Capítulo 23: Miedo

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-Chaeyoungie... Son las ocho. Vamos, despierta... - Con un poco de dificultad, abrí mis ojos y luego me levanté del pecho de Mina para poner mis manos en mi cara del cansancio.

-No tengo hambre, quiero seguir durmiendo...

-Chaeng, es solo una cena rápida, ya te irás a dormir. - Suspiré, me rasqué los ojos y salimos de la tienda.

Vimos que ya estaban casi todos, excepto Sana y Momo. Nos sentamos en unos troncos que había al rededor de la fogata.

-¿Que os han dado de comer? - Preguntó Mina.

-Solo estos malvaviscos. - Dijo Jeongyeon cogiendo una bolsa repleta de este alimento. - Los muy malditos han dicho que si no cazabamos, solo comeríamos esto. - Acabó de decir lanzando la bolsa a su lado.

-Pues que sepáis que vamos a estar tres días alimentando os de esto. - Dije yo.

-¿En serio? No se, el dia es muy largo y podríamos pesar o algo así. Mientras pedíamos la comida he visto que tenían cuatro cañas de pescar. - Dijo Nayeon.

-Bueno... Lo podemos provar. - Dije suspirando.

Pasaron unos pocos minutos, ya estaba oscureciendo y Momo y Sana no aparecían así que decidí ir a revisar. La imagen que me encontré me resultó algo incómoda. Sana estaba encima de Momo, besándola con cariño.

-Em... ¿Hola?

-¡Chaeyoung! ¡Casi me matas del susto!

-¿Que pasa ahora? - Dijo Momo levantando su cabeza, la cual estaba muy despeinada. Las miré extrañada y Sana se dio cuenta.

-¡No! ¡No es lo que parece! Está chica se ha dormido, y por más que le hablaba, gritaba y la pegaba levemente no despertaba. Probé con un beso y ahora está así. - Dijo cogiendo a la japonesa mayor del brazo para que salgan. Decidí creer a Sana, parecía que lo decía con sinceridad.

Se sentaron y les explicamos todo el panorama de la comida, comimos un poco de malvaviscos y algunos ya nos estábamos durmiendo.

-¡Oye! ¡No os durmáis! Anda, escuchad mi historia, así os entretenéis. - Algunos nos quejamos un poco pero la coreana le dio igual y explicó la historia.

Lo que contó iba de que antes, en este bosque, vivía un maniático que mataba a la gente mientras está dormía y bla, bla, bla... La típica historia de "terror" que cuentan siempre. Pero parece que a Han, a Nayeon y a Mina les asustó mucho. No le di importancia y me fui a la tienda junto a Mina.

Los sacos estaban levemente separados, pero Mina cortó esa pequeña distancia entre nuestros sacos y los juntó.

-¿Que haces, Mina?

-Chaeyoung, no me voy a separar de ti en toda la noche.

-¿De verdad te has creído la historia improvisada de Jeongyeon? Mira que sois...

-¡Oye! No te burles de mi, soy muy miedosa con estas cosas. - Dijo abrazando mi brazo.

-Ya veo... - Dije soltando si agarre de mi brazo.

-Pero... Chaeng...

-¿Que quieres, Mina? - La japonesa soltó un suspiro y empezó a hablar.

-Deja de hacer eso a propósito.

-¿El que? - Me hice la tonta.

-¡Chaeyoung! - Dijo haciendo un puchero. -Bueno, pues lo haré yo misma. - Dijo para luego salir de su saco de dormir e intentar entrar en el mio, ya que cabían 2 personas.

Y así pasamos la noche, abrazadas, en el mismo saco de dormir.








Ayer no publiqué nada porque noe encontraba muy bien y tenía poca motivación para escribir, perdón por eso.

Espero poder publicar alguno más hoy, pero no puedo prometer nada. Nos vemos ;)

ENTRE 4 PAREDES (Michaeng) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora