El día de la boda de Neuvillette y Furina había llegado. El altar estaba decorado con flores acuáticas y luces suaves, creando un ambiente mágico. Neuvillette y Furina se encontraban frente al altar, intercambiando votos llenos de amor y promesas para el futuro.
Neuvillette: "Furina, prometo amarte, respetarte y protegerte todos los días de mi vida. Eres mi todo, mi luz y mi esperanza."
Furina: "Neuvillette, contigo he encontrado la fuerza para enfrentar cualquier desafío. Prometo estar a tu lado, apoyarte y amarte incondicionalmente."
Después de los votos y los aplausos de sus seres queridos, la pareja pasó a la recepción, donde el ambiente estaba lleno de alegría y celebración. Mientras cortaban el pastel, risas y charlas animadas llenaban el aire.
De repente, el sonido de una explosión resonó en el jardín, seguido de gritos y caos. Los Fatui habían atacado, irrumpiendo en la celebración con fuerza y violencia. Neuvillette reaccionó rápidamente, su instinto protector activándose al instante.
Neuvillette: "Furina, quédate aquí. Voy a buscar a los bebés Prometo que volveré."
Furina asintió, su rostro pálido por el miedo, pero confiando en Neuvillette. Él corrió hacia donde estaban los niños, mientras Furina se escondía detrás de una mesa, intentando mantenerse fuera de la vista.
Mientras Neuvillette buscaba a sus hijos, Furina accidentalmente golpeó una botella, haciéndola caer y romperse. El ruido alertó a los enemigos cercanos, que se dieron cuenta de su presencia. Sin pensarlo, Furina comenzó a correr, pero su vestido se enredó, haciéndola tropezar y caer.
Los Fatui se acercaron rápidamente, listos para atacarla, pero justo en ese momento, Navia apareció, interponiéndose entre Furina y los atacantes.
Navia: "¡No la tocarán!"
Navia desenvainó su espada con rapidez y habilidad. Su mirada estaba fija y decidida mientras se lanzaba contra los Fatui. Con una serie de movimientos rápidos y precisos, Navia bloqueó los ataques de los enemigos y contraatacó con una fuerza impresionante.
Navia: "Furina, quédate detrás de mí. No dejaré que te hagan daño."
Un Fatui con una lanza se abalanzó hacia Furina, pero Navia interceptó el ataque, desviando la lanza y lanzando un poderoso contraataque que derribó al enemigo. Otro Fatui intentó flanquearla, pero Navia giró con agilidad, esquivando el golpe y asestando un corte limpio que desarmó al atacante.
Navia: "¡Vengan uno a uno o todos juntos! ¡No les dejaré pasar!"
La batalla era feroz. Fu. Navia se movía con la gracia y la precisión de una guerrera entrenada, cada golpe de su espada resonaba con una determinación inquebrantable. Sin embargo, los Fatui eran numerosos y comenzaban a rodearla. A pesar de su habilidad, Fu. Navia empezaba a mostrar signos de cansancio.
En un momento de descuido, uno de los Fatui logró golpear a Fu. Navia, haciéndola caer de rodillas. N
Furina, viendo a su amiga en peligro, intentó correr hacia ella, pero Navia levantó una mano, deteniéndola.Fu. Navia: "¡No, N
Furina! ¡Aléjate! Protégete a ti y a los niños.El sonido de la batalla resonaba en los alrededores, pero para Furina, todo se volvió un borrón cuando vio a Navia caer de rodillas, herida gravemente por un golpe enemigo. Con horror y desesperación en sus ojos, N. Furina observó cómo uno de los Fatui levantaba su espada, dispuesto a dar el golpe final.
N. Furina: "¡Fu. Navia, noooo!"
El grito de N. Furina resonó como un lamento en el aire, desgarrador y lleno de agonía. Cada fibra de su ser se retorció con el dolor de ver a su amiga en peligro mortal. N. Furina se lanzó hacia adelante, pero sus pies parecían pesados, como si una fuerza invisible la mantuviera en su lugar.
El grito continuó, prolongado, lleno de una desesperación tan profunda que parecía cortar el aire. Los invitados y los combatientes se detuvieron por un instante, conmocionados por la intensidad del dolor en la voz de N
Furina.Fu. Navia giró la cabeza hacia N. Furina, sus ojos llenos de tristeza pero también de determinación. Con un último esfuerzo, levantó su espada para intentar defenderse, pero el enemigo fue más rápido. La espada del Fatui descendió, cortando a Navia de una forma brutal.
N. Furina: "¡Nooo! ¡Fu. Navia, no!"
El segundo grito de N. Furina fue aún más desgarrador, un sonido primario que surgía desde lo más profundo de su alma. Sus piernas finalmente respondieron y corrió hacia el cuerpo caído de Fu. Navia, cayendo de rodillas junto a ella.
N. Furina: "fu. Navia, por favor... ¡no me dejes! ¡No puedes irte!"
Con lágrimas corriendo por su rostro, N.Furina corrió hacia Fu. Navia, arrodillándose junto a ella y sosteniéndola entre sus brazos.
N. Furina: "¡fu. Navia, no puedes dejarnos! ¡Por favor, no te vayas!
Navia, con sus últimas fuerzas, levantó una mano para acariciar la mejilla de Furina.
Fu. Navia: (con voz débil) "N. Furina... siempre estaré contigo... cuida de tus hijos... y de Neuvillette."
En ese instante, Neuvillette regresó con los niños, su mirada llena de desesperación al ver a Navia en el suelo y a Furina en peligro.
Neuvillette: "¡No! ¡Fu. Navia!"
Con una furia renovada, Neuvillette se lanzó contra los atacantes, luchando con todas sus fuerzas para proteger a su familia y vengar a Navia. Furina, aunque herida y debilitada, reunió el coraje para ayudar, utilizando su poder para apoyar a Neuvillette en la batalla.
En medio del caos, Neuvillette se arrodilló junto al cuerpo de Fu. Navia, sosteniéndola en sus brazos mientras las lágrimas caían por su rostro.
Fu. Navia: (con voz débil) "Neuvillette, cuida de N. Furina y de los niños. Ellos... te necesitan más que nunca."
Neuvillette: "No te vayas,Fu. Navia. Por favor, no nos dejes."
Fu. Navia: "Siempre estaré con ustedes... en sus corazones. Haz que mi sacrificio... valga la pena."
Con esas últimas palabras, Navia cerró los ojos, dejando escapar su último aliento. Neuvillette, destrozado, abrazó su cuerpo, sintiendo una mezcla de dolor y determinación.
N. Furina: (sollozando) "Fu. Navia... No puede ser..."
Mientras que furina lloraba de podía ver la figura de Neuvillette sus ojos se volvían rojos por la ira y sus uñas se volvían largas
Neuvillette: (con voz firme) "No dejaremos que su sacrificio sea en vano. Defenderemos a nuestra familia y honraremos su memoria."
La lucha continuó con una intensidad renovada. Neuvillette , impulsado por la perdida de Fu. Navia , utilizo sus fuerzas para derrotar a los atacantes. Cada golpe era un tributo a Fu. Navia, un recordatorio de su valentía y su sacrificio.
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El Conflicto de Furina: Neuvillette y los Mellizos"
RomanceEn la pintoresca Neuvifuri, la vida de Furina da un giro inesperado tras una noche apasionada con Neuvillette. Descubrir que está embarazada de gemelos es solo el comienzo de sus dilemas. Incapaz de encontrar el momento adecuado para contarle a Neuv...