𝘼𝙢𝙞𝙜𝙤, 𝙢𝙚 𝙜𝙪𝙨𝙩𝙖 𝙩𝙪 𝙥𝙧𝙞𝙢𝙖 ━ Gwen Tennyson

❛Despejar la mente❜ ┅ Capítulo 7

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━¡Beeen! ━reclamó el niño-ninja, el cual estaba a punto de recurrir a las habilidades dadas por Nomicon -para la mala suerte de este- con el único fin de arrebatarle ese condenado mando, mando que Ben se negaba a soltar o ceder ━Vas a morir si sigues haciendo el tonto y ni siquiera hemos llegado al punto de guardado ━renegó Randy con desesperación y malestar, sintiendo como su arrepentimiento le apaleaba por dentro. Nunca tuvo que dar la idea de "cada vez que alguien muere debe ceder el mando", Ben se rehusaba a morir siguiendo las ideas más absurdas posibles. 

«Un segundo- morir... un solo mando» reflexionó Randy, sintiendo como su rostro se iluminaba a causa de recordar lo que había traído para esta noche inolvidable: el CuatriMcFist: una consola con 4 mandos incluidos, la cual había sido exclusivamente creada para poder abarcar grupos grandes de jugadores y, para la buena suerte de esta pijamada, tuvo la genial idea de traer consigo esa maravilla de consola, la cual nunca pudo estrenarla correctamente a causa de no poseer un grupo grande de amigos. 

Podría traer la consola, así al menos se agilizarían un poco las cosas- aunque eso significara tener que desconectar y cerrar la partida de Ben. De igual manera, seguro que él lo comprendería.

━Hey, me voy a buscar algo que está en mi mochila. Ya vuelvo ━aviso Randy, levantando su mano con la intención de llamar a los chicos, la cual resulto a la perfección, algunos asintieron con la cabeza y otros solo lo miraron, diciendo entre líneas: "okay pero no tardes". 

Randy se levantó del sofá y estiró sus piernas, sintiendo las consecuencias de estar sentado, casi sin moverse en un cómodo y suave lugar por mucho tiempo. Sus piernas un poco más y no le respondían. 

«Maldigo las escaleras con toda mi alma» pensó el ninja de noveno grado al observar cuantos escalones tenía que pisar para poder llegar al segundo piso de la casa. Acción que su cerebro desaprobó totalmente, en cambio, lo invitó cordialmente a volver a recostarse en el gigantesco sofá, bebiendo e ingiriendo todo lo que quisiera mientras se deleitaba con el transcurso de una adictiva partida de videojuegos.

«Sí bueno, pero yo también quiero jugar» reflexionó el muchacho, reiterando la idea a su cerebro de que si bien, era tentador todo lo que estaba dejando a su imaginación, también estaba profundamente comprometido a jugar juegos de su mundo con su nuevo grupo de amigos, además, finalmente estrenaría la CuatriMcFist y, de paso, le daría una patada en el trasero a Jake en los videojuegos, campo que la lagartija voladora presumía con lujo de detalle al ser "tan bueno que parecía de no creer".

Randy abrió la puerta del dormitorio de Ben, corrió hasta su mochila, tomó con cierta dificultad la gran consola, más todos los mandos los cuales caían por doquier a causa de haber sido levantados bruscamente, incluso algunos llegaron a chocar contra el suelo pero por suerte, ninguno sufrió lesiones más allá del estremecedor ruido. 

Cunningham salió mediante ciertos tambaleos y con la gracia de una bailarina cerró la puerta del dormitorio de Ben con una sola mano mientras la otra aguantaba lo mejor que podía la pesada consola de forma de cubo y arriba de la misma, mandos que volvían a amenazarlo con caer.

━Oh ━exclamó Gwen, genuinamente sorprendida por encontrarse a un Randy paralizado en su lugar, cargando con una consola de color verde y negro con forma de cubo y, arriba de esta, cuatro mandos con el mismo patrón de colores ━Randy ¿No es así? ━pregunto la risueña pelirroja, la cual hizo un ligero esfuerzo en recordar la presentación del tan enérgico chico.