Pactos y Lágrimas | Angel Dust Y Tu

Capítulo ❥ 16

Sweet as sugar
Cute as hell
Love me once
I'll love you twice...

💗

Hadeon caminaba con pesar, tratando de concentrarse en las miles de prendas que había visto con Cherry. Habían estado un rato recorriendo las tiendas de aquí a allá, mirando alguno que otro accesorio bonito que les llamara la atención. Iban pasando por unos escaparates platicando cuando su amiga se fijó en ellos. Sus ojos brillaron y la tomó de la muñeca, arrastrándola hacia el interior de la tienda.

-¡Vamos, Hanni! ¡Voy a endeudarme con todo esto! -exclamó la rubia, dejando a la pelirosa por los pasillos. 

Se puso a buscar entre las prendas colgadas en los anaqueles, pasando por los vestidos.

-¿Pero no aún no terminamos de pagar la salida anterior? -preguntó Hadeon, observando cómo Cherry apilaba ropa sobre sus brazos sin detenerse.

-¡Ay, ni te preocupes por eso, bonita! Eso puedes déjamelo a mí, ahora ve a probarte estas cosas. ¡Corre, corre! -la empujó hacia el probador.

Hadeon alzó una ceja, pero se encogió de hombros y comenzó a probarse la ropa. Igual esas cosas siempre le habían gustado. El primer vestido que se puso era ceñido del torso, largo, con una abertura en la pierna y los hombros caídos, muy elegante de un color rojo intenso. Cuando salió a mostrárselo a Cherry, su amiga abrió la boca sorprendida.

-¡Uuuh! Ese se ve tan ardiente, llévalo -exclamó-, aunque tal vez demasiado para esta ocasión...

-¿Ocasión? -preguntó Hadeon, confundida.

-¡Shu, shu, shu! -Cherry sacudió las manos y la empujó de regreso al vestidor, esta vez con otro vestido en manos-. No hagas preguntas y pruébate ese -dijo, cerrando la cortina.

La pelirosa se apresuró a ponerse el nuevo vestido, algo escéptica y más por el estampado demasiado floral para el infierno, pues al correr la cortina y ver la expresión de Cherry, supo que no había acertado.

-¿Tan mal se ve? -preguntó muy preocupada.

-Ugh, si, creo que elegí mal ese. Pareces el mantel de mi abuela -dijo Cherry, haciendo una mueca-. Espera aquí, buscaré algo más...

-¿Qué estás planeando, Cherry? -preguntó Hadeon, cruzándose de brazos.

Comenzaba a sospechar de toda la actitud de la rubia pero no estaba totalmente segura.

-Nada del otro mundo, solo una salida muy bonita para las dos para que olvidemos a la mierda del mundo. Tú no te preocupes -dijo Cherry, revolviendo entre las prendas hasta encontrar lo que buscaba.

Finalmente, apareció un vestido rojo de estilo gótico, con una falda amplia y corta en el frente, un moño negro que caía por la espalda, mangas esponjosas de gasa y un corsé ajustado. Los ojos de Cherry brillaron al instante.

-¡Este es el indicado! ¡Pruébalo ya! -exclamó, empujando a Hadeon de nuevo hacia el vestidor.

-¡Tranquila, Cherry! Ya mismo lo hago -dijo ella, riendo a pesar de sí misma.

Miró el vestido, admirando su belleza. Se lo puso y salió tímidamente, sintiendo que el nerviosismo se apoderaba de ella.

-Ah... Cherry, creo que esto no es una buena idea -murmuró, insegura.

-¡No inventes! ¡Ven aquí! -Cherry la jaló al espejo.

Cuando Hadeon se miró, se quedó sin palabras. El vestido era perfecto en todos los sentidos, y se veía increíble con él. Cherry, con una sonrisa de oreja a oreja, le puso las manos en los hombros.