Cicatrices

Y así, comenzó el cambio

Entre todas juntamos para rentar un departamento bastante grande, ayer nos instalamos y acomodamos todo, es acojedor, no lo voy a negar.

-Sakura ¿no crees que hace calor para traer sueter?- Ino es como la hermana extrovertida que todo el mundo quiere y odia a la vez, es alegre por naturaleza, no como yo que finjo por convivir.

-Sabes que yo siempre tengo frío, Ino- sonreí, otra sonrisa falsa a la lista, y otra mentira.

-Esta bien, esta bien- me miro, dejando de insistir con el asunto, todas lo saben, de las cicatrices más no que lo sigo haciendo.

-Y...¿Sobre el asunto de la preparatoria?...- Tenten esta preocupada por eso, ella quiere terminar de estudiar y lograr ser más de lo que fueron sus padres, se los prometió antes de que la dejaran en el orfanato.

-Lo haremos...- asegure- Trabajare doble, pero terminaran de estudiar, se los prometo- sonreí, quiero que ellas sean felices, sus sonrisas aligeran mi carga.

-Entonces...Mañana mismo las inscribiremos en la preparatoria de Konoha- dijo Temari insegura, la verdad yo también lo estoy, es muy cara y... no, no importa, merecen lo mejor y lo tendran.

-¿Y ustedes? ¿No estudiaran? No pienso dejar que sólo trabajen- Karin es la hermanita menor sobreprotectora y molesta, la que pide justicia.

-Pongalo como que yo soy su madre y Temari su padre ¿ok?-sonrei, ¿los padres deben trabajar, no?

-¿Por qué yo el padre? ¿Tan poco feménina soy?- un aura de depresión aparecio en Temari, yo solo rei nerviosa, no quize decir eso.

-Eres la mas madura de todas, no es por feminismo, que si hablamos de ello, Ino y Karin nos dejan abandonadas.-Tenten me miro acusatoria, con la boca articule un "Lo siento, es la verdad" e hize una cara de lástima finjida.

-¡Mooo! ESTA BIEN LO ACEPTO, no soy la chica más feménina del mundo...- Tenten hizo un puchero, ella es muy graciosa.

Todas reimos y seguimos acomodandonos.

Por eso quiero ayudarlas...logran alegrar mi vida, auque sólo sea un poco.

Con esas risas me di cuenta de algo... así comenzarán nuestros cambios, aquí comienza nuestra verdadera vida.