Criminal Love

Capítulo 2.

Max Verstappen.

Su nueva adquisición.

No sé porque me prende la idea de pertenecerle al Capo de la Mafia Italiana. Sus palabras no me sorprendieron ya que escuché a mi padre hablar con el hombre que acaba de acomodarme todos los órganos.

Mi padre es un bastardo de lo peor, mi objetivo es verlo muerto; una basura como el no merece vivir. El pertenecerle al capo me daría estatus y poder en la mafia.
Jos Vertappen era capaz de hacer cualquier cosa con tal de proteger su propio culo y hoy lo volvió a demostrar al ofrecerme ante el hombre más peligroso del mundo.

-Ya sabes que ahora eres de mi propiedad ¿no?.- Vuelve a hablar el capo.-Supongo que escuchaste mi conversación con tu padre. ¿Estás dispuesto a saldar una deuda que no es tu tuya?.

Asentí totalmente seguro.

-La pagaré.

El hombre de ojos achocolatados se encoge de hombros y se da la vuelta para salir del baño sin decir una sola palabra más.

Una vez que el sale del baño me pongo a analizar los chupetones que ha dejado en mi cuello, aún puedo sentirlo dentro de mi. Puedo sentir todavía sus labios en mi cuello, su mano en mi erección y sus caderas empujando despiadadamente contra mi trasero.

Después de unos minutos termino saliendo del baño para poder irme a casa. Una mano frena mi paso y volteo a ver de quien se trata, mi padre me analiza de la cabeza a los pies.

-Ví al capo entrar al baño y después a ti, ya te entregaste a el tan rápido.- Dice con burla y un aíre despectivo.- Eres igual de fácil que tu madre...- Antes de que pueda decir algo más yo me encargo de propinarle un puñetazo.

La sangre en mis venas comienza a hervir.

-Escúchame bien, hijo de puta.-Le digo tomándolo de la barbilla.-Agradece que en estos momentos la jodida entrepierna de ese hombre me tiene de buen humor, pero ese buen humor no va a durará para siempre. Vuelve a decir una de tus estupideces y serás hombre muerto, Sergio aún no se entera de toda la verdad. No te conviene que el sepa todo lo que has ¿o si?.

Mi padre se sorprende al ver que conozco sus secretos. El hombre quiere iniciar una campaña contra Sergio, quiere poner a todo su clan contra el mismísimo capo. Solamente yo sé esto porque uno de sus amigos es mi socio y me advierto sobre lo que quiere hacer este pendejo.

-Tu no sabes una mierda.-Dice con convicción.

Enarco una ceja.

-¿Crees que el Capo quiera saber que intentas poner a toda su gente contra el?.-Le pregunto con burla.- Deja el jodido fentalino porque ha comenzado a atar las pocas neuronas que te quedaban.

Veo como quiere golpearme, pero antes de poder lograrlo yo ya estoy encajándole mi rodilla en el estómago.

-Advertido ya estás, bastardo.- Le digo antes de irme del bar para dirigirme a mi hogar.

.......

Entro a mi departamento e inmediatamente las luces se encienden dejándome ver a Sergio sentado en uno de sillones, no esperaba verlo aquí tan pronto.

-Max.- Me llama.- Ven acá.

Mis piernas flaquean al escuchar la forma tan autoritaria en la que mi nombre salió de sus labios. Ni siquiera me molesto en preocuparte por el hecho de que está en mi hogar, sería estúpido pensar que el no pueda entrar a cualquier lugar al que quiera en el momento en el le apetezca.