Capitulo 27: Planes de Batalla

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Selene, Sergio y los demás guerreros se preparaban para despedirse, conscientes de que su misión había llegado a su fin. La atmósfera era solemne, pero también había un sentimiento de logro. Habían entrenado a Bellatrix, Hermione y Hope, dándoles el conocimiento y las habilidades necesarias para enfrentar lo que estaba por venir. Sin embargo, la pequeña Hope no podía evitar sentir una profunda tristeza al verlos partir. Era una niña cariñosa y empática, que se había encariñado con ellos durante su tiempo juntos.

Hope, con los ojos ligeramente húmedos, corrió hacia los guerreros, abrazando primero a Selene, luego a Sergio y a los demás. A pesar de su apariencia ruda y sus poderes ancestrales, los guerreros no pudieron evitar sonreír con ternura ante el afecto de la pequeña. Sergio, el más serio de todos, incluso se agachó para devolverle el abrazo, y Selene acarició el cabello de la niña con una sonrisa cálida.

No estés triste, pequeña Hope —dijo Selene en un tono suave, que contrastaba con su habitual firmeza—. Siempre estaremos contigo en espíritu. La conexión que has forjado con nosotros perdurará.

—Y estamos seguros de que estarás bien —agregó Sergio, mientras miraba a Bellatrix y Hermione con aprobación—. Eres más fuerte de lo que crees.

Con los abrazos y las palabras de despedida, los guerreros comenzaron a desvanecerse en un destello de luz, desapareciendo uno por uno. La barrera mágica que había protegido la mansión durante todo este tiempo cayó suavemente, como si el aire mismo liberara un suspiro. La mansión Black Garner estaba nuevamente accesible.

No había pasado ni una hora desde que la barrera cayó cuando los amigos y familiares de la familia Black-Garner comenzaron a llegar apresuradamente. Harry, Neville, Luna, Ginny y el resto de la Orden del Fénix entraron con expresiones de preocupación y urgencia. Narcissa, Dora, Andy y Regulus llegaron justo detrás de ellos, con rostros igualmente tensos. Todos querían saber qué había sucedido durante el tiempo que la mansión había estado sellada, y sobre todo, cómo estaban Bellatrix, Hermione y la pequeña Hope.

—¡Por Morgana! —exclamó Harry, abrazando a Hermione con fuerza—. ¿Qué ha pasado aquí? ¿Están bien?

Neville se acercó a Bellatrix, mientras Luna y Ginny miraban alrededor, como esperando alguna señal de lo que había ocurrido.

—Estamos bien — dijo Hermione, sonriendo ligeramente mientras Hope se acurrucaba a su lado—. Tenemos mucho que explicar.

—Y mucho trabajo por delante — agregó Bellatrix con una mirada seria, recordando la amenaza de Morgause. Pero por ahora, se sentía agradecida de que sus amigos estuvieran a su lado.

La sala de la mansión se llenó de voces, preguntas y abrazos, mientras los recién llegados se aseguraban de que todos estuvieran bien. Pero una cosa era segura: la verdadera batalla aún estaba por venir, y todos sabían que el destino del mundo mágico dependía de las decisiones que tomarían en los próximos días.

Bellatrix y Hermione comenzaron a explicar a sus amigos y familiares todo lo que habían vivido en los días recientes. Relataron su encuentro con los guerreros ancestrales, el entrenamiento intensivo y la amenaza inminente de Morgause. Sin embargo, ambas decidieron mantener en secreto la noticia del embarazo de Hermione. No querían que sus amigos se preocuparan aún más, ya que sabían que la misión que tenían por delante requeriría concentración total y que las emociones podrían ser una distracción.

—Nos enfrentamos a algo mucho más grande de lo que imaginábamos —dijo Hermione, mientras las miradas de todos se concentraban en ella.

Las Sobras del Pasado (2da parte de Un Vinculo Inesperado)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora