IX. Conocerte.

291 36 7
                                        

"Mañana."

Y le azoto la puerta en la cara.

Cuando Nigel despertó de su plácido sueño se replanteo muchas cosas, él no era gay. Porque esas personas eran anormales y asquerosas. Se levantó quitándose la ropa para darse una ducha de agua fría porque no estaba pensando con la cabeza correcta.

Pero aún así curiosidad podía más con él, mientras se mordía el labio pensando si tomar su laptop fue un "al diablo con todo, no es como que alguien me esté viendo y me vaya a juzgar". Se sentó en la mesa para investigar sobre las relaciones gay.

El primer sitio web era "¿Qué hago si me siento atraído por un amigo pero no soy gay?"

Daba consejos base, como no avergonzarse por que alguien sea del mismo género y si apenas replanteemos nuestra identidad no privarnos de experimentar.

Los siguientes sitios fueron algo así hasta que llegó a uno de consejos sexuales, era lo que él se temía y cerró de golpe su computadora por asco, no creía que cuando ya iba viendo lo sano y objetivo mentalmente salieran con eso, no iba a volver a leer más.

Maldita curiosidad incomprendida.

Volvió a abrir la laptop y siguió leyendo, capaz aprendía algo nuevo, pero fue un rato de cerrarla, abrirla de nuevo y luego perderse pensando en como funcionaria eso, pero tuvo que volver a bañarse cuando sus pensamientos fueron muy agraviantes sobre Adam.

El día entero se torturó pensando y pensando, estaba muy molesto con todo esto, el nunca creyó pasar por algo así. Pero Adam, Adam era toda una cuestión, era tan impredecible que al parecer le pasaba ese efecto a las personas a su alrededor, ahora él también estaba cambiando sin control. Ahora, ¿En serio pensaba en Adam de esa manera? No lo veía como pareja, el chico no era el tipo de hombre que es cursi o siquiera sepa cómo funcionar en una relación, lo sabe por que el siempre le explicaba las metáforas de cualquier cosa.

Pero ese sentimiento era latente en su interior, querer saber cómo sería entonces, cómo sería estar con el chico del 2do piso, que significaba estar con Adam Raki.

Y a la mierda con todo, si nunca le importo un carajo las reglas sociales, mucho menos si es algo que quería, iba a ir por el perdón de Adam, le costó muchos días pensar bien pero sentía que ahora lo estaba haciendo correctamente.

Cuando se sintió lo suficientemente cómodo con su aspecto (pasó varias horas eligiendo en que se vería perfectamente para pedir perdón pero a la vez seductor) fue directamente a la puerta del departamento del chico, respiro, tocó tres veces.


"Soy yo, Adam."

Y espero. Sintió como a todo su cuerpo se le bajaba su natural valentía y por primera vez sintió muchos nervios, llego ahi seguro de lo que quería hacer pero nunca pensó sin verdad iba a ser perdonado, esta podría ser una humillación y también ahora que se daba cuenta que estaba enamorado, una ruptura de su corazón.

Pero algo lo confundió, varios murmullos salían del interior de su apartamento, pero lo que más le llamaba la atención fue la voz de una mujer, era muy tarde para estar en el departamente de un chico. Se escucharon pasos rápidos hacía la puerta y pronto fue abierta.

"Yo quería hablar contigo, quería..."

"Mañana."

El chico ni siquiera lo dejó pensar cuando le cerró la puerta en la cara, pero claro que la vió en ese poco tiempo. Mierda, Beth ¿Tan rápido lo ganó? Aunque claro está, no era una competencia.

Pero se escucharon gritos dentro cuando la puerta volvió a ser abierta de repente en medio de todo ese caos.

"Perdón, hoy, te veo en Central Park en una hora y media dondé siempre."

"Ah.."

No pudo volver a hablar, otro golpe en su cara.

No iba a ir ni de broma, siempre lo lograba sacar de sus casillas, ¿Como pudo ser tan descortés?

Era un imbécil siempre quitando lo gay, todo un caso perdido. Pero se maldijo aún más cuando apagó su cigarro asustado de que Adam lo descubriera fumando cuando recién le dio la oportunidad de volver a hablar y se molestara con él.

Alguien por detrás le hizo tensar todo su cuerpo cuando jalaron su chaqueta.

"No tenías que apagarlo, sigueme."

"¿Al menos me dirás a dónde vamos?"

"Me dijeron que debía decir que era una sorpresa, no debo arruinarlo."

"¿Te dijeron? ¿Alguien? ¿Quién te dijo eso?"

"Nigel. Solo sigueme."

Se mordió el labio inferior aguantando su enojo contra ese chico, siempre tenía que hacer caso, pero solo lo siguió callado hasta que por accidente chocó con él cuando se detuvo en seco enfrente de él.

"Tienes que cerrar los ojos, confía en mí solamente."

"Adam, dime una maldita mierda, estoy siendo paciente y parece que me vas a secuestrar."

"No te voy a secuestrar... Solo es lo último que pido, lo demás lo puedes decidir tú."

Esa oferta era tentadora, tal vez el chico no midió sus últimas palabras de la oración pero sin duda luego usaría eso. Cerró sus ojos y sintió como las cálidas manos de Adam que al parecer quitaron sus guantes tomaban las de él y caminaban lentamente para tener cuidado. Apretó las manos de Adam solo para molestar, lo logró, el chico se tensó provocando que su agarre de ambos solo sea más fuerte, podía escuchar la respiración nerviosa del chico.

"Vamos a agacharnos."

"Que caraj..."

"Recuerdalo, la última cosa."

Ambos se sentaron sin soltarse las manos hasta que estuvieron cómodos en el piso y sintió como el chico por fin lo dejaba. No se sentía como pasto.

"Abre los ojos."

Cuando los abrió estaba en una zona dentro del pasto del parque pero no había muchos árboles, la zona daba una vista bastante hermosa a las estrellas.

Pero enfrente de él estaba la verdadera maravilla, era Adam que se veía visiblemente nervioso mirándolo fijamente. Estaban en un picnic, sobre una manta, había comida y una lámpara de acampar para alumbrar.

"Chico maravilloso." Las palabras de Nigel salieron sin pensar.

"Yo solo queria pedir perdon Nigel, porque no te quería perder como amigo, entiendo perfectamente mi error y no volveré a hablar de más, estaré más que conforme si somos amigos, porque tu sabes explicar todo, además de que eres de mis únicos amigos, mi vida se mezcló mucho con la tuya, eres único Nigel, nadie más podría haber manejado las cosas así, no creo encontrar a alguien así ni tampoco quiero volver a pasar por ese proceso social..."

"Adam."

La respiración de el rizado estaba visiblemente agitada pero trató de callarse rápidamente, Nigel se sentó más cerca de él porque estaban frente a frente.

"Mierda Adam. Eres un maldito idiota homosexual."

Adam sintió como su corazón se hacía pequeño pero rápidamente fue atacado por un feroz beso que lo hizo perder totalmente la respiración y agitar todos sus sentidos.

Se sintió acorralado por los brazos de Nigel que lo tomaron de los hombros para que no tuviera oportunidad de alejarse pero lo empujó como pudo.

Sintió la mirada penetrante del hombre esperando a que hablara si no estaba de acuerdo con esto, pero su respuesta fue un intento de beso suave de parte de Adam.

Nigel solo pudo sonreír y Adam sintió esa sonrisa por lo pegados que estaban sus labios.

"Tu también eres un maldito idiota gay."

No pudieron evitar reír contagiosamente.

"Ahora también eres comediante..."

Y no pudo ser la noche más perfecta en New York.

"Fin."

(Autor: Al fin acabé esta historia como tenía planeado, "acabar" entre comillas porque voy a subir un capítulo extra de ellos con "final feliz" que será la razón por qué esta historia está marcada como madura, gracias a los que me comentaron durante las actualizaciones. Y espero les haya gustado este final).

(Nota 2: Voy a escribir otras dos historias de este multiverso, voy a hacer otra de Nigel x Adam, pero como este fue mi primer fic de ellos es bastante tierno, los que quieran leer otro en mi perfil voy a estar subiendo uno un poco más oscuro de esta pareja y una historia ya más larga y seria Hannigram).

Space dogs. (corto)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora