capitulo 6. La Obsidiana Orden

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Izuku, Todoroki, y Toga caminaban por las callejuelas oscuras de la ciudad, avanzando hacia el lugar que Toga les había descrito como la guarida de la Liga de Villanos. Las sombras se cernían sobre ellos, arropándolos en una capa de oscuridad casi tangible. Después de unos minutos de caminata silenciosa, llegaron a un edificio ruinoso, abandonado, con grafitis y manchas de sangre en las paredes.

Toga se acercó a la puerta y golpeó tres veces con un ritmo específico. Pasaron unos momentos antes de que la puerta se abriera con un crujido, revelando a Dabi, su piel quemada y cicatrizada, observando al trío con desconfianza.

Dabi: "¿Quiénes son estos? No recuerdo haberles invitado."

Toga: "Él es Izuku, y creeme, Dabi, querrás escucharlo. Tiene un poder que hará que la Liga de Villanos alcance nuevas alturas."

Dabi miró a Izuku de arriba a abajo, sin convencerse del todo. Sus ojos se estrecharon con desconfianza mientras evaluaba la situación.

Dabi: "¿Ah sí? ¿Qué tipo de poder tienes que te hace tan especial?"Izuku dio un paso adelante, su voz baja y gélida resonando en el pasillo.

Izuku: "Tengo el poder de las sombras. Puedo corromper a cualquiera, absorber su voluntad y convertirlos en mis marionetas. Puedo destruir cualquier cosa que se interponga en mi camino. Y lo mejor de todo, cuanto más miedo siente la gente, más poderoso me vuelvo."

Dabi lo miró con frialdad, pero había un brillo de interés en sus ojos.

Dabi: "¿Y qué es lo que buscas de nosotros? ¿Por qué deberíamos siquiera considerarte?"

Izuku esbozó una sonrisa oscura.

Izuku: "Porque, como ustedes, estoy cansado de este mundo de falsos héroes y corrupción. Quiero destruir todo lo que representa esta sociedad podrida. Juntos, podemos desatar un nuevo orden, uno donde el miedo y el dolor sean la ley."

Dabi se quedó en silencio unos instantes antes de apartarse de la puerta, permitiéndoles pasar.

Dabi: "Adelante, pero Shigaraki será quien decida si te unes o no. Él manda aquí."

Los tres siguieron a Dabi por un pasillo oscuro hasta llegar a una sala amplia y destartalada. En el centro, sentado en un sillón viejo, estaba Tomura Shigaraki, su rostro parcialmente cubierto por una mano blanca, sus ojos rojos brillando con interés al ver a los recién llegados.

Shigaraki: "He oído rumores sobre ti, Izuku Midoriya. El chico que todos creían muerto y que ahora se pasea por las calles, causando estragos. Dime, ¿qué es lo que realmente quieres?"

Izuku sostuvo la mirada de Shigaraki, su voz firme y segura.

Izuku: "Quiero lo mismo que tú, Shigaraki. Quiero ver el fin de esta sociedad de héroes. Pero no me interesa simplemente seguirte; quiero expandir tu visión, hacerla más grande y más destructiva de lo que jamás imaginaste."

Shigaraki se inclinó hacia adelante, intrigado.

Shigaraki: "¿Y cómo piensas lograrlo?"

Izuku: "Con mi poder, y con el tuyo, podemos crear algo más grande que la Liga de Villanos. La Obsidiana Orden será un imperio de sombras, donde los héroes serán cazados y destruidos. Podemos controlar el miedo y el dolor, y usarlos para moldear el mundo a nuestra imagen."

Shigaraki se quedó en silencio por un momento, pensando. Sabía que unir fuerzas con Izuku significaría compartir poder y control, pero también sabía que el potencial destructivo de Izuku podría ser la clave para alcanzar sus propios objetivos.

Finalmente, Shigaraki se levantó de su asiento y extendió una mano hacia Izuku.

Shigaraki: "Muy bien, Midoriya. Demuestra que eres capaz de cumplir tus promesas, y estaré dispuesto a seguirte en esta cruzada.

"Izuku estrechó la mano de Shigaraki, una sonrisa de satisfacción cruzando su rostro. Las sombras a su alrededor parecían oscurecerse, reflejando la maldad que crecía en su interior.

Izuku: "Es hora de empezar. El mundo no sabe lo que se avecina, pero pronto, lo sentirán en cada fibra de su ser. La era de las sombras está a punto de comenzar.

"Mientras las risas malvadas resonaban en la sala, Izuku supo que su plan estaba en marcha. La Obsidiana Orden se levantaría, y con ella, traería un nuevo amanecer de terror y destrucción.

La alianza entre Izuku Midoriya y la Liga de Villanos estaba oficialmente sellada. La noche había caído, y el aire en la guarida de la Liga se cargaba de una tensión palpable. La planificación para el próximo paso en el nuevo orden comenzaba.

Izuku y su grupo se reunieron en una mesa grande en el centro de la sala, donde Shigaraki y Dabi se unieron a ellos. Toga estaba en un rincón, jugando con un cuchillo, sus ojos brillando con anticipación. Todoroki permanecía a un lado de Izuku, su mirada fría y calculadora.

Shigaraki: "Entonces, ¿cuál es el plan, Midoriya? ¿Cómo piensas que la Obsidiana Orden se enfrentará a los héroes y, más importante, cómo planeas empezar?"

Izuku se inclinó hacia adelante, su mirada fija en Shigaraki mientras desplegaba un mapa de Japón sobre la mesa.

Izuku: "El primer paso es desestabilizar el sistema de héroes desde dentro. Sabemos que atacar directamente podría alertar a todos, así que debemos ser más sutiles. Mi plan es infiltrarnos en los centros de poder, crear caos y miedo desde las sombras."

Todoroki asintió, su rostro serio. Todoroki: "¿Y cómo planeas hacerlo? ¿Con tus sombras?"

Izuku: "Exactamente. Mis sombras pueden infiltrarse en lugares que los héroes no pueden detectar. Puedo corromper a los individuos clave, convertirlos en nuestros aliados sin que siquiera se den cuenta. De esa manera, podemos desatar el caos desde adentro y preparar el terreno para un ataque más directo cuando el momento sea el adecuado."

Dabi: "¿Y qué hay de los héroes más fuertes? ¿Cómo piensas manejarlos?"

Izuku sonrió, un destello oscuro en sus ojos. Izuku: "Para ellos, tengo otros planes. Crearé distracciones masivas, actos de terror que los mantendrán ocupados mientras nosotros llevamos a cabo nuestra infiltración. La clave es mantenerlos ocupados y asustados. Cuando se den cuenta, ya será demasiado tarde."

Toga: "¡Suena emocionante! ¿Puedo ayudar con los héroes menos importantes? Me encanta la sangre y el caos."

Izuku: "Por supuesto, Toga. Tu habilidad para pasar desapercibida y causar estragos será valiosa. Ataca a los héroes de bajo perfil, crea desorden y siembra el pánico. Cada pequeña victoria cuenta en este plan."

Shigaraki se reclinó en su silla, observando a Izuku con interés. Shigaraki: "Me gusta lo que estás diciendo. Parece que finalmente tenemos un plan que podría funcionar. Pero no olvides, necesitamos que todos los miembros de la Liga estén de tu lado. ¿Qué harás para asegurarte de que se unan a tu causa?"

Izuku: "Ya me he ocupado de eso. Mi influencia se extiende más allá de lo que imaginan. A medida que avancemos, el miedo y el dolor se volverán nuestras armas más poderosas. La gente no tardará en ver la verdad y unirse a nosotros por su propia voluntad."

Dabi: "Espero que tengas razón. No quiero que todo esto sea en vano."

Izuku se levantó de la mesa, su expresión grave y decidida. Izuku: "Confía en mí. El mundo está a punto de cambiar para siempre. La corrupción y el egoísmo de los héroes serán expuestos, y nosotros seremos los que derrotemos esta sociedad podrida. Prepárense, porque el verdadero caos está a punto de comenzar."

Mientras Izuku y su equipo se preparaban para llevar a cabo su plan, el reloj marcaba el inicio de una nueva era de terror. La alianza entre Izuku y la Liga de Villanos estaba ahora completa, y la Obsidiana Orden estaba lista para desatar su visión de un nuevo orden mundial. Con cada paso que daban, el mundo se adentraba más en la oscuridad que Izuku había prometido traer.

Izuku Midoriya: El Emperador Del Dolor Donde viven las historias. Descúbrelo ahora