《un pasado no retornable》|| todobaku ||

Capitulo 12

Desde una distancia segura, un grupo de figuras se mantenía oculto entre las sombras, observando con una mezcla de interés y impaciencia el caos que se desataba en el palacio. Entre ellos, Dabi, o mejor conocido como Touya, se destacaba por su presencia imponente. A su lado, Toga y Shigaraki intercambiaban comentarios sobre el desenvolvimiento de los eventos.

—No sé cómo es que eres tan bueno para actuar tu muerte dos veces, Dabi —dijo Toga con una sonrisa que combinaba admiración y sarcasmo. Sus ojos brillaban con una intensidad inquietante, reflejando la emoción del momento.

—Y es que... —Dabi respondió con un tono frío, su mirada fija en el campo de batalla—. No es difícil cuando sabes cómo manipular las expectativas. La muerte es solo una ilusión para aquellos que buscan el caos.

—Ya dejen de hablar, esto va mejor de lo que esperaba —intervino Shigaraki con una voz grave y autoritaria. Sus ojos estaban fijos en el bicolor, que ahora se enfrentaba a su padre en un enfrentamiento crucial. Shigaraki observaba con un aire de satisfacción contenida, claramente complacido con el desarrollo de los acontecimientos.

—Te lo dije, ¿no? El destino ya estaba escrito. Ahora solo queda acabar con él —Dabi señaló al bicolor a lo lejos, su tono cargado de determinación y frialdad. Su mirada estaba llena de una mezcla de resentimiento y anticipación. El plan se estaba llevando a cabo con precisión, y la escena ante ellos era solo el principio de un drama mayor.

—Solo hay que esperar el momento adecuado —añadió uno de los otros miembros del grupo, su voz llena de expectación. La tensión en el aire era palpable, y todos sabían que el desenlace de la batalla podría traer consigo consecuencias importantes para todos los involucrados.

—Esto es solo el principio —confirmó Dabi con una sonrisa enigmática—. La verdadera prueba está por venir, y la caída de Endeavor es solo el preludio de algo mucho más grande. Estamos en la cúspide de un cambio monumental, y solo queda esperar para ver cómo se desarrollan las cosas.

Mientras el grupo observaba desde la distancia, el caos en el palacio seguía intensificándose. El enfrentamiento entre Shoto y su padre, el colapso de la autoridad y el conflicto generalizado estaban creando una atmósfera de tensión que prometía cambiar el curso de la historia.

A medida que el caos en el palacio se intensificaba, Dabi, Toga, Shigaraki y el resto del grupo esperaban pacientemente desde su escondite. La batalla estaba en su punto álgido, y el palacio, antes símbolo de poder y autoridad, ahora se veía sumido en una turbulencia descontrolada. Los gritos y el estruendo de la lucha resonaban en el aire, creando un contraste inquietante con la calma de los observadores.

—Es solo cuestión de tiempo —murmuró Dabi, observando atentamente al bicolor desde su posición. Sus ojos seguían cada movimiento, cada cambio en la batalla. La confrontación entre Shoto y su padre estaba llegando a su clímax, y Dabi sabía que el momento para intervenir se estaba acercando.

Toga, por su parte, parecía ansiosa, sus dedos jugueteando con el mango de un cuchillo. Su mirada estaba fija en el bicolor, admirando su determinación y fuerza. A su lado, Shigaraki mantenía una postura tranquila, pero sus ojos revelaban una concentración aguda. El caos que se estaba desatando era justo lo que él había planeado para preparar el escenario para su siguiente movimiento.

—Mira cómo se desmorona todo a su alrededor —comentó Shigaraki, su voz cargada de satisfacción—. No solo está en juego la caída de Endeavor, sino también el inicio de una nueva era. La confusión y el desorden que están creando solo fortalecerán nuestra posición.

—Sí, pero debemos ser cuidadosos —añadió Dabi, su tono más grave—. No podemos permitir que nuestras emociones nublen nuestro juicio. La batalla de hoy es solo una pieza en un rompecabezas mucho más grande. Cuando llegue el momento, debemos asegurarnos de estar listos para dar el golpe final.