Una recuperación casi fuera de este mundo, apenas me había quedado una noche en observación, no había nada de malo a la mañana siguiente. El único indicio de mi ataque fue la gran cicatriz en mi hombro.
Más allá de eso no hubo mucho movimiento enemigo, pero fueron más alertas con este tipo aparentemente sin rostro y sin nombre. Logrando noquear a más de 5 ninjas rango chunnin y jounnin no es algo que cualquiera pueda hacer.
Mikoto-san fue la primera en estar a mi lado al despertarme junto con Itachi, mis padres llegaron un día después pidiéndome que sea más precavida y entrene mejor para no ser una carga para el equipo. Sonreí ante todos ellos calmando sus nervios prometiendo hacerme más fuerte.
Shisui solo observó a un costado con clara preocupación en su semblante pero le dedicó una pequeña sonrisa antes de marcharse.
No puedo culpar su manera de pensar, después de todo también fueron ninjas, su mayor prioridad era la aldea y no es algo tan fácil de cambiar, después de todo alentaron a sus hijas para seguir los pasos de una kunoichi.
Aún con todo lo que conlleva esa vida, usar tu cuerpo como arma en más de un sentido...
Itachi se coló la misma noche que desperté y no le soltó por mucho tiempo, sus lágrimas empaparon mi camisa y su agarre casi había arrancado las mangas de la misma.
Eso fue suficiente para quitar mi sonrisa y permitirme llorar como una niña.
No sé cómo el Itachi canon pudo con este peso en el alma de fingir siempre tu sentir.
Es agotador...
El único diferente en todo esto fue Kakashi, su mirada ahora era distante y analítica. Me sentía como un prisionero de guerra en una lucha psicológica.
No pidió explicaciones ni me dio consuelo al despertar, se sentía como antes de volvernos cercanos.
No sabía que había pasado y tampoco sabía que preguntas emplear para una respuesta clara.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Salir del hospital se sentía liberador y al mismo tiempo me metía en otra jaula, raíz había sido lo suficientemente amable como para concederme descanso esos días hospitalizada pero ya era hora de regresar al tablero de juego.
Y siempre se empieza con un peón.
-Mitsuri debido a tu reciente fracaso...- comenzó Danzo de forma decepcionada- esperaré tu progreso antes de tu examen para pertenecer de forma permanente a nuestra organización- habló de forma sugestiva y no era de una buena forma... jamás lo es en raíz-no me decepciones, ¿entiendes?- yo solo asentí lentamente-.
Caminando por los pasillos oscuros sentía las miradas desde la sombras de los miembros, aguardando un mal movimiento para degollarme... una sonrisa se formó en mi boca con la idea de desangrar a cualquiera que venga por mi.
