-Hola amor- escucho como Guido deja su abrigo arriba del sofá y viene a saludarme.
-Como la pasaste- le pregunto mientras cebo un mate. Ya había limpiado todo y preparé el mate para cuando el viniera, porque seguramente después de la conversación que vamos a tener yo no tenga ni ganas de comer nada.
-Bien, estuvimos viendo unos temas con Pato, después a la hora cayó Gastón y tomamos unos tragos- dice estirándose, me di cuenta de que estaba cansado realmente.
-Que bueno- digo cebando un mate esta vez para mi.
El me empieza a observar, yo lo mito de nuevo pero sin decir nada. Me sonríe y se acerca a acariciarme la mano.
-Que te pasa?- me pregunta. Tan obvios eran mis nervios que no le contó absolutamente nada decifrarlos¿?
-Viste que dijiste que, si llegara a pensar que estaba embarazada te avise y hacíamos el test juntos?- el asiente con la cabeza y suspira.
-Lo querés hacer ahora? Eso me querés decir?- me cuestiona y se para para abrazarme por la espalda. Yo asiento con la cabeza con un nudo en la garganta.
El se da cuenta de que estoy muy nerviosa, porque empieza a decirme palabras tranquilizadoras mientras me abraza.
Después de confirmarle que lo quería hacer, subimos a nuestra habitación. Busco en el baño el test de embarazo y leemos las instrucciones, bueno, él lee.
-Tenemos que esperar 5 minutos y ahí sale el resultado- me dice y lo miro. -Amor si no estas segura..- niego.
-No, si estoy segura, solo que demasiado nerviosa- le explico.
-Si estas embarazada voy a estar muy feliz, pero si sale negativo no pasa nada amor, podemos seguir intentando, no te frustes, siempre te voy a estar acompañando- me dice entregandome el test.
Lo agarro con la mano temblando, una parte de mi quiere que salga negativo, porque siento que no es el momento indicado. Pero la otra parte va a estar más que feliz, porque eso significa que con Guido vamos a estar más unidos que nunca.
Yo realmente veo al rubio como padre. El padre que está más que presente, el padre cariñoso y juguetón, el padre que es más un amigo que cualquier otro. Y eso me pone demasiado feliz, porque se que si fallo en mi papel como madre, él sí va a estar.
Dos minutos después le digo a Guido que puede entrar al baño.
Dejo el test dado vuelta, y me cruzo de brazos mientras me muerdo las uñas. Él nuevamente me abraza por atrás mientras pone su mentón en mi hombro.
-Imagínate un mini Guido, le voy a enseñar a tocar a la batería a partir de los 2 años. Imagínate una mini Amelia, empieza como modelo de pañales y termina en una pasarela a lo Kendall Jenner- nos reímos los dos.
-No digas eso, mirá si es nena y le termina gustando más la música que un mini Guido- le digo riendo.
-Tenes razón, bueno, sea lo que sea a los 2 años a practicar batería- suspira- viste para que pedí que tengamos un garaje, va a formar su banda ahi- me acaricia la panza.
Realmente estamos muy ilusionados en que se nos dé, sabemos que no lo planeamos, pero también tenemos muy en claro que si llega a pasar vamos a estar igual de emocionados y felices.
-Ya pasaron 10 minutos amor- me dice susurrando.
-Dejalo ahí- niego con la cabeza empezando a llorar. Hundo mi cara en su pecho mientras paso las manos por su espalda, el tiene su mejilla en mi cabeza, con una mano me acaricia el pelo y con la otra la espalda.
Es un abrazo reconfortante, transmitiendo nuestro amor y tranquilidad.
Una vez que me tranquilizo nos separamos del abrazo.
-Estoy lista- le digo sacándome las lágrimas.
Guido es el que agarra el test, pero no lo da vuelva, se queda quieto por unos segundos.
Lo agarro de la mano y lo miro, se que está igual de nervioso que yo.
-Es positivo- me dice y se larga a llorar. Yo me quedo en silencio, tratando de procesar lo que dijo.
El se agacha llorando y hunde su cara en mi panza para llenarla de besos.
-No puede ser... voy a ser papá- decía y otras cosas que no lograba entender. -Vamos a ser papás- dice una vez que se paró.
Yo le sonrío mientras de nuevo mis lágrimas caen, y nos empezamos a besar y abrazar.
Estuvimos unos buenos minutos en esa situación, cuando nos dimos cuenta eran las 10 de la noche, así que nos fuimos a acostar. Ya ninguno lloraba, pero igual seguíamos medio en shock.
El se durmió con su cabeza en mi pecho mientras acariciaba mi panza por debajo de la remera, y yo me dormí un tiempo después, acariciando su cabello rubio.
No se si es lo que esperaban 🥺🥺 pero espero que les haya gustado este capítulo
Déjenmelo saber dando corazón y dejando un comentario de como les pareció porfiss🙏🏻🙏🏻🙏🏻
Gracias a todos por leer♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡