2.- Conflictivo.

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Lo abruma. Lo aturde. Lo confunde.

"¿Por qué me haces sentir así?"

Las preguntas surgían en la cabeza del demonio, debía admitir que el no se relaciona como los humanos, hoy es uno de esos días en aquella dimensión donde compartía tiempo con Stanford donde cuestionaba el por qué era tan blando con él. Le preocupaba distraerse del plan principal, obviamente le gana más su avaricia que el afecto que está adquiriendo...¿no?

Lo observaba con sumo detalle, se dedicaba a hacerlo sentir cómodo en aquella convivencia, incluso para la comodidad del mortal le creó aquella extraña celebración siendo éste un "karaoke", donde incluso se emborracharon y divirtieron.

Una cosa llevó a la otra.

El conflicto aquí es que desde aquel día se volvieron incluso más unidos de lo que ya eran, esto lo frustraba, y no por que le disguste la presencia de Stanford, solo no quiere que esto interfiera en sus deseos de dominar todas las galaxias y líneas temporales. Porque eso quiere. El problema es que quiere dominar las galaxias, cosmos, dimensiones pero...con él. ¿Por qué?

Quiere dominar y ser poderoso con Stanford. Lo quiere a su lado. Pero, ¿por qué?

Un pensamiento impulsivo y doloroso de perder a Stanford y volver a aquella soledad le causó un sentir extraño en toda su composición, incluso le costó mantenerse estable al lado de aquel hombre al siempre estar flotando de acá para allá a su lado.

— Bill, ¿está todo bien?, hace unos días yo estaba pensativo y ahora tú te ves...mal, ¿está todo bien? — Si se tratará de otra persona seguramente reaccionaría agresivamente por el posible hecho de verse débil. El demonio con forma triangular lo vió fijamente y su ojo reflejó una sonrisa al achinarse de forma suave, al igual que su voz sonó incluso un poco suave al dirigirse al humano.

— No te preocupes, Fordsy. Aún si lo dudas los dioses igual nos cansamos. Posiblemente sea eso. — "Deseo imaginar que solo es cansancio." Pensó el mismo inmortal. Pero inconscientemente su ojo reflejó aquella inquietud, apartó la mirada de Ford para que no notara que algo lo preocupaba.

— Si lo deseas vuelvo a mi línea temporal para que descanses. No tengo problema, Bill. — La angustia llegó a Bill, no quería que este se fuera, pero tampoco le gustaría que lo viera con cierta debilidad.

Por lo que aceptó, dejó la mente de Ford después de lo sugerido. Ahora mismo Stanford se encontraba exactamente en la posición de invocación que hace siempre cuando decide verse con Bill Cipher, cuando iba a levantarse notó una nota caer lentamente a sus pies, la tomó con delicadeza y notó la característica escritura del susodicho;

"Lamento la despedida. Mañana nos vemos como siempre, haré cosas de dioses poderosos. No me extrañes mucho, Sixer.~ "

Una sonrisa adornó el rostro del humano y al acercarse a su escritorio en aquella habitación (un búnker creado para ser oficina) llena de artefactos de sus investigaciones, libros e incluso materiales de experimentos, en sus diarios y libros en una tipo cajonera, dejó la nota en la colección de estas que el mismo demonio le deja al finalizar cada reunión. Acto seguido, decidió distraerse igual un poco, debía admitir que la ausencia de Bill lo debilitaba mentalmente, eso no estaba bien y siempre se lo recuerda a sí mismo.

Depender emocionalmente de algo es peligroso.

Por lo que decidió tener algún tipo de reunión, no con el mismo significado que con su socio, sino convivencia humana de una buena relación interpersonal que tenía, Fiddleford McGucket, un preciado asistente que tuvo para lograr toda aquella conexión que actualmente tiene con el demonio. Lo ayudó y llegó en el pasado a Gravity Falls al ser grandes amigos de la universidad donde se conocieron. Está totalmente agradecido con él igualmente.

" vínculo genuino. " - BillFord.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora