Caprichos.

29 3 8
                                    

La noche pasó, los dos jovencitos estaban en la gran cama de dos plazas, durmiendo como bebés.
Alejados, porque aunque se hacían los confianzudos, eran muy tímidos en realidad.

El primero en despertar fue Taehyun, al escuchar a su amigo roncar, pensó en cómo podía dormir tanto.
Rió bajo ante ese pensamiento, y tomó su teléfono para checar las redes.
Se dió cuenta que Beomgyu siempre estuvo ahí también, a través de su cuenta "Secreta".

Tae se sintió tan tonto por no poder darse cuenta antes de todo ésto. Tenía un desorden en su mente... Oh, sólo algo ordenaría eso.

Se levantó silenciosamente y se fue a la cocina, a preparar el desayuno.
Cocinar es como estar en una cita con el psicólogo.
Estaba preparando waffles, le encantaban y más si eran con frutas.
La paz se acabó cuando alguien despertó.

Lo miró, sonriendo como bobo.
- Oh, buenos días. - Miró la hora, y apenas eran las nueve. - ¿Ya no tienes sueño?

Gyu se estiró un poco, incómodo.
- Fue mala idea dormir con un jean... - Dijo, a modo de queja.

Hyun suspiró pesadamente.
- Perdón, no lo había notado. Espera, te daré algo mío...
Caminó de la cocina hasta su clóset, que se encontraba cerca del baño.
- Mmmm... - Miró a Gyu, indeciso. - Tengo miedo de que estas cosas te queden muy cortas.

- Cortas quedarán, mira lo que eres y mira lo que soy. - Beom apareció detrás suyo. - Pero no importa, dame cualquier cosa, estaré bien con eso.

Hyun rió bajo.
- Entiendo... Bueno... - Encontró unos pantalones negros, que parecían ser hasta la rodilla. - Aquí tienes algo.

Se los dió, y siguió buscando alguna camiseta.
Encontró una azul, que parecía ser bastante corta como para él.
- Vaya, no tengo otra más grande... Lo siento.

- Esa está bien. - Gyu restó importancia. - Gracias, bonito.
Y se dirigió al baño, para cambiarse de ropa.

Mientras tanto, Hyun siguió con la tarea del desayuno.
Intentaba ocultar sus nervios.
Porque a los minutos, Gyu salió del baño y se dirigió directamente a la cocina.

- ¿Cómo me veo? - Preguntó él, sonriendo tímidamente.

Taehyun lo miró con atención.
Los pantalones quedaron como shorts, apretados a sus muslos. La camiseta quedaba al cuerpo y si prestaba atención, se notaban los músculos bien trabajados del joven.

Se veía tan lindo, no, tan atractivo... Pero claramente no lo diría.
- ¡Bien!

- ¿Bien? - Beom habló desanimado. - Oh, bien, entonces...
Se sentó en las sillas de la cocina, mirando a su amigo y a su desayuno en camino.
- Waffles de fruta, vaya, que asco ¿Me haces uno de chocolate?

Tae rió.
- Buen chiste.

- Quiero de chocolate. - Dijo Gyu, seguro. - ¿Nunca probaste uno?

Joven con complejo de niño caprichoso entrando en acción.

- No, Gyu, nunca... Y no tengo chocolate.
Contestó Tae, y lo miró.
- La fruta es mejor. Es dulce, rica y sana. Nada de chocolate para tí, pequeño.

La hora del desayuno había pasado, ahora ambos estaban viendo la televisión

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

La hora del desayuno había pasado, ahora ambos estaban viendo la televisión.
Había una publicidad de cine.

- ¡TITANIC! - Gyu saltó del sillón. - ¡Y en doblaje! ¿Podemos ir?
Miró a Hyun con ilusión.
- Quiero ir, quiero ir contigo. Es tu película favorita y también la mía.

- ¿Cómo sabes eso? - Tae, otra vez, se sorprendió.

Al final no sabría qué contestar,
¿Quién estaba más enamorado?
No tenía idea,
Pero ninguno estaba dando el primer paso,
Y Hyun lo estaba deseando demasiado.

DRIVE ME CRAZY, PLEASE.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora