-Y ...la verdad que los últimos días no fueron muy buenos.
Paca lo mira de arriba a abajo, hace un gesto con la cara que indica duda.
-La verdad don,  que para ser un alma en pena ,se lo ve muy bien.
-Trato de sobreponerme.La vida es muy linda como para andar amargado por ella por culpa de una desconsiderada.
-Ah ya entiendo don, un asunto del corazón.Búsquese otra.
Aquí las tres amiguitas están solteras-le dice Paca guiñándole un ojo -.
Cuando termina de pronunciar esas palabras,Encarna,Chela y Rufina aparecen trayendo en sus manos, cada una de ellas,una fuente humeante de comida y Gonzalo al verlas, comenta de  manera espontánea sobre  la gran ayuda  espiritual que ellas le dieron la noche anterior.
Las cigarreras se quedan boquiabiertas y se miran entre ellas.
Por estar mirando a Gonzalo, Encarna choca con una silla al acercarse a la mesa para dejar la fuente. Sobresale  entre todos los hombres presentes y lo considera el más atractivo de todos los que conoció en su vida , incluso hasta el más elegante.Ni Tirso que es de lo más apuesto,le gusta tanto como él.
Observa sus ojos , ya no hay en ellos la tristeza del primer día en que se conocieron , por el contrario están llenos de vida , tienen un brillo especial que denota esperanza y que aporta más belleza a su masculino rostro.
En esta oportunidad su barba está un poco crecida, le queda mucho mejor para el gusto de ella,y con el cabello lacio  despeinado, es un gallardo.
Gonzalo la ha encandilado y se ha vuelto torpe, al chocar con la silla,un poco de comida cayó al piso , ensuciando también la parte exterior de la fuente que a su vez dejó una mancha sobre el mantel al apoyarla sobre él , como solución inmediata la cubrió con una servilleta y  puso un vaso sobre ella, para su suerte nadie reparó  en ello,porque cada uno está en lo suyo.
Chela lo mira asombrada por no entender el motivo de su visita, ellas nunca le dijeron donde vivían,¿cómo pudo encontrarlas?¿Qué es lo qué quiere?
¿Querrá qué le devolvamos el dinero qué con tanta generosidad nos  dio,y del cuál apenas quedan unas pocas pesetas? ¿O cambió de opinión y quiere cobrarse el dinero dado, de alguna otra forma? La cabeza de Chela no dejaba de formular  preguntas.
Y lo que dijo sobre la ayuda espiritual,¿tan importante es para él ese aspecto? Es muy  diferente a ellas que priorizan siempre lo material.
Rufina,es la que tiene más carácter de las tres y por eso es la que siempre va al frente.
Suelta de lengua, directa -lo que alguna vez le hace parecer agresiva -y sin dobleces,lo encara al instante.
-Gonzalo,¿qué hace usted en nuestro edificio?¿Quién le dijo qué podía aparecer por aquí sin nuestro permiso?
¿Qué le pasa don? ¿Está arrepentido?
-No Rufina,no estoy arrepentido de nada, pero si les molesto me voy.
¿Por qué me habla en ese  tono? La vez
pasada me sentí tan cómodo con ustedes, y ahora con la forma en que usted se dirige a mí estoy confundido ,ya no sé si les caigo bien o mal.
Vine porque me hicieron tanto bien que tenía ganas de volver a verlas.
Muchas veces cuando oscurece, tengo necesidad de hablar con alguien pero no tengo a nadie, hoy es una de esas noches y las recordé,por eso volví al bar donde las conocí y pregunté por ustedes y un tal Pepillo me dijo donde encontrarlas.
Encarna  ubicada detrás de Chela da tres pasos al frente y toma de la mano a Gonzalo ante la mirada atónita de Rufina y Chela;obligándolo a seguirla.
Lo lleva a paso veloz hasta la mesa para ofrecerle un lugar al lado del suyo.
-No nos molesta ,solo nos sorprende, es la primera vez que nos sucede una cosa así.
Es un gusto volver a verlo Gonzalo; usted dice que lo ayudamos, pero también usted nos fue de gran ayuda, sobre todo a Rufina que tiene un niño que mantener.
Rufina y Chela intercambian una mirada cómplice y una sonrisa al adivinar  que es lo que le está pasando a Encarna. Y es que su amiga no puede disimular lo que siente y es muy fácil saber sobre sus estados de ánimo.
Rufina asiente con un movimiento de cabeza y lo invita a quedarse para la cena.
-Aquí siempre va a encontrar con quien charlar.
-Está bien Rufina,me quedo,me gusta la compañía de ustedes.
El delicioso aroma de la comida invita a que cada uno tome su lugar en la mesa.
Gonzalo se sienta al lado de Encarna , frente a Rufina quien prefirió ese lugar para mantenerse cerca de su habitación donde descansa Rafael,por si acaso la necesita.
El visitante  atrae sobre él la atención de los comensales.
Toribio, Abencio y Pelayo, lo  interpelan  para conocerlo,y las mujeres escuchan con atención mientras saborean los distintos platos.
Encarna no puede dejar de mirarlo de una forma especial, de una forma distinta a la que mira a los demás hombres, pero los ojos de Gonzalo se desvían seguido hacia la sexy Rufina,quien a pesar de escucharlo no aleja su mirada del plato.
La música sigue alegrando el ambiente y por instantes tapa la suave y dulce voz de Josefa que siempre tiene algo para decir.
Abencio no soporta la mirada insinuante con  que Gonzalo recorre  el rostro de Rufina y las partes de su cuerpo que puede ver desde su lugar,  sabe que cuando un hombre mira así a una mujer es porque  la desea ,la bronca por darse cuenta que ahora hay alguien más con quien compite por su amor y que tiene muchas más posibilidades que él, lo lleva a beber un vaso de vino tras otro. Toribio su padre ,se da cuenta de la situación y le aparta la botella, Abencio lo mira  con recelo, termina el vaso ,se pone de pie y sin ninguna explicación se va a su habitación, dando un portazo detrás de él y dejando la duda sobre su comportamiento flotando en el aire.Las miradas de todos los comensales se cruzan entre sí buscando una explicación al comportamiento pero todas las bocas se mantienen cerradas.
Josefa ,la madre de Abencio,se queda con la mirada fija en la puerta de la habitación sin decir palabra .
Luego de la pausa de la conversación, Toribio que había tenido un gesto con su hijo se anima a enunciar algo.
-Demasiado vino arruina cualquier reunión. Solo es bueno en la medida justa.
-Bueno Toribio, tampoco es para tanto, solo nos ha dejado perplejos a todos, pero no ha arruinado nada .
Está un poco raro, al principio lo noté bien, como siempre, vi que estaba muy entusiasmado haciéndole preguntas a Gonzalo, compartiendo chistes con Pelayo, y después no sé que le pasó, de golpe se queda callado y comienza a beber.
Algo le está pasando, algo lo hizo cambiar así, pobre hijo mío que le cuesta hablar de sus problemas, lo guarda todo para él y no se da cuenta que eso le hace mal.
-Déjelo doña Josefa ya se le va a pasar , quizás tenga razón Toribio y el vino tenga algo que ver.
-No lo sé, Encarna, no lo sé.
-¿Y Urraca ? ¿Por qué no está entre nosotros?
-Josefa , Urraca fue al cumpleaños de su prima-le aclara Paca-.
Se oye el llanto de Rafael reclamando la presencia de su madre , y con premura acude a él.
Lo encuentra limpio y lo toma en brazos,el pequeño tiene hambre.
Lo mece durante unos minutos hasta que se calma, luego sentada en una silla lo alimenta. Durante el tiempo que dura el acto sus miradas se conectan, los ojos negros del niño se encuentran con los de su madre, Rufina acaricia su cabecita y le dedica una tierna sonrisa.
Al terminar vuelve con los demás llevando con ella a Rafael.
-Miren quien está aquí, el bebé más bello. -Comenta Chela en tanto le hace caritas graciosas para que se ría -.
-¿Es tú hijo Rufina?
-Sí Gonzalo.
-Se parece a ti.
-Así es Gonzalo,no podemos ocultar el parentesco.
Rafael esboza una sonrisa y se mueve hacia delante  y sin intención,tira un vaso que contiene vino.
El líquido derramado es absorbido de manera inmediata por el mantel.
-No es nada , ¡alegría, alegría! Dicen que cuando se derrama el vino ,es una señal de que las cosas van a salir bien.
-Espero que sea así Paca, ¿de dónde has sacado eso?
-Es algo que aprendí de mi bisabuela,Chela, y vaya a saber de quien lo aprendió ella.No es nada científico,pura superstición.
El reloj de péndulo marca las 22 horas, Josefa se pone de pie y comienza a levantar la mesa , Chela y el resto de los presentes la ayudan.
El patio se llena de movimiento,gente yendo y viniendo, desplazamiento de muebles, y en ese contexto, Gonzalo se acerca a Rufina para invitarla a dar una vuelta por el barrio  pero su invitación es rechazada.
-Hace mucho frío Gonzalo, prefiero quedarme en casa con mi hijo.
¿Por qué no invita a Encarna?
Seguro acepta, ella me comentó hoy que tenía ganas de salir a caminar. pero como ni Chela ,ni yo quisimos acompañarla no fue.
Oh mire que casualidad, ahí viene.
Encarna ,¿te gustaría dar un paseo con Gonzalo?
-¡Claro!
-Entonces vamos mujer.
Quiero conocer un poco el barrio,ya saben ustedes que soy de otros pagos.
-¿Me veo bien Rufina?
-Oh sí Encarna ,te ves muy guapa.
-Pues vamos entonces Gonzalo.
-Vayan que yo cierro, que la pasen lindo.
-Gracias Rufina -dicen al unísono -.
-Rufina,¿dónde está Encarna?
-Salió con Gonzalo.
Oye me parece que le gusta el tío ese.
¿Has visto cómo lo miraba cuándo llegó?
-Sí Rufina, se lo comía con los ojos.
Encarna no es para nada disimulada, él se tiene que haber dado cuenta.
Ahora lo que yo observé en la mesa es que a él se le iban los ojos por ti.
Así que no sé que va a pasar entre esos dos.
- Sabes que primero me invitó a mí.
-Pero que te estoy diciendo Rufina, este gallardo te quiere a ti.
- Pero yo no lo quiero a él y por eso se lo pasé a Encarna .
Chela estalla en una carcajada de breve duración.
-¿Qué pasa Chela?
-No creo que existan amigas como nosotras tres que hasta los hombres compartimos.
-Es que no somos tan egoístas y tenemos demasiado cariño por nosotras y ninguno por ellos.
Son juguetes para nosotras.
-¿Alguna vez te preguntaste qué pasaría si nos enamoramos de alguno de esos juguetes?
-No Chela, y no creo que pase .
-¿Por qué no  Rufina?
-Bueno porque creo que estamos muy firmes en nuestra postura.En ningún momento dudamos.
-Sí,en eso tienes razón,pero nunca se sabe.
En el puente de Triana , Encarna y Gonzalo conversan bajo la luz de la luna.
-¿Le gustó el barrio?
-Lo que vi es un poco sencillo para mí gusto.
-Hoy es una noche de luna llena, mis noches preferidas ,cuando era niña me preguntaba como hacía la luna para brillar tanto .
-¿Y ya sabe la respuesta?
-No ,aún me lo sigo preguntando.
-Su brillo es el reflejo de la luz del sol .
Y yo cuando era niño quería viajar a la luna.
-¿Y ahora?
-No, ahora no, me gusta más la tierra.
¿Tiene frío?
-Sí.
-¿Le gustaría qué la abrace?
-Sí,me encantaría.
-¿Qué le parece si dejamos las cosas de niños y nos concentramos en temas de adultos?
-Sí,es mejor.
¿Cómo llegó a su casa después del coloquio qué mantuvimos en el bar?
-Ya sé los dije , me ayudaron mucho.Esa noche pude dormir tranquilo,sin sobresaltos,no me desperté en ningún momento.
Hablar hace bien,sacar el sufrimiento afuera es el primer paso para la sanación del alma, aunque sé que me va a costar mucho recuperarme de esta traición.
La amaba con el alma, íbamos a casarnos dentro de un año, hasta que ese artista mancebo y con dinero se cruzó en nuestro camino.
No creo que se haya ido con él por su fortuna porque yo soy un hombre acaudalado, pero no me duele tanto el motivo por el cual me dejó ,sino la perfidia y la ingratitud.
-Hay muchas mujeres que quisieran tener un hombre como usted.  Su porte , su caballerosidad,usted es un hombre que se distingue en el montón, es como una moneda de oro entre millones de monedas de metal.
Ya va a encontrar a alguien que le quite esa tristeza. De a poco,se va a ir liberando de ese sentimiento, me alegra saber que por unos cuantos minutos logramos hacerlo sentir mejor.
-Por unas cuantas horas Encarna, y cada vez que la recuerdo ,pienso en las palabras de ustedes , y eso me ayuda mucho.
Había invitado a Rufina pero no aceptó , y ahora estoy pensando que le tendría que haber preguntado a Chela ,si quería venir ,pero al no verla y en el apuro por dar un paseo ,se me pasó.
-No se preocupe por Chela , estaba trabajando en la cocina junto a Paca y Josefa, y cuando es así,no le interesa otra cosa.Le hubiese dicho que espere a que termine, y para esperar ya era tarde.
Pero aquí estoy yo , usted me agrada mucho,se nota que es un buen hombre, se merece una buena mujer.
-¿Y usted sigue pensando igual acerca del matrimonio?
-¿Y por qué tengo qué cambiar? El matrimonio es para toda la vida, y yo no soy constante en el amor.Llega un momento en que me canso de estar con el mismo hombre.
Para mí el amor para ser bueno y que deje un buen recuerdo tiene que ser breve y  efímero, disfrutarlo por un tiempo y cuando ya viviste todo lo que quisiste, dejarlo y buscar otro puerto .
Los grandes y eternos amores son aburridos, un día te das cuenta,que ya no tienes nada que descubrir en esa persona y no hay nada que te sorprenda, que ya estás cansada de verlo todos los días.Esos amores con el tiempo se vuelven rutinarios, monótonos, hasta que finalmente mueren.
Me divierto mucho con mis amigas, hacemos un excelente trío,todas pensamos igual con respecto a ese tema.Creemos que un matrimonio sería un obstáculo en nuestras salidas , amamos la libertad y queremos vivir de acuerdo a nuestras normas y no de acuerdo a las normas sociales que por lo general limitan a la mujer.
-Pero un hombre les puede dar propiedades,  viajes, mucho lujos, dinero, ¿no vale la pena renunciar a algo por todas esas ganancias?
-No , nosotras nos contentamos con poco, nos sentimos orgullosas de lo que tenemos aunque no sea mucho, porque todo lo que tenemos lo ganamos con nuestro esfuerzo,  no le debemos nada a nadie y eso nos da tranquilidad.
La idea de que un hombre me brinde todo es tentadora, pero eso implica que le tenga que dar cuenta a él de todo, y eso no va conmigo,y por otra parte me gusta sentirme útil, me gusta saber que soy capaz de manejarme sola. Soy una excelente amiga y puedo construir relaciones  que duren con el tiempo, no nací para el amor , pero sí para la amistad.
-Prefiere ser comida popular para muchos, en lugar de un manjar para un señor distinguido, no puedo entender eso.
-En la cadena alimentaria el más grande se come al más chico, pero en la cadena del placer, se devoran mutuamente ,y yo siempre encuentro amantes ardientes que me hagan gozar de magníficas noches.
-No siempre el más grande come al más chico, también puede ser al revés.
La serpenteante lamprea suele comerse al tiburón.
-Puede que existan excepciones en el inmenso mar, pero en las profundidades volcánicas de la pasión los dos quedan satisfechos.
-Y si encuentra un hombre que le pueda dar todo lo que necesita y al mismo tiempo respetar su espacio, su  libertad y con quien pueda divertirse igual que lo hace con sus amigas ,¿qué haría?
Si encuentra ese hombre diferente que le ofrezca un mundo nuevo para vivir  y donde usted fuera  la reina ,¿qué le diría?
-Ay Gonzalo ,me la ha  complicado.
No sé si ese hombre existe y la verdad de existir no sé que haría.
-Hace un rato me dijo que más de una mujer quisiera tener un hombre como yo, ¿y usted?
-Gonzalo, estoy entrando en calor ,no se enoja si le pido que no me abrace más.
-No ,pero aún no me respondió la pregunta.
-Gonzalo usted  me gusta mucho,no es como otros hombres que conocí, hay algo especial en usted que lo  vuelve irresistible, y me encantaría descubrir de que se trata,sin
ninguna clase de compromiso.
- Vaya que es  rápida ,no esperaba algo así.
-Soy rápida porque cuando algo o alguien me atrae,  no me gusta perder el tiempo.
-Y cuando alguien me agrada y veo que su alma encierra un gran tesoro no la trato como un objeto,no la uso para después dejarla.
Sus planteos no coinciden con los míos.
Yo quiero una relación seria  , no algo que empiece y termine en el día, quiero algo a largo plazo, que me complete , que me llene, que no me produzca la sensación de
vacío.
Todo lo que dice de la rutina es verdad, pero ¿qué pasa si encuentra a alguien qué rompa con ella?
-Gonzalo me parece que usted se  considera el hombre capaz de crear las condiciones que posibiliten ese tipo de relación.
-Así es. En el amor hay que improvisar todos los días, para no caer en la rutina.
Hay que animarse a vivir algo así , para  entrar en el juego del amor no solo hay que desearlo , también  hay que ser valiente.
-¿Y usted es valiente?
-Yo soy un soldado del amor dispuesto a emplear todas las armas necesarias para vencer sobre los obstáculos que me impidan alcanzarlo.
-¿Le gustaría acompañarme en la batalla y
ganar la guerra contra la soledad?
-Gonzalo, yo no estoy en guerra con la soledad, somos muy amigas, va a tener que buscar a otra.
-¿Y cuándo llegue a la vejez?
-Cuando llegue a la vejez ,seré una vieja solterona y feliz.
Y espero que encuentre a la persona indicada.
-Y yo espero que pueda reflexionar y considere mi propuesta.
-Quiero regresar, mañana tengo que levantarme temprano para ir al trabajo.
-Es un placer llevarla.
En la habitación del corral de vecinos, Encarna ya acostada y cubierta con varias mantas,solo piensa una cosa.
-No quiero enamorarme.

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