Encontronazo

¿Partido o besos?

Y el problema que el Harry Styles del futuro tenía que resolver, apareció frente a su rostro golpeándolo grotescamente. Obviamente, no tan literal, por qué lo único que golpeaba la
mente de Harry era la mierda de idea que se le acaba de pasar por su cabeza. Según él, era la mejor solución...

Ah, Inglaterra perdió. España ganó. Y Louis pilló una rabieta del demonio. El caso, Harry se levantó y salió disparado hacia las escaleras, ni siquiera avisó a sus amigos de hacia dónde iba, simplemente necesitaba llegar a una persona en concreto.

El bullicio de gente y las grandes avalanchas de personas bajando por las escaleras, no le dejaban circular correctamente. Las palmas de sus manos comenzaron a sudar cuando detectó el cuerpo de Louis envuelto en una bandera de Inglaterra a bastante escalones de él, no iba a llegar a tiempo.

-Perdone- Pidió permiso para bajar, mucha gente reconocía al mismísimo Harry Styles, estos mismos los dejaban pasar por delante y otros simplemente gruñían sin saber con quien se estaban metiendo.

Los gritos eufóricos de sus amigos a su espalda, decidió ignorarlos, ya le contaría más adelante lo sucedido.

Sus ojos color esmeralda solo estaban mirando a Louis, a nadie más, pues en un lugar lleno de miles y miles de personas, él siempre miraría a Louis.

-¡Louis!- Gritó a pleno pulmón, pero no se giró, tal vez, por qué no lo había escuchado o por qué prefería ignorar al chico junto a la situación sucedida anteriormente. -¡Louis!- Nada.
Sin embargo, el rostro de Ed, si se encajó para mirar hacia arriba, observando la situación.

Ed, tocó a Louis por el brazo, y señaló dirección a Harry. Acto después, el rostro sonrojado de Louis estaba sobre el cuerpo que bajaba a toda velocidad hasta llegar al castaño.

La gente no estaba de acuerdo con que un jovenzuelo estuviera dando empujones para llegar a otro.
Louis yacía ahora quieto a cuatro escalones del suelo. Harry llegó hasta a él, treinta segundos después.

Ed y Oli, bajaron tres escalones para darles intimidad. La gente rodeaba a ambos chicos que estaban parados en frente del otro.

-¿Qué estás haciendo?- Preguntó Louis, en su tono de voz se marcaba un rito ajetreado, como si su corazón fuera a salir del pecho en cero coma.

El cuerpo quieto y curvilíneo del ojiazul estaba envuelto en aquella bandera, que le hacía ver adorable. Sus mejillas estaban tan sonrojadas que parecía que acababa de correr un maratón, los labios carnosos y delgados entre abiertos, sus pestañas decorando sus ojos color zafiros, su pelo alocado de tal manera que se notaba que había estado tirando de su pelo por culpa del estrés del partido. Su cuerpo en dirección al de Harry. Realmente estaba tan hermoso.

Harry consiguió inhalar algo de aire, colocándose lo mejor posible el cabello, e intentando calmar sus latidos.

Las personas que pasaban por allí, miraban la situación incrédulos, seguramente mucha gente los estaría reconociendo.

Harry cayó en ese gravísimo error. Mierda. Se harían trend en un abrir y cerrar los ojos.
Louis percibió el terror en la expresión de la cara de Harry.

-Ven- Sin pensar, tomó los delicados dedos de Harry entre los suyos, entrelazando sus manos. Y en ese momento, todos los gritos, los miedos, las preocupación, los problemas y todas las mierdas de Harry desaparecieron, su cuerpo se introdujo en una paz y una seguridad que nadie nunca le había hecho sentir.

-Lou, nos están mirando- Harry seguía el ritmo rápido de Louis. Observaba sus manos entrelazadas y lo decidido que se veía el ojiazul.

-Que miren- Literalmente media grada había dejado paso a las dos figuras famosas.