Examenes chunin parte final

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El día final de los Exámenes Chunin había llegado, y con él, una mezcla de anticipación y nerviosismo. Habíamos pasado un mes entrenando bajo la estricta tutela de Jiraiya, perfeccionando nuestras habilidades y preparándonos para lo que sería una de las pruebas más difíciles hasta el momento. A pesar de todo el entrenamiento, no podía ignorar la creciente sensación de presión que se acumulaba en mi pecho. Los combates de hoy definirían no solo nuestro futuro como ninjas, sino también nuestra valía ante los ojos de la aldea.

El estadio estaba lleno. Las gradas se extendían a lo largo de la arena, repletas de espectadores de todas las aldeas. Podía sentir las miradas de la multitud sobre nosotros, expectantes, esperando ser testigos de batallas memorables. A lo lejos, distinguí la figura del Tercer Hokage, sentado en el palco de honor, observando con una expresión solemne. A su lado, varios jōnins y líderes de otras aldeas intercambiaban palabras en voz baja, seguramente evaluando a los jóvenes ninjas que participaríamos en los combates.

El primer combate del día fue entre Naruto y Neji Hyuga. Sabía que este enfrentamiento significaba mucho para mi hermano. Neji era conocido por su técnica de los Ocho Trigramas y el Byakugan, una combinación que lo hacía prácticamente invencible en combate cercano. Pero Naruto, con su determinación inquebrantable, no estaba dispuesto a rendirse.

"¡Naruto, confío en ti!" le dije antes de que bajara a la arena. "No importa lo que pase, recuerda quién eres."

Naruto me devolvió una sonrisa llena de confianza. "Gracias, (T/N). ¡Voy a demostrarles a todos de qué estamos hechos los Uzumaki!"

El combate comenzó, y desde el primer instante, quedó claro que sería una batalla intensa. Neji, con su calma habitual, utilizaba su Byakugan para anticipar cada uno de los movimientos de Naruto. Con una velocidad impresionante, bloqueaba los puntos de chakra de mi hermano, debilitando su capacidad para usar ninjutsu.

Pero Naruto, como siempre, tenía un as bajo la manga. En lugar de rendirse, utilizó su habilidad de crear clones de sombra para confundir a Neji. Aunque muchos de los clones fueron rápidamente neutralizados, uno logró acercarse lo suficiente como para lanzar un ataque directo. Para sorpresa de todos, el verdadero Naruto emergió de la tierra debajo de Neji, asestando un golpe decisivo que lo dejó fuera de combate.

"¡Ganaste, Naruto!" grité desde las gradas, sintiendo una oleada de orgullo.

Naruto levantó el puño en señal de victoria, mientras la multitud estallaba en aplausos. Neji, aún en el suelo, miró a Naruto con una mezcla de sorpresa y respeto. Había subestimado a mi hermano, y ahora, como todos los demás, debía reconocer su fuerza y determinación.

Después de la pelea de Naruto, fue el turno de Shikamaru y Temari. A diferencia de Naruto, que siempre se lanzaba de frente, Shikamaru era un estratega nato. Desde el principio, quedó claro que su enfoque sería mental, buscando desgastar a su oponente con tácticas cuidadosamente planeadas.

Temari, con su enorme abanico, intentó mantener a Shikamaru a distancia, lanzando ráfagas de viento para limitar sus movimientos. Sin embargo, Shikamaru no parecía preocupado. Observaba cada uno de los movimientos de Temari, esperando el momento oportuno para lanzar su sombra. Sabía que, aunque parecía estar en desventaja, Shikamaru siempre tenía un plan.

Finalmente, en un movimiento que dejó a todos sorprendidos, Shikamaru utilizó la sombra de una cometa caída en el suelo para extender su jutsu, atrapando a Temari y forzándola a rendirse. Sin embargo, en un giro inesperado, Shikamaru decidió retirarse del combate. "Me quedé sin chakra," dijo, encogiéndose de hombros. "De todas formas, ser un Chunin parece un trabajo demasiado problemático."

Los Hermanos UzumakiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora