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No estoy sola, pero me siento sola, cada corte en mis brazos me lo demuestra, quizá para ellas, mis amigas, soy algo, pero para mi no soy nada.

Mi madre esta muerta, mi padre me dejo sola, viví un infierno durante 3 años, fui maltratada y rechazada en un orfanato 7 años, todo eso me hizo saber que mis aspiraciones y sueños no tenian sentido, que desde principio de cuentas no debí nacer.

Todo dio un giro cuando tope con esa cabellera rubia y esos hermosos ojos azules.

Tengo un mejor amigo, al que le gusta una de mis mejores amigas.

Pero aún hay algo que me atormenta, mi profesor de ciencias.

-Sakura-chan- me llama alargando la última sílaba -necesito que te quedes conmigo al final de la clase.

¡Oh! ¡Por supuesto! Me quedaré con usted porque me aspira una confianza infinita -noten el sarcasmo-. Decido que ni loca me quedaré.

La clase pasa tranquila. Ojalá mi cabeza estuviera tranquila, no deja de crear un gran telaraña de suposiciones y más suposiciones.

Mi intención era salir del salón en cuanto el timbre sonará, para mi desgracia el profesor se puso justo en la puerta, abrió y dejo salir a todos, cuando estaba a nada de saborear mi libertad, me paró y cerró de un portaso.

-Creo que te acuerdas de mi ¿no?- dijo con veneno en cada letra.

-N-no se de que está hablando- su sonrisa se ensanchó y me miro como un verdadero psicópata.

-Recuerdas quien soy Sakurita, lo recuerdas muy bien- afirmó con esa sonrisa en el rostro, como si lo que me hizo esos 3 años fuera un chiste.

Dí unos cuantos pasos hacia atrás, con miedo saliendo por mis poros, tengo miedo...

-Necesito que termines de pagarme Saku- canturreo- Aún me debes demasiado pequeña.

-¡YO NO LE DEBO NADA! Termine de pagarle y me lo cobro con intereces- grite exasperada, temblando de impotencia.

-Me debes, me debes el haber ayudado a un trío de huérfanas, sin mi estarían muertas, y véanse, siendo ayudadas por Tsunade, a diferencia de ella, yo soy un maldito, y cobro por mi servicio, no tengo buen corazón y aún así las ayude ¿y al final como me pagaste? ¡Claro! Escapandote como una maldita cobarde, eso te suma una año más de paga- lo último lo dijo suavemente mientras tomaba entre su mano mi mejilla, retrocedi.

-¿Qué es lo que quieres Orochimaru?- intente no titubear.

-Que trabajes para mi, tengo un bar nocturno, con eso te aseguro me pagarás lo que me debes, y también quiero un servicio especial, ¿entiendes?- me tomo bruscamente del mentón para verle a los ojos- Claro si no quieres que algo le pase a tus amigas.

-Hecho, pero sólo será el año que te debo- retire mi cabeza y salí a pasos agigantados de la esquina del salón, antes de salir me detuvo.

-A partir de hoy, te quiero en esta dirección- me entregó un papelito- a las 12 en punto,arreglada para la ocasión, o habra un castigo, creeme, te divertiras.

Mire su sonrisa ¿se puede ser tan cínico? Tengo miedo de lo que venga después, no quiero decepcionar a nadie, pero creo que para mi ya es demasiado tarde. El trabajo comienza hoy, deseen que me vaya... bien.

N/A: Orochimaru es un hijo de puta con todas sus letras 7.7

Hola chicos, actualizando este coso súper temprano porque, no puedo dormir y pues eso, igual seguiré desaparecida, pero Meh, disculpen por eso también  :'c

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La Pau ♥

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