DRIVE ME CRAZY, PLEASE.

I know you

¿Cómo se suponía que durmiera ahora?
Taehyun estaba mareado, en su cabeza sólo habían recuerdos de esos tiempos ahora, desordenados.

Ese niño gracioso, amable, ruidoso y tierno... Que siempre estaba en las fotos de su infancia en Estados Unidos, y en el álbum de jardín de infantes...

Ese niño que jamás volvió a ver al entrar a la primaria, Era Gyu.
Siempre fue Gyu.
Maldita sea Taehyun, como no te diste cuenta.

Sus pensamientos tuvieron un stop cuando una voz adormilada lo llamó.

- Hyun... Tengo frío... - El joven con complejo de niño caprichoso apareció en su habitación. - ¿Tienes otra manta?...
Beomgyu se sentó a su lado.

- No, Gyu... Eso es todo lo que tengo... - Lo miró a los ojos. No le diría lo que había descubrido. - Duerme aquí, en mi cama. Yo iré para allá, a la sala.

Beom negó rápidamente.
- No, no puede ser así. Yo soy el invitado.

- Y por eso debes dormir cómodo, pequeño. - Tae se levantó, pero Gyu lo jaló del brazo.

- De ninguna manera, Hyun... Espera, ¿Pequeño? ¿Así me llamaste?

Beomgyu se ofendió por el apodo.
- ¿Me llamaste pequeño? - Se levantó, y miró a Taehyun fijamente. - Pequeño eres tú ¿Cuánto mides, metro y medio?

Tae rió bajo.
- Sólo fue un apodo cariñoso, gruñón.

Ambos quedaron en silencio, sonriéndose. Ok, era raro.
Beomgyu miró los labios de Taehyun en un momento, no quería pensar en eso, pero se veían tan... Besables.
¿Es correcto decirlo así?

Hyun rió levemente al notarlo, mirándolo, le preguntó:
- ¿Por qué me miras tanto?

Gyu sonrió.
- Sólo te estoy admirando.

- Ve a dormir, pequeño. - Siguió insistiendo el otro.

- Quédate conmigo. - Pidió el menor.

Y Taehyun asintió, sin otra salida.
- Está bien, no veo porqué no...

Beom ante eso sonrió, sonrió como nunca.
Lo logró, logró que Taehyun se "Aflojara" Un poco.

- Ya sé que sabes... Eso. - Cambió de tema, poniéndose un poco más serio.

Hyun lo miró, sorprendido.

- Que talento tienes para... Saber todo lo que está en mi mente.
Sonrió levemente.
- Sabías mi dirección, mi fruta favorita, mis gustos musicales obvios, mis debilidades... Nunca me olvidaste.

Gyu se acercó a su rostro, disimuladamente.

- Yo nunca podría olvidarme de alguien así como tú. Fui tu amigo desde mis tres años hasta los seis, fue poco tiempo, pero, Hyun, eras mi único amigo, el único que traía a casa para jugar, el único que me quería y aceptaba con mis "Rasgos y acento raro"... Yo era pequeño, pero con la memoria bien fichada.

Le sonrió cuando terminó de contar eso, abriendo su corazón. Y agregó:

- Todo este tiempo te he recordado mediante nuestra última foto, fue en tu cumpleaños, tenía seis y tú tenías ocho. Te viniste al colegio de esta cuidad en este país, y jamás volví a verte.

Gyu soltó algunas lágrimas.

- Tengo dieciocho, no fue hace mucho tiempo y eres especial, por eso lo recuerdo tan bien.

Taehyun no tenía palabras, sólo notaba como cada parte del rompecabezas aparecía, formando aquellos lindos recuerdos junto a ese niño.

- Todo esto hiciste para encontrarme. - Habló Hyun, conmocionado. - Recordabas mi cumpleaños porque fue la última vez que me viste, y fijaste justo esa fecha para tu concierto... Wow, Gyu, que dulce...

- Todo eso hice para reencontrarme contigo. Te sigo desde mi cuenta privada ¿No haz visto? - Gyu sacó su teléfono, y le mostró. - En cada publicación tuya hay un me gusta de mi parte. Jamás he perdido el contacto.

Tae rió, soltando algunas lágrimas confusas.

- Estás de mente.
Le contestó y lo abrazó, como si Beomgyu fuera un gran peluche.