Capítulo 1.- Cansada de besar sapos.

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"siempre el deseo de ser amado hace que veamos amor donde no lo hay" 

Desde que era una simple adolescente siempre he tenido dificultades para encontrar a un hombre que me ame incondicionalmente, que sea sincero, honesto, trabajador, fiel, que no me diga lo que quiero escuchar, que sea bondadoso, que no le moleste mi éxito, en fin que sea un compañero, que sea real el amor y creo que el hombre indicado para mí no existe o al menos pensaba que no existía, que estaba muerto o quizás que ni siquiera haya nacido, he conocido a muchos chicos, unos lindos otros no tanto, pero siempre he tenido muy claros mis límites, mis no negociables y a cualquier Red Flag me alejaba sin mirar atrás, nunca he perdonado una infidelidad y tampoco he sido la amante de nadie, ya que no he nacido para eso.

Otro motivo por el que también me ha costado trabajo conectar con un hombre es creer en los vampiros, brujas, sirenas y en todo lo paranormal, ya que cuando le cuento a un chico que me gusta ese tipo de cosas sale corriendo o me ve raro y nunca más me vuelve a hablar. 

Por eso decidí que lo mejor era abandonar un poco eso, deje de escribir o fantasear con encontrarme con un vampiro y ser inmortal, siempre bajando mis estándares para poder encajar y poder encontrar una pareja linda, lo peor de todo es que al bajar esos estándares me perdí a mi misma aún más de lo que ya me sentía en ese momento, tratando de ser normal a como la sociedad esta acostumbrada y seguir siendo miserable al no sentirme amada y lo peor de todo por un hombre.

Así que decidí acostumbrarme a eso y concentrarme en otras cosas, madurar como muchos me decían o me aconsejaban y seguir con las cosas importantes que en ese momento eran como la universidad, pensar en algún emprendimiento o empresa la cual siempre he querido y tratar de amarme un poco más. 

Pasaron los años de universidad e ingresé a la especialidad de Recursos Humanos para poder titularme por que el examen CENEVAL o la elaboración de la tesina, no era una de mis opciones, no me sentía con las capacidades para poder pasarlos, así que surgió esta oportunidad, una en el área que me quería desarrollar, ya qué mi papa siendo contador, estaba en el área de Recursos humanos en uno de los mejores hoteles de la ciudad de México. Al mismo tiempo también entre a mi primer trabajo para así poder pagar las mensualidades de la especialidad, continuando con todo lo demás. 

Durante la especialidad cambie de trabajo y entre a uno que me gustaba mucho en el cual duré dos años y durante ese tiempo estuve saliendo con uno que otro chico, pero aburriéndome fácilmente sin poder conectar con ninguno de ellos. Poco después de concluir la especialidad, casi todos mis conocidos y amigas, empezaron a encontrar a sus compañeros de vida, se empezaron a casar, tener hijos, formar una familia, mientras que yo con 25 años seguía sola y sin tener nada serio, añorando ser feliz, pero sin lograr serlo conmigo misma, gran paradoja ¿verdad?.

Después de muchas historias similares de desamor y casi un año después de concluirla, obtuve mi título y cédula, y el siguiente paso coherente era encontrar un trabajo acorde a lo que acababa de obtener, ya que en el trabajo que estaba aunque me gustaba, ya no me pagaban como debía ser.

Me puse en marcha en la búsqueda de otro trabajo, después de unos largos y desesperantes 8 meses de búsqueda y estando en mi casa sintiendo que no avanzaban las cosas al ritmo que yo quería, logré encontrar uno en una empresa en la que me podía desarrollar profesionalmente y ascender, valiendo la pena toda esa espera por que por fin iba a tener un sueldo acorde a mi profesión y me emocionaba mucho. 

Dando comienzo esta historia en la que una mujer con mucho amor para dar, poco autoestima en su cuerpo, belleza y forma de ser, se encuentra con un hombre que cree es el indicado, pero resulta ser un NARCISISTA!! la victima perfecta para robar su LUZ...



*Nuevo capítulo cada lunes y jueves.     

El ladrón de luzDonde viven las historias. Descúbrelo ahora