El refrigerador estaba casi vacío, excepto por un par de yogures y algunas cajas de leche de banana casi terminadas, de igual forma, Jungkook gruñó y miró el reloj de la pared, no era tarde, en realidad eran apenas las doce del día y bien podía ir de compras al supermercado, pero había un gran inconveniente.
Su última paga no había llegado aún.
Sabía que, en esas épocas, los encargados de repartir los sueldos estaban atareados, y cómo no, también más concentrados en sus propias cosas que en otra cosa. Jungkook no los culpaba.
Pero comenzaba a cuestionarse si Namjoon había dado la orden que le pagaran incluso si no trabajaba, porque para sus cuentas, ya eran muchos días de retraso para un pago quincenal, sin mencionar el bono de Navidad que tenía que recibir.
¿Y qué si Namjoon sólo le mintió y lo despidió por negligencia? Oh, Dios.
Dio un saltito del susto cuando su celular sonó en la sala de la casa y agradeció que Hyeon no se despertara por el tono de llamada, porque vaya que le había costado bastante hacerlo descansar y por el momento, no sabía si sería capaz de aguantar otra ronda de lloriqueos.
El cachorro había estado impaciente y extraño hacía días. Lloraba mucho y dormía casi todo el día para darle a su padre una ola de berrinches en mitad de la madrugada, Jungkook realmente no sabía por qué pero claro que quería averiguarlo porque así solucionaría lo que molestaba a su cachorrito.
Excepto, claro, si era referente a Juwon. Entonces Jungkook no podría ayudar en nada más que acurrucarse contra él.
Tomó el teléfono de la mesita de centro y sonrió un poco al ver el nombre en la pantalla.
–Por fin respondes, creí que me haría viejo por esperar –negó, a pesar que el otro no podía verlo.
–Eres un exagerado, hyung –Yoongi rió al otro lado de la línea.
–Puede ser. Estuve pensando –Jungkook no podía verlo, pero a juzgar por su voz, podía saber que seguramente estaba comiendo algo, porque su voz sonó amortiguada cuando habló de nuevo–. Tenfo que compaf alfo, ¿vamos?
–Si te refieres a salir juntos, puede ser –se rió y agradecía a la luna porque Yoongi lo hacía sentir bien, como si nada estuviera mal y era de las pocas personas (por no decir la única) que lo trataba como si nada hubiera pasado jamás.
Y no había algo que lo hiciera sentir mejor.
–Sí, eso, acómpañame. Tengo día libre, además no he visto a mi cachorro favorito, mi dosis diaria de Hyeon era lo único que me hacía ir a la guardería, sin él no es lo mismo –Jungkook soltó una carcajada.
–Pero, hyung –puchereó a la nada–, no tengo dinero.
–Depositaron el bono de Navidad ayer. Namjoon dijo que los pagos se atrasarían unos días, por unas cuentas que le salieron mal, pero los bonos están listos.
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DEAR ALPHA ✧ VKook Ⓟ
FanfictionCon la marca de un alfa que ha muerto, con un bebé de apenas tres meses y una vida de cabeza, Jeon Jungkook tiene que lidiar con el destino que no ha hecho más que darle tragos amargos uno tras otro. Si la marca no cura, morirá. Y si muere, el cach...