Cap. 10

103 15 2
                                    

Está por salir de su departamento pero se regresa a ver su reflejo en el espejo. Ha hecho eso cuatro veces ya. Está bastante nervioso.

Quiere que la salida con Jimin salga bien, espera con mucho ánimo que se sienta incluido y puedan salir más veces juntos.

Claro, con los chicos.

Se peina por quinta vez y sintiéndose un poco más satisfecho decide salir. Son las 9 de la noche y sabe que la cafetería está por cerrar, así que se apresura a llegar.

Por fortuna llega justo a tiempo.

—¡Koo!

—Hola, Minnie.

—Llegas justo a tiempo —Jimin le sonríe—. Hay algo que quería preguntarte...

Parpadea confundido —¿A mí?

—Si, es que verás... La cosa es...

—¿Ya nos vamos?

La voz del pálido los hace voltear a ambos. Voltea a ver a Jimin y lo ve lucir apenado.

—No pude quitármelo de encima.

Sonríe —No te preocupes, seguro que a los chicos les alegrará que seamos más.

—Sigues sin agradarme, Jongkook.

—Al menos ya te acercas más a mi nombre.

—¿Qué dijiste?

—¡Vamos! —Jimin lo toma del brazo y lo obliga a avanzar.

Yoongi camina tras ellos durante todo el trayecto.

El lugar no quedaba muy lejos de ahí, por lo que llegan relativamente rápido. Al entrar tiene que decir su nombre para que los dejen pasar y una vez dentro, busca con rapidez a sus amigos, encontrándolos en una de las mesas cercanas al centro de la pista.

—¡Hola chicos! —Saluda primero Jin—. ¡Oh, Jimin! ¡Que bueno que viniste! No sabía si Jungkook se atrevería a invitarte.

Siente el calor subir a sus mejillas pero decide ignorarlo.

—¡Y le agradezco que me invitara! —Escucha a Jimin decir—. ¡Se ve muy divertido el lugar!

—¡Las bebidas son lo mejor! —Esta vez, Hoseok dice—. ¿Y quién es tu amigo?

Ve a Jimin voltear y jalar a su hermano.

—¡Es el Yoongi! Es mi hermano, vino de visita y no quería que se quedara solo, ¿no hay problema?

Namjoon niega —¡Por supuesto que no! ¡Bienvenido, Yoongi!

El pálido saluda a todos con una amabilidad que nunca le mostró a él, pero lo ignora porque mientras Yoongi se acerca a hablar con Taehyung y Hoseok, Jimin se acerca más a él y no puede estar más agradecido de que Yoongi esté distraído con sus amigos.

—¿Te gusta bailar?

Asiente con una sonrisa —Baile es mi segundo nombre.

—Ese es un nombre raro —Jimin sonríe—. Pero vamos a bailar entonces, Koo. Yo también soy muy bueno.

Toma la pequeña mano entre la suya y los conduce al centro de la pista. La gente a su alrededor está muy animada y cada pareja parece estar en su mundo, así que no tardan en contagiarse de ese ambiente.

Le sorprende la manera en que Jimin mueve sus caderas, se ve delicado y se ve fuerte, es bastante sexy y tiene que dejar de verlo por unos segundos porque se siente extrañamente atraído a él.

Jimin no parece darse cuenta, pues a pesar de estar delante de él bailando, parece atrapado con la música en su propio mundo.

Un mundo donde Jungkook es el espectador y eso lo hace sonreír con más fuerza.

HOME • kookminDonde viven las historias. Descúbrelo ahora