Este es el repentino final de un libro con una historia a medio contar. Para los que se detengan en leer, quizá mis motivos les puedan convencer.
Es muy difícil continuar un libro de ficción cuando sus personajes no forman parte de mi realidad. Todo fue un proceso corto y espontáneo, en el que había que ser fuerte para no romperse ni caer en la debilidad.
Una persona sabia dijo: "hay que dejar la ficción para poder vivir en la realidad".
Y cuánta razón hay en esta frase, puesto que los personajes de esta historia están basados en la vida real, y ahora no son más que un grupo en el que antes había más que solo trabajo en equipo, también había amistad.En una mente con mil cosas más que ficción para contar, no cabe con la duda de con esto terminar.
Seguir no tendría chiste, estaría contando con fantasmas, describiendo simples ilusiones que ya no dan abasto ni llenan de alegría al escribir, con tanto entusiasmo, el que antes tenía. Decidí acabar con esto antes de acabar con mi mundo."Y un día te das cuenta que alejarte un poco del mundo para salvar el tuyo es lo mejor" - Jael Medina.
Y no hay nada malo en esto, porque:
"No tuvieron un final feliz, pero sonrieron todas las horas que pasaron juntos, y solo por eso valió la pena"
- Mario Benedetti.Y así, con estas palabras, cierro este capítulo que nunca llegó a completarse. Dejo en estas páginas el eco de lo que fue, pero también la certeza de que, aunque la historia se detenga aquí, el valor de lo vivido perdura. Al final, no es el desenlace lo que define una historia, sino los momentos que nos hicieron sentir vivos mientras la contábamos. Ahora, es tiempo de mirar hacia adelante y escribir nuevas páginas, en la realidad, donde los verdaderos protagonistas somos nosotros mismos.
•°lunijun
ESTÁS LEYENDO
La venganza de las felinas
Ciencia Ficción4 chicas con diferentes mundos ,que pelean contra sus más grandes enemigos .con la fuerza de :"las marcas del gato"