V de amor de Vida

Volaré

Volaré

Cuando mi cuerpo muera, y quedé reducida a una combinación de putrefacción y ceniza, volaré.
Me arrastrará el viento, llevando junto a mis restos, nuestros sueños y tiempos.
Cruzando los cielos, durante el día seré invisible para los ojos observadores, eclipsada por el sol, tal vez, en la noche, pueda ser fugaz, con una estela de memorias siguiéndome, sirviendo así, como portadora de nuevos sueños.
Puede ser, no lo sé, que te encuentre alguna vez en toda la eternidad. Allí donde mora lo no correspondido, y vidas inconclusas.
Con suerte quizás, llegué a descubrir que en otro tiempo lo nuestro ha sucedido. Mejores tiempos, más bellos. Pero este fue el nuestro, que ni la muerte y el tiempo, consiguieron arrebatarlo de mis manos.
Volaré por eternidades completas, haciéndome pedazos en la eventualidad, hasta el fin de la existencia.
Y entonces podrá ser, quizás, que fuimos un pedazo de instante que quiso ser eterno.
Porque cuando todo acabe, de mí no quede nada y entonces, te encuentre finalmente, tendré una certeza:
Sólo lo que no se ha podido dejar de querer, ni aun queriendo, nos pertenece.
Y seguiré volando.