Capítulo IX

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Luego de lo que dijo la mayor ese día en el que decidieron el nombre del gato no pudo quitarse de la cabeza el hecho de que parecía que ya estaba pensando en tener hijos y a pesar de que era algo que habían hablado por mucho tiempo no era lo mismo en persona ni mucho menos, así que definitivamente debían tener esa conversación solo que no se atrevía a volver a ponerla en la mesa porque en primer lugar ella no lo había hecho y es que tenía bastante miedo a ser madre porque eran demasiados gastos, además de muchas cosas más que prefiere no pensar.

Aún así claro que tenía ganas de tener un hijo con su pareja porque al final era como una pequeña prueba del amor que se tenía y era lindo tener una familia, solo que los gastos, el cuidado de las privaciones que van a tener con la llegada de un nuevo inquilino a la casa iba a ser suficiente como para que la relación cambiará por completo y era algo que no le gustaba.

Tal vez estaba haciendo demasiado inmadura pero aún así lo iba a seguir diciendo sin ningún problema porque sabía el cambio que había.

Alguna de sus amigas ya tenían hijos porque no habían pensado bien y los habían tenido temprana edad, eso las había llevado a convertirse en personas muy diferentes y no le gustaba el gran cambio que habían tenido porque ahora aparecían señoras.

Chicas que tenían un gran alma e inocencia se habían convertido en seres que lo único que hablaban era de sus hijos y además para rematar no paraban de quejarse de lo difícil que era criar a un ser diminuto, eso le había llevado al lado oscuro de la maternidad porque lo único que escuchaba eran quejas y más quejas, ella no quería ser o sentir lo que sus amigas pasaban.

"¿Por qué me miras así?". Sana la miró con extrañeza, no era normal que su novia la mirara como si le estuviera intentando decir algo porque en muchas ocasiones utilizaban la boca para poder comunicar cosas que era lo más normal pero ahora lo único que había era un sentimiento indescriptible en la mirada que le estaba lanzando Tzuyu.

Como si fuera una mezcla entre el mayor miedo y escándalo que puede existir dentro de una persona, con un poco de tristeza y terror.

Algo estaba pasando dentro de la cabecita de la taiwanesa y debía hacer todo lo posible para poder entrar ahí y ayudarla porque no parecía estar pasándola bien.

Se sentó a su lado y con una pequeña sonrisa le hizo saber que la estaba escuchando y que podía expresarse o hablar acerca de lo que estaba pasando en su interior.

"¿No has pensado en tener hijos?". Minatozaki alzo ambas cejas al escuchar lo que dijo.

"Sabes muy bien mi postura sobre ese tema". Hace demasiado tiempo que no hablaban sobre eso y es que habían llegado a un tipo de acuerdo en el que definitivamente la que estaba mejor era la menor por esa razón es que Sana decidió que no iba a volver a hablar del tema y eso pasó hasta este momento, para su sorpresa era la contraria quien lo había sacado a la luz.

"Es que para tener hijos nos tendríamos que casar porque si vamos a adoptar se no sería más sencillo pero es que somos mujeres, las dos...". Murmuró. "Por lo que adoptar es más complicado para nosotras y piensa en que si tú lo tienes puede llegar a traer muchos problemas".

Minatozaki parpadeó varias veces intentando entender a su novia porque estaba hablando demasiado rápido, la estaba dejando sin palabras porque no la entendía y no parecía querer hablar de forma más pausada.

"Piensa en lo costoso que es la forma en la que nosotros podamos llegar a tener un hijo biológico y también lo mal que la vas a pasar embarazada, y lo mal que yo la pasaré porque de seguro me vas a hacer la vida de cuadritos". Sana se cruzó de brazos. "Además de que probablemente le heredes las enfermedades de tu familia o las mías".

"Ya hemos hablado acerca de ese tema y creo que lo dejamos claro en ese momento". Miró hacia otro lado con evidente incomodidad. "No vamos a tener hijos porque no quieres y no voy a tener hijos porque la forma en la que te expresaste en ese momento fue suficiente como para darme cuenta de que no quiero hijos".

Tzuyu recordó como escuchó a su novia llorar y tragó saliva, había actuado algo mal.

"Bebé...". Intentó tomar la de las manos pero la otra fue más rápida y las quitó.

"Es complicado tener hijos y lo mejor que podemos hacer es dejar las cosas así y además tenemos a Goku". Se levantó de donde se encontraba y caminó hacia el baño sin decir una sola palabra.

"Tampoco hemos hablado de la boda". Se frenó y volteó. "Me quiero casar contigo pero no hemos hablado sobre la boda".

"Se supone que alguna de las dos va a proponerle matrimonio a la otra y luego se habla de la boda, no nos podemos adelantar a los hechos antes de que ocurra lo primero". Asintió y Sana agradeció porque parecía que lo había entendido, no debía explicar nada más y era suficiente como para seguir con una conversación que no fuera incómoda. "Bueno...".

"Quiero tener hijos contigo". La mayor apretó la mandíbula. "Sé que es complicado porque he investigado pero aún así los quiero solo que me da miedo".

"Lo entiendo mi amor pero...creo que no es el momento de hablar sobre ese tema es mejor pensarlo bien y luego hablar". Abrazó a la menor y le dio un beso en la frente. "¿Qué te parece si mejor te hago algo de comer para que te distraigas y te sientas mejor?". Le acarició el abdomen y sonrió un poco.

"Me parece muy bien". Achino los ojos y fue suficiente para que la otra tuviera un ataque de ternura, la tomó las mejillas y la llenó de besos, no hubo lugar que no fuera besado y es por eso que ambas quedaron con las mejillas sonrojadas.

Todavía les parecía algo extraño tener esa clase de porque es que fueran más allá de lo cotidiano.

"Te amo". Se susurraron al mismo tiempo y se dieron un interminable abrazo en el que no fueron necesarias las palabras para poder expresar el amor que se sentían y por más que el tema que habían tocado era demasiado sensible, tenía la convicción de que iban a llegar a algo que las complaciera a ambas por igual como lo habían hecho durante toda la relación porque se amaban.

Con todo el corazón.

love line ; 𝘀𝗮𝘁𝘇𝘂Donde viven las historias. Descúbrelo ahora