Capítulo 7

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Baby hello, fue por la historia que subiste a tu close...

La música sonaba tan fuerte que Martin dejó de pensar por un momento, cerró los ojos y se dejó llevar por aquella canción que ni siquiera le gustaba, pero que hacía que la gente a su alrededor se volviera completamente loca, coreando la letra y bailando. Abrió los ojos y cogió las manos de sus amigas, haciendo que los tres se quedaran en corro mientras reían y se cantaban la canción entre ellos.

Ruslana se acercó a él, haciéndolo que se encorvara para poder quedar a su altura, y la pelirroja intentó hacerse oír por encima del bullicio hablándole directamente al oído

-Juanjo no puede apartar los ojos de ti, míralo! -la chica se alejó riéndose y siguió saltando, Martin no pudo evitar llevar su mirada hacia el otro, que efectivamente parecía estar siguiendo sus movimientos

Se separó de sus amigas cuando la siguiente canción empezó a sonar para bailar solo otra vez, le encantaba perderse en el ritmo aunque fuera música que en su tiempo libre no escuchara, cuando estaba en la pista de baile todas las canciones le valían. Empezó a contornearse y a pasar las manos por su pelo mientras sonaba algo de Lola Índigo por los altavoces. Para ser completamente sinceros, Martin hizo esos movimientos deseando que Juanjo le estuviera mirando, pero se dio cuenta rápidamente que el otro ya estaba distraído hablando con Denna. Quizás se había imaginado las miradas anteriores, y Ruslana tendía a decirle siempre que había chicos mirándolo, lo cual la mitad de veces no era verdad.

Martin decidió dejar de pensar en el maño, total, qué más daba si le miraba o no.

Después de un rato los demás se unieron a ellos en la pista para bailar. Martin se dio cuenta que, aunque Juanjo pareciera serio, era el típico amigo que querías tener en las fiestas ya que no paraba de animar a sus amigas a bailar, gritaba todas las canciones, se inventaba pasos de baile... no se le hizo nada raro que al rato de salir a la pista estuviera sudando y avisando de que iba a por más bebida para poder coger un poco de aire. Martin pensó en acompañarlo porque de tanto moverse estaba muerto de sed, pero no quería parecer pesado.

Lo miró mientras se iba a la barra y Chiara le hizo un gesto con la cabeza para que lo siguiera, pero él no le hizo caso, sus amigas estaban empezando a desarrollar una pequeña obsesión por el maño que no estaba entendiendo.

Al poco tiempo Juanjo volvió con una cerveza en la mano y un vaso de agua en la otra, el cual le ofreció. Martin frunció el ceño confundido, pero lo aceptó. Juanjo se acercó a su oído para que le escuchara por encima de la música

-si no bebes algo te vas a acabar desmayando, hace demasiado calor aquí - explicó, y acto seguido se dirigió a Bea haciendo un baile improvisado.

Martin se quedó paralizado momentáneamente porque nunca le había pasado esto. El gesto había sido completamente natural y parecía como si Juanjo lo hubiera hecho simplemente porque se había fijado que quizás le hacía falta. Chiara y Ruslana lo miraron levantando las cejas y sonriendo, y Martin sabía que iba a ser el tema de conversación de vuelta a casa.

El vasco se empezó a fijar más en la manera en que Juanjo se relacionaba con sus amigos. Incluso en esa pista llena de gente podía darse cuenta de que él estaba atento a todos; a ampliar el círculo si notaba que alguno de ellos estaba apartado, a ayudar a Bea a arreglarse el pelo, a sujetarle un pequeño espejo a Naiara para que se repasara el labial. Estaba pasándoselo bien sí, pero también estaba hiper atento a todo lo que pasaba a su alrededor y se preocupaba por estar disponible para todos.

"Padam Padam" empezó a sonar y todos gritaron emocionados. Martin amaba la canción y Chiara, sabiendo esto, le dio un pequeño empujón para que se pusiera en medio de sus amigos a bailar. Al chico esto no le importó nada y se contorneó sin vergüenza mientras cantaba y sus amigos le animaban. Martin estiró el brazo cogiendo a Denna para que le siguiera, ya que se había dado cuenta de lo bien que bailaba la rubia y ella aceptó encantada. Los dos bailaron pegados, cantando y moviendo sus caderas juntos y en el estribillo Martin no pudo evitar mirar a Juanjo, que tenía su mirada clavada en él y parecía completamente ajeno a cualquier otra cosa que estuviera pasando a su alrededor.

In between the lyrics - Juantin OT 2023Donde viven las historias. Descúbrelo ahora