Después de varios días de trabajo ,Begoña da por finalizado el retrato de María.De pie ,ante él,lo contempla admirada .
Una obra de arte de una calidad excelente, sublime, exquisita, refinada.donde cada trazo forma un mundo de sentimientos profundos destinados a captar la atención del espectador.
Con su bolso al hombro donde lleva su ropa y elementos de trabajo,va hacia la cocina siguiendo el olor al café recién hecho que proviene de ella.
María y Hermesinda se encuentran ahí disfrutando de una gran taza de dicha infusión.
-María, voy a dejar el cuadro aquí hasta que se seque la pintura,si quieres después puedes ver como quedó.
-Seguro que quedó muy bien, Bego,como todo lo que haces.
Siéntate con nosotras a tomar un café.
-Oh no, María. Me tengo que ir porque Carlos me está esperando, lo dejo para otro día.
Pasado mañana estoy aquí.
-Hasta entonces primita.
Al momento de abrir la puerta para salir ve a Manolo que llega junto a Eros.
-¿Se puede saber dónde vas , Begoña ?
-A mi casa Manolo,mi esposo me está esperando.
Manolo se acerca a Begoña ,la toma de un brazo y la obliga a ingresar por la fuerza.
-Tú no te vas a ningún lado.
-Manolo ,¿qué haces?¿Cómo te atreves a tratarme así?
Una vez dentro de la casa , Manolo cierra la puerta con llave.
Hermesinda escucha la voz de su marido que está discutiendo con Begoña y corre hacia él.
Se cuelga de su cuello y lo besa hasta saciarse de él.Manolo suelta a Eros para responder al abrazo de su esposa y el inquieto can salta sobre ella a modo de saludo.Cuando está saludando a Begoña,Teo y Alan , se acercan ladrando para jugar con su amigo.
Los tres perros dan vueltas por la sala de estar,Teo toma una pelota de cuero,y los otros dos corren detrás de él para sacársela .
-María, llegó mi esposo y trajo a Eros-grita Hermesinda desde el lugar donde está -.
Y en pocos segundos se encuentran los cuatro en la cocina.
-¡Begoña!¿No te ibas?
-Sí María,pero este guapo me obligó a entrar.
Las tres mujeres lo miran de forma inquisitiva esperando una respuesta.
-¡Pero es qué no saben nada!
Las tres se miran sin entender.
-¿De qué?
-María, hay varias muertes por la peste blanca.
Cuando llamé a Juan le pedí que traiga unas cuantas mascarillas para protegernos.
Quedamos en encontrarnos aquí.
Por eso Bego te pedí que no salgas, espera a que Juan te traiga algunas para ti y tu esposo, llama a Carlos y cuéntale porque vas a llegar un poco tarde.
-Manolo gracias, disculpa por haberme enojado contigo.
-Estas disculpada Bego.
-Entonces es verdad.Creí que era una broma de Juan.
-No María, no es una broma , es una realidad y debemos cuidarnos.
-Una realidad que ya lleva mucho tiempo entre nosotros.
Tuberculosis, maldita peste, y todavía no se descubrió nada para ponerle fin.
Todas las personas que conozco han muerto por su causa.
¿Cuántas más van a morir?Es una enfermedad con complicaciones graves que llevan a un destino fatal. Dios nos libre de esa peste.
Al final los resultados de las investigaciones de Koch ,no sirvieron para nada.No sé porque la ciencia va tan despacio en la lucha contra esta enfermedad.
-Se hace lo que se puede Hermesinda,¿tú crees qué es tan fácil encontrar una cura?
Cuando se descubrió la tuberculina todos pusimos la esperanza en ella, pero lamentablemente su empleo como medicamento no logró satisfacerla; pero ya llegará el día en que la ciencia logre avanzar y pueda ponerle fin.
- De acá a que llegue ese día pueden pasar muchos años Manolo,y van a morir muchos en la espera,no tenemos nada para prevenirla ni salvarnos de la muerte.
No entiendo porque estamos tan atrasados en este tema,¿acaso no hay dinero para financiar las investigaciones ? Podríamos hacer una colecta nacional para juntar fondos destinados a la cura de la tuberculosis.
¡Dios mío! Necesitamos vacunas, fármacos más fuertes. Ese tratamiento que están aplicando a base de reposo, dieta,opio y ácido tánico ,no sirve de nada.¡Pero qué pasa con nuestros científicos! Hace 19 años que Koch descubrió el bacilo y todavía no tenemos una vacuna¡pero qué están esperando!Que este virus termine con todos nosotros.
-Hermesinda,mi amor,tranquilizate.
-¡Cómo me voy a tranquilizar Manolo! La tía que yo más amaba murió de eso.
Cada vez que oigo esa palabra se me eriza la piel. Desde mucho antes de su muerte no la veíamos, mis padres no querían que vayamos a visitarla por temor al contagio y por esa razón tampoco fuimos al velorio, pero ellos enviaron un telegrama a su esposo y dos coronas de flores compuestas por rosas,dalias y jazmines, esas flores les gustaban mucho; en su casa tenía varios rosales de diferentes colores y en el interior de la casa siempre había una gran cantidad de ramos dispuestos en floreros.
Ella me enseñó mucho de jardinería y siempre me daba consejos para el cuidado de las plantas.El jardín que tenemos hoy en casa,se lo debemos a ella.Cada vez que trabajo en él su recuerdo viene a mi mente.
Cuando hablábamos por teléfono mi tío político, nos contaba como iba avanzando la enfermedad ;decía que si la llegábamos a ver no la íbamos a reconocer porque la enfermedad la estaba consumiendo , se encontraba muy pálida,había descendido mucho de peso,ya ni apetito tenía la pobre.
Su cuerpo se debilitaba día a día , su rostro demacrado reflejaba su sufrimiento y ni la noche amiga le traía el descanso, porque su abatido cuerpo la obligaba a toser en forma reiterada y a expulsar fluídos sanguinolentos.
Era tan bonita, tan sensual, tenía una belleza digna de admirar.Contaban que en sus años de juventud había conquistado el corazón de muchos hombres, y había sido la inspiración de grandes poetas y músicos.
Y tú me pides que me tranquilice,no puedo Manolo.
Mi amor como no voy a perder el sosiego, si encima tú eres médico, trabajas en un hospital público, ¿cuántas personas ingresan a él por distintos problemas de salud?¿Cuántas personas presentan enfermedades contagiosas?¿Y cuántas de esas personas presentan esta maldita peste?
Hermesinda prorrumpe en llanto, se lleva las manos a la cabeza y comienza a caminar en círculos .
Todos la miran enmudecidos porque ninguno pudo anticiparse a la reacción de Hermesinda.
Es la primera vez que reacciona así a una noticia sobre dicha enfermedad.
Su esposo busca el contacto físico con ella para apaciguarla, con un abrazo la lleva sobre su pecho y ella apoya su cabeza en él,
las suaves manos de Manolo se desplazan por su cabeza a modo de caricias.
Begoña entristecida por el estado en que se encuentra su amiga también se acerca y le hace unas caricias en la espalda, Hermesinda separa su cabeza del pecho de Manolo , mira hacia atrás y al ver a Bego se abraza a ella.
-Calma amiga.
-Bego no quiero que le pase nada a Manolo.
Mi amor,si te pasa algo no voy a poder resistirlo, son tantos años juntos,no quiero que te mueras Manolo.-Dice llorando mientras lo mira a los ojos -.
-Hermesinda,mi tesoro, si hasta ahora no me pasó nada , tampoco me va a pasar.
-Y tú que sabes, a mi tía tampoco le había pasado hasta que le pasó.
No es ninguna garantía que no te haya pasado nada antes.
-Pero soy médico mi amor, y sé como cuidarme.
-Que seas médico tampoco es una garantía, al contrario ,te expone más al problema.
Han muerto un montón de médicos por esa causa, si quieres calmarme mejor busca otra cosa.
Mira que decirme que eres médico,¡eso es peor todavía!
-Debes confiar en Dios -le dice mientras pasa la mano derecha por el rostro de ella para sacarle las lágrimas -.
-¿Hubo muchas muertes?-Pregunta Hermesinda un poco más tranquila-.
-Hoy mientras yo estuve ahí, hubo cinco .
-¿Cinco?¿Y eran pacientes tuyos?
-No mi amor.
-Es decir que no tuviste contacto con ellos.
-Exacto mi amor.
-¿Y Carmen y el director cómo están?
-Muy bien mi amor.Todos estamos tomando precauciones como lo hemos hecho siempre.
-Juan también está muy expuesto. A la farmacia va mucha gente enferma a adquirir sus medicamentos.
¡Y Leo también! Pero si no lo mató la guerra esto tampoco.Como dice Manolo tenemos que confiar en Dios.
Voy a realizar un trisagio por tres días invocando la protección de Dios.
-María yo lo hago contigo.La oración me ayuda mucho. Y en estos tiempos es lo único que puede protegernos.
- Es un placer rezar contigo Hermesinda.
Dicen que cuando dos o más personas se unen para orar Dios está entre ellas.
Pero todavía siguen ahí parados, Manolo desde que llegaste no te has sentado, ni has tomado nada, por favor siéntate, Hermesinda,¿por qué no le sirves algo a tu marido? Hace frío , dale un café bien caliente.
Vaya como nos ha impactado la noticia que hasta hemos olvidado de como se atiende a las visitas.
-Como digas María.
Manolo,¿qué hacen con los cuerpos de los muertos por tuberculosis?
-Por lo general,los creman.
No me gusta que los tuberculosos sean tratados en el hospital donde yo trabajo.
Hay un hospital que se construyó especialmente para tratarlos a ellos ;es ahí donde deben ir , eso ayudaría también a disminuir los casos de contagios ya que se encuentran aislados del resto de la población.
Tratarlos en un hospital general es una locura. En su mayoría, la gente que atraviesa las puertas del hospital de Sevilla no presenta enfermedades infecto contagiosas, y atender pacientes que presenten la peste blanca es peligroso para ellos.
Cuando me enteré que hoy murieron cinco en el hospital, tenía ganas de patear todo.
Cuando pasé por neonatología me acordé de ti María,¿qué pasaría si uno de esos bebés se llega a contagiar? Se puede llegar a producir una cadena de contagios y varias familias tendrían que velar a sus pequeños hijos .
¿Y los qué están esperando para ser operados?¿Y las mujeres embarazadas? ¿Y los qué se acercan para tratar sus enfermedades crónicas, o para buscar una solución a un mal temporal? ¿En qué estaba pensando el director cuándo permitió qué esas personas reciban atención en nuestro hospital?
Manolo se pone de pie , da un medio giro, luego vuelve a girar hacia la mesa ,y con el puño cerrado da un golpe en ella que llamó la atención de las tres mujeres.
-Es un imprudente.No puede cometer un error así. Puso en riesgo a todos los que estábamos ahí.
Uno de esos pacientes tose o habla y puede contagiar a diez personas que tenga cerca.
¿Pero no es consciente de la gravedad del problema?No tenemos nada para hacerle frente,como dijo Hermesinda,el tratamiento que se aplica no sirve, todos mueren.
¿Qué es lo qué pretende , qué se produzca un contagio masivo y mueran cien personas?
Cuando salí del hospital todavía los cuerpos seguían ahí, en el pasillo,¿por qué no los llevaron a la morgue? Somos responsables de lo que les pueda suceder a los pacientes dentro del hospital,en relación con las prácticas que allí se realizan.El hospital debe funcionar como una institución de tratamiento y prevención de enfermedades,y con lo que pasó hoy , no está cumpliendo con esto último.
-¿Representan algún problema esos cadáveres?Lo que quiero saber es si pueden transmitir la enfermedad.
-Algunos piensan que sí, María.
No se pueden tener estos descuidos,ya le dije a Sor Celia que pienso hablar con el director. Los pacientes deben permanecer aislados en un centro de salud preparados para ellos.
Mi amor,¿estás mejor?
-Sí Manolo, pero el temor de que te pase algo va a estar siempre.
Mi amor,¿no te gustaría cambiar de trabajo?
Podrías trabajar como médico en la empresa de mi padre.
-¿No hay médico en la empresa de Juan Manuel?
-Sí, pero puede haber otro.
-No Hermesinda,no quiero volver a la clínica, trabajar ahí, implicaría eso.
Me esforcé por recibirme de cirujano y quiero seguir trabajando en esta área de la
medicina.
Si lo propones para evitar el contagio ,no tiene sentido porque esa enfermedad la puedes contraer en cualquier sitio.
Y no hay nada que temer,solo debemos cuidarnos.
-Manolo ,si te dijeran de ir a trabajar al hospital de tuberculosos,¿qué responderías?
-Ay María, María, que pregunta.
Diría que no.Insisto, lo mío es la cirugía.
-Hermesinda,¿dónde está el café de Manolo?¿No le ibas a hacer uno?
-Sí María pero después se me fueron las ganas.
-Deja mi amor lo voy a hacer yo, para todos al estilo de Juan .
-El café de Juan ya se ha ganado su lugar entre nosotros.
Hasta Carlos lo incluyó en el restaurante.
Si algún día van, lean en la carta del menú el sector destinado al café, ahí van a encontrar uno que se llama Café Juancito.
-Café Juancito, ay Bego,me has hecho reír, eso no lo sabía.-Dice María entre risas -.
-La primera vez que le hice a Carlos el café como me lo enseñó tu esposo, quedó encantado y ese mismo día lo adoptó para La Perla del Mediterráneo, y gusta mucho entre la clientela.
-Manolo,ya que te estás encargando del café,te pido que saques de la heladera las tapas de cazón que trajo Begoña.
-Como digas María.
-En este último tiempo en esta casa no se cocina gracias a Bego,que cada vez que viene nos trae unos exquisitos platos del restaurante.
Nos estás mal acostumbrando Bego, como te vamos a extrañar los días que no vengas.
-Por mí o por la comida, María.
-Por ambas cosas.
Alan, Eros y Teo, corren hacia la puerta al escuchar la llave que es introducida en la cerradura, sentados y alegres,con sus colitas siempre en movimiento, esperan que entre el dueño de la casa.
Apenas entra ,los tres canes se lanzan sobre Juan que llega acompañado de Leopoldo.
-¡Eros!¿Qué haces aquí?
-¿Qué te extraña Juan?No es la primera vez que si uno de los dueños está aquí lo traiga también.
Teo huele la bolsa que Juan trae en su mano, luego la muerde y tira de ella.
- No Teo, déjala ya .Esto no es para ti.
María, llama a Teo .
-Juan, estamos en la cocina.
Teo mi amor,ven con tu mami.
Segundos después de intercambiar saludos, Leopoldo se ubica al lado de Hermesinda en la mesa familiar.
-Mozo un café para mí también y otro para mi cuñado.
-¿A quién le dices mozo ,Leo?
-Pues a quien va a ser Manolo, a ti.
Si te han dado ese lugar, tío.
-Pues déjame decirte que me ofrecí yo .
Quiero mimarlas un poco.
-Y ahora nos vas a tener que mimar a nosotros.
Manolo que está de espalda a la mesa se da vuelta para mirar a Leo y arrojarle un bollito hecho con el papel que envuelve las tapas de cazón.
Leopoldo lo recoge y se lo vuelve a tirar a él pero toca a Juan que está de cuclillas frente a su mujer con su cabeza apoyada en el vientre de ella.
-¿Qué fue eso?-Pregunta mientras mira a su alrededor para ver lo que rozó su cuerpo , lo descubre cerca de su talón derecho y se lo devuelve a Leo-.
-No era para ti Juan, era para Manolo que me lo arrojó antes.
-Pues la próxima vez ten mejor puntería.
Juan vuelve mirar el vientre de su esposa,lo acaricia,mira a ella sonriendo y después deja besos sobre él.
-Juan eres un dulce.
-Mi amor siempre soñé con vivir algo así.
-Mira Hermesinda lo que te estás perdiendo...
-María no empieces.Todos saben que no me gusta hablar de ese tema.
¿Qué te gustaría qué fuera niña o niño?
-Un niño que se parezca a Juan.
-Siempre dices lo mismo no cambias.
-¿Por qué tengo qué cambiar Bego?Si vivo enamorada de él.
Y a ti Juan,¿qué te gustaría?
-Que tenga mucha salud y sea muy feliz.
Manolo sirve el café y las tapas y se sienta al otro costado de Hermesinda.
-Falta Carlos, ¿cuándo va a venir contigo Bego?
- Manolo ,él trabaja todo el día en el restaurante solo se ausenta por asuntos de importancia.
-¿Lo llamaste para decirle qué llegabas tarde?
-No Manolo ,pero se debe imaginar que si aún no llegué es porque algo me demoró.
-¿Y si está preocupado?,llámalo Bego, ahí tienes el teléfono . Dijiste que te estaba esperando.
-Está bien Manolo ,aunque no lo creo necesario, creo que me conoce lo suficiente para saber que soy muy responsable.
-Pero Bego aunque seas muy responsable en la calle puede pasarte cualquier cosa,llámalo ,pobre hombre.
-Ay Manolo como eres.Pobre el director del hospital cuando vayas a hablar con él. Ahora vuelvo.
-Juan,¿trajiste lo qué te pedí cuándo hablamos?
-Sí.
Juan se tira para atrás con la silla y alcanza la bolsa que dejó sobre la mesada . De su interior saca unas cuantas bolsas de menor tamaño, una de ellas se la entrega a Manolo.
-Las mascarillas, tío.
¿Alguna muerte más después qué finalizamos la conversación?
- Gracias Juancito.
Sí ,dos .
- Sabes qué debe estar complicada la situación ,porque después que cortamos me llamó el director del sanatorio de tuberculosos pidiendo una cantidad enorme de opio y de ácido tánico.
-¿Y qué pasó?
-Bueno Manolo, pasó que yo no tengo semejante cantidad, y les dije que busquen en Valencia, después de todo ellos son de allí.
Y me dijo, que allí no le ofrecen un buen precio y que muchos conocidos de él saben que mi farmacia ofrece los mejores.
Entonces después de arreglar el precio-le hice un descuento-, hablé con el proveedor para realizar el encargo.
Ahora no entiendo como saben acerca de nuestra farmacia.
- Porque las cosas van de boca en boca , Juancito.
-¿Cómo es eso Manolo?
-Con todos estos casos de peste blanca que han golpeado hoy las puertas del hospital , se ha hablado mucho del tema y escuché decir en el quirófano minutos antes de comenzar una operación que teníamos programada, que el director de nuestro hospital es familiar del director del hospital de tuberculosos, y que el parentesco viene por parte de madre.Resulta que estos dos tíos son primos, y si mal no recuerdo cuando María fue internada de urgencia en una oportunidad, tú hablaste con él y te dijo que siempre compraban en tu farmacia.
-Sí lo recuerdo y ahora entiendo.
Oye que bien te salió el café,me parece conocida la receta.
-Es que tu receta es una genialidad, exquisita, de extrema delicadeza y sabor sublime.Es por eso que ahora lo preparo siempre de esta forma.
-Ya hablé con mi marido y le expliqué todo.
-Begoña toma esto es para ti,y tú esposo.
Repartan entre el personal del restaurante.
Y ustedes no dejen de usarlas.
Juan le entrega a Begoña una bolsas con una gran cantidad de mascarillas.
-Gracias Juan.
-Juan mañana no voy a la farmacia, tengo que cursar.
-Lo sé Leo, cuídate mucho.
Quédate a dormir aquí, no vuelvas a tu casa.
No te imaginas lo que se te extraña desde que decidiste mudarte.
Extraño los desayunos e irnos juntos a la farmacia.
Me había acostumbrado mucho a tu compañía, pero bueno tú quisiste vivir solo y hay que respetarlo.
Ten en cuenta que si quieres volver puedes hacerlo.
-Sí me quedo, no tengo ganas de caminar hasta allá.
-Tienes que comprarte un coche,Leo.
-Que fácil es decirlo Manolo, ¿de dónde voy a sacar la plata? Tengo que juntarla,por ahora no puedo, en otro momento será.
Ahora tengo que trabajar mucho y estudiar para después comprarme todo lo que quiero.
-¿Es por una cuestión de dinero Leo?
-Sí Juan.
Begoña,¿qué te pasa? Te noto triste.
-Eres muy observador Leo . De golpe me acordé de la epidemia de cólera en la que murieron mis padres.
Cuantas pestes azotan a nuestra querida tierra, cuanto dolor dejan a su paso. La lepra,el cólera,la tuberculosis, por Dios,¿cuánto más vamos a sufrir?¿Y después de esto qué vendrá? Me domina el temor de ser víctima de una de estas pestes,no quiero terminar aislada,me asusta la idea de morir sola,en la cama de un hospital, lejos de mis seres queridos.
¡Dios!¿Por qué tienen qué existir estas cosas? Si la vida es tan linda, si hay tantas cosas para hacer y gozar ,y henchirce de alegría.
-La mirada apesadumbrada de Begoña busca los ojos de Juan-.
¿Puedo quedarme a dormir? Se me fueron las ganas de volver a casa ,no quiero viajar sola porque sé que voy a tener malos pensamientos que me van a doler.
-Claro, Bego todas las veces que quieras, pero avísale a Carlos.
Y no pienses en esas cosas.No tiene sentido vivir con temor a perder la vida porque es algo inevitable,el final te va a llegar de una forma u otra, lo mejor que puedes hacer es relajar tu mente y confiar en Dios.
-Buen consejo,voy a llamar a mi esposo, con permiso.
-Manolo, ¿ustedes también se quieren quedar a dormir? Miren que hay lugar , donde duermen cuatro pueden dormir seis.
-Nosotros nos vamos Juan,pero si quieres te lo dejo. -Manolo mira a Eros que duerme enroscado cerca de Teo y Alan a pocos metros del radiador -.
- No , mejor llévalo porque cuando se despierte va a llorar al no verlos.
-¡Eros arriba!¡Vamos a casa!
Eros abre los ojos lentamente y se pone de pie ante la orden de Manolo y de un salto sube a sus brazos.Nota:Este capítulo va de la mano con el capítulo anterior.
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De Andalucía al mundo 2
RomanceCon la entrada en la nueva década se produce un crecimiento muy importante en la vida de Manolo y en la de los integrantes de la familia Rubio que deberán asumir nuevos roles con los consiguientes desafíos. En esta nueva etapa lo oculto sale a la l...