Carlos soltó un pequeño gemido cuando sintió, de nuevo, aquel roce en su entrepierna. No estaba seguro de lo que estaba pasando, pero tenía demasiado sueño, no quería abrir los ojos.
O al menos, así fue hasta que distinguió un gemido más... que no era suyo.
Abrió los ojos en el momento preciso que todos los recuerdos de la noche anterior se desbordaron en su mente como avalancha. Se sobresaltó un poco, abriendo los ojos de golpe y encontrándose con la cabellera de Charles recostada sobre su pecho cómodamente.
Movió las piernas un poco, notando de inmediato la razón de sus gemidos y los de Charles: ambos tenían las piernas enredadas con las del otro, por lo que era de esperarse que quedasen juntas y frotándose constantemente entre sí.
No le tomó demasiado darse cuenta de que no podía moverse, pues los brazos de Charles estaban fuertemente aferrados alrededor de su cintura, dejándole inmóvil.
Cerró los ojos con fuerza, intentando plantearse una idea de lo que le diría a Charles y cómo este podría reaccionar ante la historia nada trágica que Carlos estaba deseando contarle, pues quería que Charles entendiese el porqué de su actitud de siempre y la de anoche.
No iba a ser algo fácil de contar, porque probablemente el menor se reiría de él. Pero Charles le gustaba... y quería intentarlo con él. Por más que eso le costase el autocontrol, deseaba que con Charles no fuese únicamente algo sexual.
Sintió un par de cosquillas en el cuello y miró hacia abajo, encontrándose con el pelinegro que parecía estar despertando, pues se movía inquieto, por lo que su cabello cosquilleaba en el cuello de Carlos, quien no pudo reprimir sus impulsos y acarició sus cabellos delicadamente.
Charles paseó sus manos por el abdomen de Carlos, poniéndole nervioso.
Charles le miró en ese momento y Carlos temió que pudiese escuchar el inquieto y fuerte latido de su corazón, pues este se había agitado notablemente al ver la adorable cara de Charles recién despierto, con pequeños y hermosos ojos perezosos medio abiertos, sus labios exquisitos y rosas como siempre y sus cabellos apuntando en todas las direcciones, dándole una apariencia más que preciosa.
- Buenos días, Calos...- Charles murmuró, trepó hasta quedar sobre Carlos y le besó en la mejilla.- ¿Cómo dormiste?
Carlos quería cuidar cada minucioso detalle, como él lo hacía, pero de cualquier modo, aún no sabía cómo lidiar con ello. Así que no tenía de qué hacer o decir.- B-bien...- se limitó a responder, forzando una sonrisa.- ¿Y tú, Charlie?
Charles rio, sacudiendo sus hombros y confundiendo al mayor.
- Hace un par de horas estabas: "Charles, me gusta el control", "Charles, cállate", "Charles, eres muy inquieto", Charle, Charles, Charles...- se burló el pelinegro, enarcando una ceja.
Carlos enrojeció por completo. Charles apoyó sus manos en el pecho de Carlos y, en estas, su cara.
- Es demasiado raro que ahora te dignes a volver a ser tímido.
El mayor se muerde el labio inferior. Debía admitir que se había estado armando de valor para contarle todo a Charles desde hace más de una semana, pero, justo en ese momento, ni una sola palabra era capaz de salir de su boca.
Pero parecía no ser necesario, pues estando completamente hundido en sus pensamientos, lo único capaz de sacarle de allí, fueron los tersos labios de Charles posándose sobre los suyos.
Charles se acomodó de modo que quedó sentado sobre el abdomen de Carlos y enredó sus dedos en el cabello creciente de la nuca del castaño, quien se derritió instantáneamente ante el toque, enlazando su lengua con la de Charles.
ESTÁS LEYENDO
Falofilia [Charlos]
Fanfiction~ Cuando diecisiete centímetros no son suficientes. {Adaptación} Todos los créditos a su autor original @Thebunnyshiteu Mejores rankings: #18 Charlos ~ 18/08/2024 #16 Charlos ~ 26/08/2024