El USS Leviathan y el Kirov estaban en una operación conjunta para monitorear y coordinar la neutralización de la amenaza que representaban los submarinos Belgorod. La colaboración entre las flotas estadounidenses y rusas había comenzado, pero la tensión seguía en aumento mientras se aproximaban a la ubicación estimada de los submarinos.
Nathan, Hornet y Prinz Eugen se encontraban en la sala de operaciones del USS Leviathan, revisando los informes de inteligencia y preparando el siguiente paso en la operación conjunta.
—Las señales de actividad en la región están aumentando —dijo Hornet, observando los monitores. —Nuestros radares han detectado movimientos sospechosos que podrían indicar la presencia de los submarinos Belgorod.
Prinz Eugen asintió. —Debemos estar preparados para cualquier eventualidad. Los informes indican que los submarinos han sido renombrados como el Belgorod y el Kursk para esta operación, y han sido asignados nombres adicionales: Vostok, Kievan Rus, Admiral Kolchak, y Knyaz Vladimir.
Mientras Nathan y su equipo ajustaban las estrategias, los sensores del USS Leviathan captaron una señal fuerte y distintiva bajo el agua.
—¡Tenemos una señal de los submarinos! —exclamó Hornet, enfocándose en la pantalla de detección. —Los nombres corresponden a los que nos dieron. El Vostok y el Kievan Rus están en movimiento, y los otros dos parecen estar en la misma área.
Prinz Eugen revisó los datos. —Los submarinos están en formación de patrulla, lo que sugiere que están esperando el momento adecuado para actuar. La presencia de los Admiral Kolchak y Knyaz Vladimir indica que podrían estar preparándose para coordinar un ataque simultáneo.
En las profundidades del Ártico, los submarinos Belgorod aparecieron en los radares con una precisión inquietante. Cada uno estaba equipado con armas de alta tecnología y tenía la capacidad de lanzar misiles desde su posición sumergida.
El Vostok se comunicó con el Kievan Rus. —Aquí el Vostok. Hemos detectado a las fuerzas conjuntas en la superficie. Mantendremos nuestra posición y esperaremos la señal para proceder.
El Kievan Rus respondió. —Entendido, Vostok. La situación está bajo control por ahora. Mantén los sensores activos y avísame si detectas alguna anomalía.
El Admiral Kolchak se dirigió al Knyaz Vladimir. —Estamos en la zona de patrulla asignada. La visibilidad es baja, pero nuestros sistemas están funcionando correctamente. ¿Estamos listos para iniciar las acciones planificadas?
El Knyaz Vladimir respondió con frialdad. —Sí, estamos listos. Asegúrate de mantener la comunicación abierta y de seguir el protocolo. No queremos errores en esta fase.
Nathan, Hornet y Prinz Eugen recibieron actualizaciones constantes sobre las posiciones de los submarinos Belgorod. Los submarinos estaban operando de manera coordinada, pero no se había producido ningún ataque aún.