Capítulo diecisiete | "Arrasar."
Addie.
—¿Alguien quiere café?— Aleshca es la primera en levantar el rostro enterrado en el libro y reveló las pronunciadas ojeras que demacraban su rostro.
—Por favor, sino creo que podría quedarme dormida sobre este montón de fracciones del demonio.— prácticamente me arrebata una de las tazas de café que traje de la cafetería.
Dejó las otras dos sobre la mesa cuando ni Bree ni Jaqui se mueven. Bree porque está concentrada en un libro de Historia del Arte y Jaqueline porque posiblemente no me escuchó por estar dormida. Llegó el peor tormento de los estudiantes, la temporada de exámenes finales. El sufrimiento por tener que estudiar y aprender toneladas de libros es aliviado con el consuelo de las vacaciones y el final de mi último años universitario.
Bree hace el libro a un lado y mueve los dedos por el teclado de su portátil a toda velocidad. Luego de unos minutos sin parar se detiene y se frota el rostro con frustración. Está mañana la vi aplicarse una buena cantidad de corrector en las bolsas oscuras bajo sus ojos, la falta de sueño y mantenerse despierta a base de café y tés les está pasando factura a todas. Después de haberse pasado todas estás semanas de fiesta y risitas ahora pasan toda la noche en vela estudiando para no perder ninguna materia. Mientras tanto yo me relajo y me regodeo en su miseria porque ya terminé todos mis proyectos finales y estoy lista para todos los exámenes, si acaso un contendio o dos que tengo que repasar para estar segura.
—Juro que con un tres me conformo, como esa vieja menopáusica no me apruebe me suicido.— bruja Bree y se gana una mala mirada de un par de estudiantes.
Decido sentarme junto a Jaqui a hacerles compañía en la biblioteca. Mi amiga rubia está desarmada sobre una pila de libros y apuntes mientras ronca y se le escapa un hilito de saliva de la boca. A pesar de que Bree, Jaqui y Vanir estudian arte, a parte de tener que pasar las pruebas de aptitud también deben aprobar las clases de las materias básicas que les obligan a tomar. Es jodidamente abusador pero así son las cosas aquí. Según tengo entendido, Vanir está con el cabrón de su hermano al cual no veo desde hace dos semanas. No lo negaré, ya no me molesto en hacer eso, me molesta en sobremanera no tenerlo cerca todo el día. Creo que de cierta forma me hizo sentir un poco menos sola. A parte de los mensajes de texto de los primeros días no hemos tenido más contacto, uno de sus hombres sigue apareciendo todos los días puntual a la hora de almuerzo con un par de bowls para mí pero ya. Ni siquiera está viniendo a la universidad, ni un susurro de su nombre
Según la información que le he sacado a Emilio el está bien, en Rusia, pero bien. Ese es otro punto que me molesta. ¿Vino aquí a molestarme con todas esas ínfulas de macho obsesionado dispuesto a todo por tenerme y se va? Cada vez que pienso en el se me revuelve el estómago, una sensación de vértigo me recorre y me lleno de ansiedad, junto a mi psicóloga estoy tratando de descifrar que son estas intensas emociones que su presencia me produce. No me he atrevido a confesarle lo de mis deseos de tocarlo, creo que eso es algo demasiado íntimo y personal y todavía estoy tratando de lidiar con eso.
—Jaqueline.— la muevo, ella solo suelta un balbuceo que parece una queja y sigue durmiendo.— Jaqueline.— vuelvo a intentar pero voltea el rostro y sigue durmiendo.
Como último recurso la empujo con fuerza y ella cae de la silla con un grito de sorpresa.
—¿Qué pasa?— me mira enojada he intenta acomodar su cabello inútilmente.
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Almost Paradise | +18
Novela JuvenilKai: Ella es mía. Incluso antes de nacer ya era mía. Fue creada para mí y solo para mí, mataré a quienquiera que se atreva siquiera a verla. No me importa si me odia, su cuerpo me desea y con eso me basta, por ahora. Porque del odio al amor hay un...