Relatos eróticos con Jeon Jungkook
Este libro tiene lenguaje inapropiado, escenas subidas de tono, maltrato entre otras cosas.
Si no te gusta este tipo de contenido te invito a que te sigas deslizando y evites dejar malos comentarios.
ESTA HISTORIA...
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Step Daddy (Part Two)
Meses habían pasado desde mi encuentro con mi padrastro, trataba de no dirigirle la palabra o tan siquiera verlo, me da a vergüenza y arrepentimiento. Había algo en mí que quería ir tras él y decirle que me hiciera suya en todas las formas posibles, pero otro lado de mi se sentía culpable, me sentía mal por mi madre, quien nos amaba a ambos con todo su corazón y eso rompía el mío.
-Señorita, es su turno- Habló la chica frente a mí, logrando sacarme de mis pensamientos. -Oh si, lo siento- Dije mientras sacaba mis documentos de mi bolso, colocándolos sobre el escritorio. -Así que ___, ¿correcto?- Preguntó a lo que yo asentí. Comenzó a revisar con detalle cada hoja que le había entregado, haciéndome sentir nerviosa-Tienes un historial académico perfecto, cumples con todos los requisitos del perfil establecido- Sonrió viéndome fijamente. -¿De verdad? Muchas gracias- -Te haremos saber el resultado en unos días, ¿vale? Pero si puedo decirlo, muy posiblemente seas seleccionada- Dijo a lo que yo sonreí aún más. -Muchas gracias por su atención, nos vemos- Dije saliendo de su oficina y del edificio, tomando el autobús para llegar a casa.
Acababa de salir de una cita que tenía programada para poder aplicar una solicitud para una universidad en Boston, la cuál era de mis universidades deseadas y una de las mejores opciones.
Es una decisión que estuve tomando desde hace y a un tiempo, la cuál surgió debido a que tenía que hacer algo para olvidarlo, para poder sacarlo de mi mente y corazón. Jeon no sabía absolutamente nada y era lo mejor, que no se enterara, por ahora.
Después de unos minutos llegue a casa, camine si lo una cuadra y abrí la puerta, caminando a la coco a para tomar un vaso de agua. Abrí el refrigerador y saqué la jarra con agua helada, agregándole aún más hielo y beberla de un solo trago, sintiendo el frío líquido bajar por toda mi garganta.
-Que agradable sorpresa, mi muñequita regresó- Dijo con voz ronca, haciéndome temblar mientras dejaba el vaso en el fregadero.
Metí la jarra de nuevo en el refrigerador, volteándome para salir de la cocina pero su mano sujetó mi brazo firmemente.
-Oye, ¿por qué la prisa? Si yo lo único que quiero es ver a mi muñequita- Dijo arrinconándome contra la mesa de la cocina, su brazo izquierdo enrollado firmemente sobre mi cintura mientras que su mano tatuada tomaba mi barbilla, obligándome a mirarlo. -S-Señor Jeon...- Me calló con un fuerte beso que me dejo sin aliento, dude un poco pero al final cedí a sus deliciosos labios. -¿Qué acaso no me extrañas, muñequita? ¿No extrañas a papi?- Preguntó contra mis labios, mordiendo mi labio inferior en el proceso-Últimamente pasas más tiempo fuera que en casa, ¿a que se debe, mhm? ¿es por mí?- -No todo entorna en ti, por si no lo sabes- Dije bruscamente apartándolo de mi, caminando lejos en camino a las escaleras- -No tan rápido- Dijo tomando mi brazo rápidamente-¿Me dirás el por qué estás tan distante? ¿el por qué no estás en casa?- -No tengo porque darte explicaciones, ahora muévete- Lo empuje nuevamente, caminando escaleras arriba a mi habitación.
