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Sus esfuerzos por mantener a Lilith alejada de Samael fueron en vano, pues aquellos ojos que antes no mostraban interés en el Serafín ahora mostraban una gran curiosidad, pero sobre ello mostraban anhelo y cariño, una vez más Lilith había sido corrompida, ¿fue su culpa? La verdad no sabía dar una respuesta clara a ello, pues Samael había cumplido con decirles a los demás Ángeles del Cielo que él era portador de Alas y de ropa, y que en efecto él es un Ángel, fue por ello que lo tomaron como un regalo de su todo poderoso Padre, y ahí inicio su nuevo trayecto de ir y venir del Edén al Cielo y viceversa, fue gracias a eso que Samael aprovecho para llenarle la cabeza a Lilith de sueños, de promesas de ideas que él había plantado pero que Samael decidió quitar a la fuerza para poner las suyas.

¿estaba molesto? La verdad no ¿estaba dolido? Tampoco, para él era cuestión de tiempo que eso pasara ya que a su punto de vista siempre había posibilidad de que ese suceso se volviera a repetir, pero esta vez él no tendría la culpa, él no se sintiera culpable, lo que paso ya paso, y antes hubiera llorado, antes hubiera estado completamente destrozado, pero el ya no era ese niño el cual su Padre dejo en el Edén, no él era Adán el Ángel del Edén, era la jodida primera verga de toda la creación, además si permitió que el cabron de Samael se fuera con Lilith, fue solamente porque el deseaba que sus chicas volvieran con él, Lute, Xana, Carina, Jaqueline, Linda, Rosario, Amande, Kikyo, Xanandra, Maria, podía seguir rememorando cada uno de los nombres de sus chicas, inclusive de quien también es la traidora Vagatha.

Fue por eso que no pidió un castigo para Lilith o Samael, pues por ahora los mantendría al margen, ahora que no solo era el primer hombre sino que un Ángel el acceso al Cielo era ya de por si ilimitado, pero claro tampoco dejaría que el Edén se quedara solo, lo que es su hogar lo aprecia con todo su ser ahí se encontraban sus amigos animales, ellos no lo atacarían como paso en la Tierra Primordial, pero ahí venia el otro detalle, la humanidad, él era el Padre de la humanidad y no existía humanidad y solo existiría si Eva era creada pero ahí estaba el otro detalle, si Eva nacía también lo haría el pecado todo para él era muy complicado, la verdad es que ama a su Eva, pero le dolería que ella vuelva a cometer los mismos errores que cometió en su primera vida.

Ahora el "Angel Of Edén" se encontraba en su hogar el jardín del Edén, caminando a su lado dos tigres de véngala que se mantenían a su par sin dejar de acompañarlo, ambos una pareja y acompañaban a su amigo ya que Lilith se había marchado ellos podían intuir que su amigo no se encontraba bien, aunque Adán no lo demostrara si le afecto que Lilith otra vez se marchara, pero al menos esta vez el no sentiría culpa y mucho menos dolor.

- Grrrr – gruño el tigre a su lado

- lo se . . . Ella ya no volverá Eddie, ella ya eligió su camino y si eso quiere pues que haga lo que quiera – respondió Adán a su amigo

- Grrr – gruño la tigresa a su costado

- Tri, ella ya no está, se fue con ese puto de mierda de Samael, ella ya no tiene permitido entrar al Edén – dijo Adán viendo a su amiga felina – saben que, ella puede irse muy a la mierda, me da igual si esa perra se va, yo trate de ser un buen esposo esta vez y aun así se fue, así que puede ir a chuparle la polla pequeña al puto de mierda, pero yo no llorare por ella, soy el jodido Adán y nada me derrumbara

Ambos felinos solo asintieron ante lo dicho por su amigo por lo que solo lo siguieron, Adán trato de pensar en que podía hacer, ahora su herida en el pecho era sola una cicatriz del pasado una que sería permanente, ahora que lo pensaba el pasado había una persona que nunca más había visto desde que se había marchado con Eva a la Tierra Primordial, por lo que pidiéndoles a sus dos acompañantes que se retiraran que él debía de hacer algo importante este solo extendió sus alas y salió volando con rapidez hacia un lugar en específico.

Volviendo al PasadoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora