Después De 30 Años - Gravity Falls

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Mabel: Desde cuándo se conocen? Son amigos hace mucho? Han sido más que amigos? Por qué se separaron? Venías a visitarlo? Tenían citas juntos?

Letti miraba a la niña hacer todas esas preguntas mientras caminaba alrededor de ella en círculos haciendo gestos con sus manos mientras hablaba y pensaba en más cosas que preguntarle.

Letti: Digamos que es solo un viejo amigo

Indicó mientras iba pasando página por página aquel libro que el chico le había dado.

Letti: Estas son cosas muy interesantes. El libro lo hicieron ustedes? Puedo confirmar que he visto alguna de estas cosas yo también por aquí.

Dipper: No- no es nuestro, alguien más ya había investigado este lugar, pero nadie aquí parece darse cuenta de las cosas extrañas que hay! Es un alivio al fin encontrar a alguien que nos cree!

Letti: Lo mejor va a ser que si van a alguna de esas aventuras locas, pueden llevarme. Voy a encargarme de que no se mueran.

Comentó sonriendo mientras se ponía de pie y le devolvía el libro al chico.

Letti: Le iré a preguntar a su tío si tiene espacio para mi en esta cabaña, al final del día me la paso sola en esa casa, un poco de compañía no me vendría mal.

Llevó sus manos a su nuca, adentrandose en la cabaña en busqueda de aquel hombre.

No tardó en encontrarlo sentado frente a la televisión, la cuál apagó al oír los pasos de la fémina.

Stan: Finalmente. Te tomaste tu tiempo! Vas a arreglar mi espalda?

Letti: Si me permites.

Lo levantó del sofá y al alzarlo la espalda volvió a sonar haciendo que el hombre se queje por el momentáneo dolor.

Stan: Te mantienes en buena forma a pesar de los años-

Letti: No puedo decir lo mismo Pines.

Hubo un pequeño silencio entre ambos, hasta que Stan lo rompió.

Stan: Ah... cómo se encuentra la pequeña Maple?

Letti: Bien, bien, aún se acuerda de ti. Eso es lo que he oído por llamada...

Stan: Ninguno de ellos te ha ido a visitar?

Letti: Al menos no en estos últimos 6 años... Ya sabes cómo es.

Stan: Si... Te ves, muy bien por cierto, aparentas unos buenos 40 años.

Eso hizo reír a la mujer, rompiendo un poco más el hielo.

Letti: Tú pareces más viejo de lo que eres, te has descuidado en la figura.

Stan: Hey, juró que intenté ir a visitarte pero...

Palmeó su hombro, indicando que no importaba, y a continuación le pidió si podía quedarse en aquella cabaña.

Fue sincera con él, lo más que se le permitía, la soledad en ese hogar y la rutina la estaban volviendo loca, quería sentirse acompañada por alguien que conocía.

Stan: Vas a volver a ayudarme con este lugar?

Letti: Oh por Dios... Me voy a arrepentir, pero sí, te ayudaré

Sobó su rostro suspirando, recordando los momentos que atravesaron cuando ambos se dedicaban a la cabaña del misterio.

En esos tiempos, Stan no se metía en tantos problemas, no porque no cometería crímenes, sino porque su camarada estaba ahí para encubrirlo, y casi siempre resultaba bien.

Mabel: SOLÍAS TRABAJAR AQUÍ?? AYUDANDO AL TÍO STAN!

Ambos se dieron vuelta al escuchar el grito de la niña, y pudieron ver a los gemelos espiando por el marco de la puerta.

Parecía que ahora la mujer iba a tener que responder ciertas preguntas.

Y por la repentina desaparición de Stan, lo cuál no fue sorpresa para ella, supo que iba a pasar sola el interrogatorio.